La ciencia no necesita tijeras…
La investigación no es un lujo, es una necesidad para una sociedad que pretenda avanzar hacia el bienestar y la estabilidad futura. Si nuestra economía ha caído como una bola de plomo desde la Torre de Pisa ha sido por culpa de una industria inmobiliaria irracional, de una política financiera demencial y de un apostar por «pan para hoy y hambre para mañana». Solemos decir que somos un país de pandereta, y desgraciadamente en muchos asuntos es totalmente cierto.