Bufones y juglares de gesta

Hecho en falta, en lo tiempos que nos ha tocado vivir, de la autocrítica bufona de los principes. Concepto que no se debe confudir con la sátira que consiste en el desdoro del contrario mediante la trivilización de sus ideas y hechos, así como del sarcasmo y la burla. (Ahora denominada friquismo y que es una denominación sucedánea de la anterior, cuyo único fin es dar un escape etimológico al burlado y acentuar su memez. «Freaks», en inglés, se utilizaba para definir a las atracciones circenses que por su aspecto o condición fueran dignas de exposición sin mas mérito que estas).

No, yo no me refiero a los que Platón, en su «Republica», lanzaba invectivas en contra de un genero concreto de graciosos muy celebrados en las fiestas helénicas: «Aquellos que eligen por costumbre (para suscitar las risas) el imitar el mugir de las reses, el piafar de las caballerias» y otras variantes de lo que luego paso a denominarse espectaculos bufos (de bufido). Si no más a los que actuaban y acompañaban al rey y que tenían gran libertad de palabra y critica, siendo, a menudo, los únicos que podían expresarse contra las normas sociales o del gobierno, e incluso su humor podía llegar a afectar y cambiar su política: Los bufones de corte.

Como Yu Sze, el del Emperador Chino Shih Huang-Ti que reviso la Gran Muralla China: «El emperador planeaba también pintar el muro lo que hubiera provocado la muerte de otros muchos miles de personas mas que las que ya habían muerto en su construcción. Su bufón fue el único que se atrevió a criticar su plan. Yu Sze, bromeando lo convenció para que abandonara su idea. Yu Sze es recordado hoy en China como un héroe nacional».

Ó uno de los mas famosos bufones de las cortes Europeas, Nasir Ed Din: Un día el rey se vio en el espejo, y triste por lo viejo e incapaz que se veía, empezó a llorar. Los demás miembros de la corte decidieron que lo mejor que podían hacer era llorar también. Cuando el rey paro de llorar, todos pararon de llorar, excepto Nasir Ed Din. Cuando el rey le pregunto a Nasir porque el continuaba llorando, el replico, «Señor, tu te has visto a ti mismo en el espejo solo por un momento y has empezado a llorar. Yo te visto, así, desde hace tiempo».

Solamente el que denota inteligencia se ríe de si mismo y de sus circunstancias, y solamente la autocrítica y la constricción revelan el verdadero valor de los reyes. Los cómicos y titiriteros que celebran las bienaventuranzas del príncipe ya tienen nombre: Los juglares de gesta. Estomagos agradecidos, burladores desde el desdén que no reflejan mas que la complacencia suya y la de sus amos en mercados y ferias, al no arriesgar mas que su propio criterio, dormido bajo el peso de las monedas.

3 pensamientos en “Bufones y juglares de gesta

  1. Felix: si este Blog trata temas prosaicos, yo tengo una melena natural que me cubre la cabeza!
    Comparto contigo, en mi niñez y mi adolecencia sobre todo, pasé por momentos muy difíciles, y el reírme de mi mismo y hacerme bromas de humor muy negro realmente, me ayudaban a seguir. Cabe aclarar que una cosa es que vos te rias de ti mismo, o te hagas bromas de humor negro, a que provengan de terceros.

    La vida tampoco hay que tomarsela tan en serio, tal vez me lo este escribiendo a mi mismo en parte.

    Finalmente, reirse de uno tiene una pizca de sabiduría.
    Abrazo
    Marcial

  2. Gracias, de nuevo Marcial, por tus comentarios, estás en tu casa.

    ¡Bueno..! Tal vez hayas dado con lo menos prosaico.. ¡Que lo hay..!

    Si me permites la licencia, hablando de bromas, dice el dicho:»A vid retrocida mejores uvas». Lo que importa es el triunfo del presente, el resto debe pasar al anecdotario y como parábola educativa para tu futuro.

    Un Abrazo. Félix

  3. ”A vid retrocida mejores uvas” Pues me has hecho sonreir y reflexionar con este dicho, y en tu reflexión tienes toda la razón.
    Gracias por hacerme sentir como en casa!
    Abrazo,
    Marcial

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