Códigos jurídicos hittitas. Las primeras leyes escritas laicas

No cabe duda que la leyes, tal y como las conocemos, son a la civilización lo que la civilización fue a los principios de la Agricultura. Una estrecha relación que acompañará siempre al hombre en su posterior evolución cultural y social, y que a lo largo de la Historia, revelando su importancia, nos vendrán plasmados en los relatos mitológicos de forma intemporal. Así, y como ejemplo, los textos órficos  nos advierten que el hombre, en sus principios, se regía por la regla del mas fuerte y practicaba la antropofagia; unos comportamientos que serán erradicados gracias a la intervención de las divinidades por las que serán instruidos. – Según estos mitemas, Dionisos se apiada de la Humanidad y le envía a las diosas portadoras de la Agricultura y las leyes (Órficos, 641)  –  Relato similar no es proporcionado por la mitología egipcia donde el primer faraón y organizador social,  el dios Osiris,  es la representación viva de la Agricultura.

Código de Ur- Nammu

Código de Ur- Nammu . 2050 a.c. aprox. III dinastía de Ur. Museo Arqueológico de Estambul.

 « (1) Si un hombre comete un asesinato, ese hombre deberá ser muerto;  (2) si un hombre comete un robo, el será muerto (…) (16) Si  [un hombre a otro hombre con un cuchillo de bronce] le ha cortado el pie, tendra que pagar diez siclos (10x11gramos) de plata ;   (17) si un hombre a otro hombres, con un arma, Ios huesos . . . ha fracturado, tendrá que pagar una mina (60 siclos) de plata ; (18) si un hombre a otro hombres, con un cuchillo de bronce, ha cortado la nariz, tendrá que pagan dos tercios de una mina de plata » Código de Ur-Nammu. 2100-2050 a.c.  aprox.

A diferencia de las primeras conclusiones que podríamos sacar del párrafo anterior, el Hombre, como animal gregario que es, hemos de entender que siempre ha mantenido un ordenamiento social que permitiría evitar, sino eliminaría,  en lo posible conflictos graves, así como incentivar un grado de convivencia dentro de los clanes familiares, con el fin de evitar riesgos que vulneraran la propia supervivencia del grupo. De hecho, y mas próximos en el tiempo, ya en el Natufiense, disponemos de conocimiento sobre recintos donde, entre otros, parece se dirimían las rencillas intro e inter-clanes – Ordenamiento social que vendría personalizado en los ancestros como prima fuente de la moral y  de la ética – y donde, posiblemente, se impartiera justicia.  Sigue leyendo

Mitología mesopotámica. El dios Enki: Desde el acadio Ea hasta el hebreo Elyon.

Si bien S. Parpola (2014), en unas consideraciones preliminares, estima que el dios Enki –  la diosa Inanna lo sería de Durgā – tiene su paralelismo en el dios Varuṇa, dándonos a entender una vinculación de personalidades entre el panteón dravidico-védico y el mesopotámico – Suposición ésta última en la que no puedo estar mas de acuerdo, pero no tanto en cuanto a  Varuṇa, un dios de origen indoeuropeo, y si con la divinidad de origen dravidico: Vishnu -,  tal vez el papel de la divinidad patronal de la ciudad mesopotámica de Eridu(g) sea mas prolijo de lo que en un principio tal propuesta pudiera darnos a entender. Un papel que será mas global y que paulatinamente ira cambiando como consecuencia de un proceso aglutinante de las creencias de Oriente Próximo y el Mediterráneo Oriental, así como su evolución,  a lo largo de miles de años.

Remeros

Estampación de cilindro-sello acadio. Aparece Ea/Enki flanqueado por los remeros del «Ibice del Apzû». A su derecha Usimud, su consejero, sosteniendo uno de los símbolos del dios, junto al ave y el pez.

« El exuberante Señor de los Cielos y la Tierra, el Colmado; Padre En-ki, engendrado por un toro, nacido de un toro salvaje, bendito de En-lil, la Gran Montaña, amado del santo An, el Soberano; árbol-meš surgido del Abzu, que se yerge sobre todas tierras; gran dragón que mora en Eridug, cuya sombra cubre el Cielo y la Tierra, bosque de vides que se extienden sobre la Tierra, En-ki, Señor de numerosos dioses Anuna, Nudimmud; ¡Sostén del E-kur, todopoderoso en los Cielos y la Tierra! Su gran casa está cimentada en el Abzu, el gran amarradero de los Cielos y la Tierra. En-ki, de quien una sola mirada es suficiente para perturbar el corazón de las montañas; donde el bisonte nace, donde nacen los ciervos, las cabras montesas, donde nacen, donde nacen las cabras salvajes, en prados […], en las oquedades del corazón de los montes, en el verdor […] no hollado por el hombre, el que ha contemplado tanto las entrañas de la Tierra como la espesura  en  los cañaverales. » Pasaje de «Enki y el Orden del Mundo»; 1-16.  Texto amorrito-babilónico. año 1900-1600 a.c. Sigue leyendo

La revolución Neolítica. Los primeros pasos para la privatización del Conocimiento.

La «Revolución Neolítica»… Nadie puede poner en duda que el episodio social que aconteció primeramente en Oriente Próximo pueda ser considerado como una «mala idea». Tal es así, que supuso una salida, tras un duro acontecimiento climático, para la supervivencia de parte de la raza humana. Si bien hoy, y generalmente,  se  tiende a pensar que la «tecnología» que acompañó a éste episodio decisivo fue realmente innovadora, caso de la domesticación agro-pecuaria, tal propuesta no deja de estar, como así parece ser, bastante lejos de la realidad. De hecho, posiblemente, estas técnicas ya fueran conocidas, aunque poco utilizadas ante la falta de necesidad de aplicarlas, y que sólo las circunstancias vitales de parte de grupos humanos exiliados pensaron en hacer sistemáticas. Sigue leyendo

La «prostitución sagrada» en las antiguas culturas mesopotámicas.

«Enki respondió a Ninmah: «Yo decreté un destino para el primer hombre con las «manos débiles»(impedido), le  di pan (sustento). Decreté un destino para el hombre al que «la luz le volvió la espalda» (ciego),  le di el pan, Decrete un destino para  el hombre con amputaciones, con parálisis en los pies,  le di pan. Yo decreté un destino para el hombre que no puede contener su orina (eneurético), le di pan. Decreté un destino para la mujer que no puede alumbrar (estéril), le proporcioné su pan. Yo decreté el destino para aquellos sin pene (eunucos) o vagina en su cuerpo (agenésica), yo les di pan.» Pasaje del poema  de Enki y Ninmah, 102-110.  II milenio a.c.

En el relato anterior a éste pasaje, y dentro del poema de Enki y Ninmah,  el dios Enki es felicitado en un banquete por los dioses tras haber creado a la Humanidad, siendo éste hecho molesto, por ignorar su contribución, a ojos de Ninmah, la parera de Enki. Así éste poema, que habla someramente de la «creación de mundo»,  toma el tono de los antiguos «tensones» o «dialécticas enfrentadas» propias de los antiguos textos sumerios y acádios , desarrollándose una diatriba entre el dios y la diosa alrededor de sus respectivas relevancias en el hecho  de  la creación humana: Una como «Naturaleza creadora» y otro como «Hacedor de sus destinos». Al final del relato es Enki quien consigue sobreponerse a la diosa, dando un futuro a los «supuestos errores» que la Naturaleza comete en la creación del hombre.  Uno de éstos «errores» son las mujeres estériles y a las que Enki «da pan»  al posibilitarlas el ejercer un papel en la sociedad mesopotámica.

«Después tomó a una «qadištum» de la calle. Debido a su amor por ella, con ella  se casó a pesar que se trataba de una «mujer- qadištu». La «mujer- qadištu» cogió un niño de la calle y  en la mama, con leche humana, [ella lo cuidó] » Pasaje de las  series «Ana ittišu», VII iii 7-10.  1400-1000 a.c.

Con la raíz acadia «qdš,», –  y que puede ser traducido como «sacro» o «sagrado» –,  nos aparecen generales  nombres o adjetivaciones en los antiguos textos mesopotámicos, tales como  «qadištu«, «qaššatu«o «qašdatu«,  en referencia a una mujer con un determinado estatus social. Por el texto, pudiera parecer  que las qadištu tenían un relación con la calle. Siendo éste, y según los relatos jurídicos, un determinado papel dentro de las estructuras sociales acádias, ya que era  en  la calle  donde la gente que no disponía de casa  se congregaba para ofrecer sus servicios. Si bien por el escrito, y en un principio,  podríamos suponer que tales mujeres eran meretrices, la posición social de una «qadištu» era muy diferente al de una  prostituta. En el «Poema de Enlil y Sud», Enlil confunde a su futura esposa, Ninlil/Sud,  con una «qadištu»,

« Enlil, la Gran Montaña, se detuvo en Eresh y mientras ojeaba por allí, encontró a una mujer de su gusto. Se acercó y, rebosante de satisfacción, entabló  conversación con ella: » Yo te tornaré incomparable con un vestido de gran dama, (aún) después de estar en la calle,  tu serás (…) ¡Cuan impresionado estoy de tu belleza,  siendo, como eres,  una mujer sin vergüenza…! » Pasaje del poema de Enlil y Sud, 12-16.  ETCLS Oxford Oriental Institute.

Representación en terracota de la diosa Narundi o Narunte, la Inanna/Ishtar elamita, procedente de Susa, 2100 a.c. aprox. Museé du Louvre

Cuando tomamos en consideración referencias mesopotámicas sobre cualquier  temática, al igual que  en otros diferentes ámbitos culturales humanos,  debemos  de contextuarlo siempre dentro de un lapso temporal y un ubicación determinada.  De esta guisa, cuando tratemos con simbología religiosa, títulos ciudadanos, o cualquier otro  término social y cultural, hemos de tener en cuenta la evolución  de tales preceptos y sus modismos. Al igual que ocurre en las sociedades actuales, determinadas «etiquetas sociales» mas antiguas son sustituidas por otras nuevas, cambiando parcial, o radicalmente su anterior significado.  Así, por ejemplo,  dentro de la organización social que definen los textos legislativos babilónicos amorritas, la realidad social de las qadištu aparece dividida en dos ámbitos y cuyo ordenamiento civil, en un primer caso,  vienen a definirlas por los términos  «nadîstu«, «kulmašîtu» o «ugbabtu«. Tales mujeres estarían vinculadas con  cultos a una deidad femenina y cuya regulación en el ámbito sexual vendría condicionado por mantener un celibato  o  por estar casadas.  Por otro lado, existirían las «harimtu«, «šamhatu» o «kezertu» que, aunque también pudieran estar vinculadas al culto divino, no disponían de ninguna pauta reguladora en cuanto a sus actividades sexuales.

« No te cases con una «harimtu», cuyos maridos son muchos; Una «ištarîtu» reservada a la divinidad, ni con una «kulmašîtu» cuyos favores (necesidad de..) son muchos. En la desgracia, ellas no te ayudarían. En la adversidad,  se burlarían de ti. Ellas ignoran el respeto y la sumisión » «Babylonian Wisdow literature», pag 102.  Wilfred. G. Lambert

En definitiva,  las funciones de las qadištu son vagas dentro de las diferentes referencias textuales mesopotámicas. Así,  en los textos jurídicos amorrito-babilónicos,  éstas mujeres serían ciudadanos de pleno derecho, podrían casarse, tener niños y ser amas de crías de otras mujeres, En Nippur, en el periodo de Isin-Larsa, 2003-1760 a.c..  hay constataciones escritas de mas de un caso de «nu-gig»  – vocablo sumerio para «qadištu» –.  En la misma época y en referencia a una localidad denominada Inbatum, ,   nos advierte que poseen un  domicilio y  casa propia. –  aunque , por otra parte,  también nos es relatado su envío a Inbatum   como botín para su «sacrificio»  tras una expedición  a Nawar, si bien el significado de tal «sacrificio» no queda plenamente revelado en el texto –. También durante el citado periodo, en la ciudad de Larsa,  el rey Sin-iddinam, 1785-1778 a.c.,  trata a sus enemigos  de «incultos» por no tener  «mujeres-qadištu»  alojadas en sus templos, apareciendo incluso en sus listas estatales de raciones de alimentos.

« ¡Vamos, Lalegre..! ¡Que te asigno ahora tu destino..! ¡Que te asigno, yo mismo, un destino..!  Un destino eterno y para siempre, y que contra ti profiero. Una maldición poderosa que se apodere de ti lo mas rápido posible: «Jamas te construirás un hogar feliz.  mimarás (…). o  entrarás en el harén de las jóvenes.  Los posos de cerveza mancharán tu bello seno y con su vómito el borracho salpicará tus ropajes. A un menaje de alfarero, no tendrás jamás derecho, ni tampoco al contenido del frasco de perfume. La blanca plata, orgullo del mundo, no permanecerá por mucho tiempo en tu casa. La más placentera de tus residencias será la parte delantera de una puerta y tu morada los bordes del camino. Habitarás en la soledad y frecuentarás las sombras de las murallas. Zarzas y espinas dejarán tus pies en carne viva. Borrachos y sedientos de vino te abofetearán a su antojo. En la calle te gritarán y el albañil no tapará las fisuras del techo de tu casa. En tu (…) se instalará la lechuza y nunca habrá alegría. Porque a mi que era libre, tu me has (…) y me has destruido»

Cuando (el dios)  Shamash escuchó las palabras de Enkidu, sin poder contenerse y desde lo alto del cielo, le espeto: » ¿Porque Enkidu maldices a la cortesana Lalegre.., la que te alimentó con alimento divino,  que te dio de comer con comida regia, que te engalanó con suntuosos vestidos y que te dio como compañero a éste  Gilgamesh perfecto..?» » Pasaje de la Epopeya de Gilgamesh. Tablilla VII, 6-39.

Rituales del agua donde aparecen sacerdotisas qaššatu . «Fresco  de la Investidura». Palacio de Zim-ri-lim en Mari. 1775-1761 a.c. Museé du Louvre.

Las «qaššatu«, una forma merita del término, aparecen en dos diferentes textos (ARM  9 291 y 23 296) formando parte censal de diferentes ciudades. En éste censo aparecen catalogadas bajo la denominación de «Amat PN«, «servidora de PN«, «almattum» o «viuda», o como «mujer-qadištu». El primer grupo están bajo el control y autoridad de un tutor – aunque aparece un caso donde están bajo la tutela de una qadištu -, mientras que el segundo y tercer grupo figuran como ciudadanas libres. En Mari, tales mujeres son presentadas como devotas de la diosa Annunîttu, así como del dios Adad en Kish y Sippar – dentro de un contexto de dios de la fertilidad y hermano de Bêlet-Ìli.  Divinidad, ésta última, relacionada con la fertilidad, al igual que Annunîttu -. También en Meri y textos de  Kish, aparecen como participes en  los ritos acuíferos de fertilidad y purificación (G. Lambert, 1960)  – Estos rituales son en extremo trascendentes  en las ceremonias de coronación meritas (Parrot, 1958) – , siendo también en Sippar custodias de los cilindros-sellos de la diosa patronal de la ciudad, Ištar.

Volviendo a los textos del periodo amorrito-babilónico, 1894-1595 a.c. aprox. y dentro de éstos al «Poema de Atra-hasis» y   encontramos el siguiente párrafo donde tales mujeres acompañan a comadronas :  «Permite que la partera se ufane en la «casa de una mujer-qadištu», donde las esposas preñadas dan a luz» . Aparentemente, y según Westenholz, mientras la parteras asistían «físicamente» a la preñada, las qadištu ofrecían las «necesidades rituales»  para un satisfactorio  alumbramiento. En escritos posteriores babilónico-kassitas aparecen como «Madres» (A.T. Clay, 1915) y vinculadas con los partos:  – «Las parteras, que con su habilidad se preocupan del feto y las qadištu, las que realizan las purificaciones con agua.. » (KAR, 321,7) -.  En otra vertiente, y dentro de los escritos clásicos babilónicos – textos  exorcistas Maqlu III, 40-55 y Shurpu III, 69, 116-117 –,  las qadištu aparecen adjetivadas como de hechiceras o brujas, por ser supuestas «mediums» de los poderes demoníacos,  las enfermedades , teniendo durante el primer milenio una doble vertiente como personajes  «benignos» o «malignos» (G. Meier, 1937, E Reiner, 1958, S Rollin, 1983)  Aunque ésta última «popular consideración» vendría dada por oficializar dentro de los  rituales exorcistas templarios  el papel de  la verdadera hechicera y de  sus poderes  y  que durante la ceremonia eran sometidos al exorcista. (S, Parpola, 1983).

En Assur, durante periodo antiguo asirio, 2003-1742 a.c. aprox., las mujeres- qadištu tenían la posibilidad de casarse. (Ass. Code § 40)  Si estaban casadas,  le estaba permitido ir veladas en público, mas había duras penas para las mujeres qadištu  solteras que fueran con velo y de igual manera que en Babilonia, en los textos, aparecen al lado de las parteras en los embarazos. (Afo 17, 268, 11). En los rituales del periodo medio asirio, 1742-1192 a.c. aprox, y al igual que en Kish y Sippar,  las qadištu oficiaban los cultos al dios Adad en la capital asiria junto a los » sacerdotes Sanga» (KAR 154) – o «iššakuk šangû» En Asiria, sacerdote principal  del culto a una divinidad –  entonando y pronunciando el canto «inhu» en cada parada procesionaria para, tras concluir, consumir los restos de las ofrendas junto al sacerdote. En dos textos neo-asirios, 1192-605 a.c. aprox,  aparecen referenciadas las qadištu con funciones rituales, uno en el que se utiliza sal para deshacer un juramento (E. Ebeling, 1953) y otro  hace referencia a su asistencia en las abluciones del dios Shamash (R.F. Carter, 1914)

En tercer milenio a.c. y en Sumer, el término «nu-gig» define a las qadištu sumerias, si bien aparece también en descripciones de las diosas Inanna, Aruru/Ninmah, Nanaja o Nini(n)sina. Pero, y en definitiva, ¿Que significa la palabra  «nu-gig»..?. Según Westenholz, y obviando otra interpretaciones de carácter sexual, puede ser traducido como «lo sagrado»(para los dioses),  lo que un hombre mortal no puede tocar. En definitiva un sinónimo de «tabú» definido tanto para actos, objetos, como a personas.

Impresión del cilindro sello de Mes-ane-pa(da): Aparece la inscripción: «Mesanepada, rey de Kish, esposo de una ‘nu-gig’ » I dinastía de Ur , 2400 a.c. aprox.  U.13607 Vorderasitiches Museum

El oficio de «nu-gig» aparece en la léxica de los textos sumerios figura con una significancia paralela al de los códigos legales del periodo amorrito-babilónico., antes mencionados, apareciendo también en textos administrativos de la ciudad de  Shuruppak, Tell-Fara(h). En el cilindro-sello (izquierda..) aparece la inscripción: «Mesh-ane-pa[da] lugal-Kis dam-nu-gig». (J. Copper, 1986) y que puede traducirse como «Mesanepada, rey de Kish, esposo de una nu-gig» y donde, según Cooper, Renger (1975), tal texto  debe ser interpretado como una referencia a los  rituales de casamiento del rey de Ur y la diosa Inanna, ésta última representada por una sacerdotisa. que siglos mas tarde serán parte de las festividades del Año Nuevo – festivales relacionados con la muerte/vida dentro del ciclo anual de la Naturaleza –. En otro cilindro sello del periodo neo-sumerio aparece la inscripción:  » Nin-kin [da] nu-gig-gal urí [ki]-ma lugal-ha-ma-ti-du-sar ard-zu» y que puede traducirse como «Nin-kin-da, el señor de las nu-gig de Ur, Lugal-hamati, tu siervo», como parte de una organización, y que viene corroborado en otro texto de la ciudad de Lagash (F. Thureau-Dangin, 1903) . En la Lagash pre-sargónida, las «nu-gig» figuran en las listas de reparto de alimentos junto, por casamiento,  a importantes miembros de la sociedad de alta posición (J.M. Asher-Greve, 1975). En la ciudad acadia de Umma nos encontramos con un relato que hace alusión a dos personas: Ín-he-nun, la nu-gig, y Al–la, la «nu-gig nigín» o nu-gig del alumbramiento»(B. Foster 1982). Otro interesante texto no relata la existencia, en el templo a Inanna de Zabalam, de un «ningín-gar»o «lugal sagrado para el nacimiento»(Sölberg). La relación entre las nu-gig, el «nacimiento» y el «ningin-gar»  se da igualmente en el templo de Inanna en Akkade y en el de Nini(n)sina en Isin. 

« Para los miles de jóvenes doncellas, para favorecer la fertilidad y regular el útero. Para determinar el destino, para ayudar a la puerta del ningín-gar, para permitir que el feto llegue a  feliz conclusión:  Un hijo de un hombre que se resguarda en las caderas. Para que llore en voz alta, para depositar la placenta sobre la tierra, y para darle  la vuelta a la cabeza;  La presencia de la  nu-gig , para actuar con rapidez y cantar una alabanza propia, cuando se manifiesta  el gran «mes»(milagro o esencia de las cosas..) mi Señora, ha pronunciado su himno de alabanza, ¡ Nini (n) sina, acertadamente,  a ti misma  alabas! » Himno a Nini(n)sina. «Sumerian religius texts»  E. Chiera (1924)

No cabe duda que la prostitución existía en la antigua Mespotamia, como nos describen textos expuestos anteriormente, pero lo que también es comprobable es que nunca hubo una «prostitución sagrada» ni el Assur, ni en Babilonia y mucho menos en Sumer, como pueden hacernos pensar tanto los relatos griegos como los hebreos. El adjetivo «hieródula» que es utilizado para definir la «prostitución sagrada»– el  término griego es ἱερόδουλοç – viene a referirse al concepto de «esclavas sagradas» dentro de las acepciones que tiene en la cultura griega. una cultura, aunque semejante,  posterior en el tiempo.. En el caso hebreo, si existía tal concepto, y tal práctica,  dentro de los cultos  canaanitas a la diosa Ashera, anteriores a la reforma religiosa del siglo VII a.c.

«Sobre las cimas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de las encinas, álamos y olmos que tuviesen buena sombra, por tanto, vuestras hijas fornicarán y adulterarán vuestras nueras. No castigaré a vuestras hijas cuando forniquen, ni a vuestras nueras cuando adulteren, porque ellos mismos se van con rameras, y con las malas mujeres sacrifican…» Oseas 4: 13-14. Biblia Reina-Valera 1960.


Referencias:

«Tamar, Qedesa, Qadistu and Sacred Prostitution in Mesopotamia! J. Goodnick Westenholz (1989)

Imágenes:

en.arup.cas.cz

inanna-maat.blogspot.com

it.wikipedia.org


El primer gran tratado de Astronomía: La tabla de Venus del rey Ammi-Zaduqa.

A partir del IV milenio a.c. en Mesopotamia, y ya plenamente inmersos en el revolucionario suceso de la agricultura,  se vive  un nivel de desarrollo cultural que permite una utilización sistemática y diversificada del medio. Este nuevo paso en la tecnificación de los medios productivos trajo consigo un incremento en la diversidad de las atribuciones sociales dentro  los asentamientos,  definitivamente inmersa en un periodo urbano o proto-urbano, y que sofistica las funciones  organizativas y legislativas. Éste nuevo paso en la estructuración de las poblaciones, y que tiene como consecuencia una progresiva diferenciación social,  tendrá su  máximo exponente en la institución templaria. El Templo o lugar de culto del dios protector de éstas ciudades-estado  se alzará como  el aglutinador y gestor único de ese progresivo desarrollo socio-económico.

Nomenclatura cuneiforme numérica babilónica

En el último siglo y medio, los arqueólogos han estado excavando en estos recintos religiosos en forma de torre escalonada o «ziggurat» y  han encontrado importantes muestras plasmadas en  barro cocido de su historia. Éstos escritos relatan  un poder político teocrático que  posee en casi su totalidad  las parcelas agrícolas disponibles,  a la vez que se destaca como exclusivo propietario de sus canales de irrigación. En añadidura a su posición como referente religioso del enclave, el templo es un centro administrativo donde se comercia con mercancías y servicios, disponiendo de sus propios talleres manufactureros, y ejerciendo como único centro posible de aprendizaje de los diferentes oficios y artes. No cabe duda que el progresivo desarrollo de éste emporio haría necesario una metodología que  permitiera cuantificar y valorar los movimientos económicos de tales riquezas. También parece lógico pensar en la existencia de un ordenamiento organizativo para su conservación y explotación, así como de unas premisas administrativas que sirvieran  como eje de la burocracia del prominente estado. De los segundos y terceros conocemos su denominación y funciones, se trata de los rituales templarios, y de los primeros su necesidad de crear un sistema contable. Pero un sistema de información de semejante índole haría necesario la creación de un soporte duradero que asegurara su perdurabilidad  en el tiempo y por tanto, su legitimidad y consulta.  Éste soporte será la escritura realizada sobre tablillas de barro mediante una caña terminada en cuña que serían posteriormente cocidas, lo que conocemos genéricamente como escritura cuneiforme.

Como parte de éste sistema, y que progresivamente se fue imponiendo en la Baja Mesopotamia a partir del III milenio a.c.,  la representación  numérica sumeria en escritura cuneiforme fue un excelso logro que permitió el desarrollo de la primera ciencia conocida. Su valor es tal que ha perdurado hasta nuestro días como de uso estandarizado en geometría, así como en nuestra forma de medir el tiempo.  La estructura representativa sumeria es considerada como la base de nuestro actual sistema decimal matemático,  pero con la leve diferencia que la  numerología sumeria era  decimal  sólo para  los cincuenta y nueve primeros números, para a continuación seguir su anotación en sexagesimal.

Tablilla astronómica de Venus. Reinado de Ammi-Zaduqa. 1646-1626 a.c. I dinastía Babilónica. British Museum

Gracias a éste potente método,  los sumerios, y posteriormente los babilonios, comenzaron a ser unos verdaderos expertos en el arte matemático. Ayudados por su impronta, los mesopotámicos fueron los introductores de una de las más preciadas herramientas del cálculo:  Las «tablas numéricas». Tablas que eran utilizadas como ayuda en  operaciones matemáticas simples, recíprocos, cálculos angulares y raíces cuadradas. Más adelante,  los babilonios fueron capaces de resolver ecuaciones lineales y cuadráticas, e incluso algunas con superior potencia, siendo los precursores en la utilización de formulación algebraica en el cálculo geométrico, mucho antes de lo que nos ha dictado nuestra tradición greco-latina. Bajo la dinastía amorrea de Babilonia, siglo XVIII a.c.,  el calendario, así como la nomenclatura de unos meses de estricto origen babilónico, conseguirá ser unificado. Meses que estarán compuestos de 29-30 días – esto era como consecuencia que los babilonios empezaban el mes durante la «Luna Negra» o «Novilunio» y su aparición no es constante. Oscila entre  las 18 y 30 horas anteriores a la «Luna Nueva» – , conformando  un total de 12,4 meses para un calendario lunar que se mantendrá prácticamente inamovible hasta el siglo VI a.c.

Para entender el interés mesopotámico por la Astronomía habría que reconsiderar la evolución de los preceptos religiosos. Dichos cambios vendrán definidos por  la adaptación  de los diferentes panteones  sumerios debido al progresivo asentamiento o  su conquista  por parte de diferentes clanes y tribus semitas de las  urbes sumerias. Éste acontecimiento dará como solución la institución por convergencia de  nuevos credos patronales, caso de la ciudad de Ur/Urim –  donde se comenzará a venerar al dios lunar Sin – , Sippar o Larsa,  -cuyo patrono sera el dios solar Shamash –  y donde las antiguas genéricas creencias a la diosa de la Fertilidad, Inanna  se personalizarán en otra divinidad de carácter semita identificada con el planeta Venus: la diosa Ishtar.  Con la integración en el panteón sumerio de éstas creencias semitas de carácter astral  se produce una intensificación del estudio de los astros como posible fuente de conocimiento de los designios divinos. – anteriormente los estudios astronómicos estuvieron principalmente encaminados  a la obtención de un calendario con una finalidad agrícola – Así en el reinado de Ammi-Zaduqa, 1646-1626 a.c.,  nos ha llegado la recopilación de un estudio de la posición y apariencia de Venus  y que se tiene por el tratado antiguo más importante sobre Astronomía, si bien, y como hemos comentado, también añade una interpretación astrológica de tales acontecimientos y su vinculación sobre hechos mundanos. El extenso panteón astral, que se creará como consecuencia de la unificación, será progresivamente asociado, en su principalidad,  a los distintos fenómenos cósmicos observados – según nos relata el  texto astronómico del » Enûma Anu Enlil» y del que formará parte el texto de las tablillas de Venus – y cuya vigencia se extenderá desde el siglo XVI hasta XII a.c. con la caída de la dinastía kassita babilónica, aunque buena parte  de sus asimilaciones deben ser datadas durante el imperio semita acadio en el siglo XXIV a.c.

Las tablas de Venus del rey Ammi-Zaduqa nos proporcionan  la posición relativa en el cielo,  desde la perspectiva  de un observador en la Tierra en la Babilonia del siglo XVII a.c y  facilitada en años/meses/días, del planeta Venus en  un  ciclo de veintiún años. – Decir que  el  ciclo completo de Venus es de ocho años , es decir 99 meses y cuatro días del calendario babilónico   – donde describe cinco ciclos completos de cuatro fenómenos cósmicos observados:

Mediante el esquema de la izquierda se ha representado el periodo sinódico de Venus  – tiempo que toma su órbita alrededor del Sol en referencia a un observador en la Tierra según un calendario lunar – . y que corresponde a 583,92 días del calendario babilónico que multiplicado por cinco ciclos corresponden a 2.919,60 días o lo que es lo mismo: Ocho años de 365,25 días para un total de 2.922 días del calendario solar actual y donde se puede apreciar la exactitud de la observación. 

Para entender las cuatro efemérides de Venus reflejadas en las tablillas, habría que imaginarnos que encontramos en un punto del Hemisferio Norte y que desconocemos el heliocentrismo de las órbitas de los  planetas. Así, la sensación que tendremos del planeta será la de  una estrella  que se alza y desaparece diariamente, pero a la que se le percibe un progresivo desplazamiento hacia la izquierda del firmamento en el transcurso de un determinado periodo de tiempo. Esta percepción dará como resultado  que  parezca que cada día, Venus,  «amanece» más tarde – Esto verificaría que la Tierra gira alrededor del Sol en el sentido contrario a las agujas del reloj – . Por otro lado,  para un observador terrestre,   El sol giraría en sentido contrario a las agujas del reloj con respecto a la Tierra y definiría porque la posición de determinados fenómenos cósmicos en la astronomía mesopotámica se hicieran en función de la Eclíptica o Ecuador.

Si bien los planetas se mueve generalmente mediante la percepción anterior, llamada «directa», hay veces que los planetas pueden  moverse de forma contraria.  la denominada «retrógrada» . Como Venus está mas cercano al Sol que la Tierra,  cabe la posibilidad que pueda situarse o bien  entre nosotros y el Sol o más allá de él,  según la visión  del observador .  Cuando Venus se sitúa lejos del Sol, moviéndose de forma directa, compartirá su trayectoria y  sumará  su resplandor al suyo.  Pero si su posición es  más cercana al Sol ,  es posible que  tenga un movimiento retrógrado apareciendo  a ojos de nuestro observador que se mueve de forma más rápida que el  propio Sol por  ir éste de derecha a izquierda. También existen ciertos puntos, visto desde la Tierra, donde puede parecer que no se aprecia ningún movimiento – marcado en el diagrama como EM y EA –: El primer episodio corresponde,  tomando de ahí el nombre  de «Estrella de la Mañana», cuando en el Amanecer el planeta es visto frontalmente al Sol Naciente, pero donde al Atardecer, Venus, se mueve por debajo del horizonte antes del Sol y por ello será «invisible» durante ese momento.  Cuando se sitúa, desde la perspectiva del observador, en el punto que hemos denominado EA, Venus, sólo puede ser visto por la tarde, tomando entonces el nombre de «Estrella del Atardecer», mientras  que por la mañana y como consecuencia de la incidencia de los rayos del Sol, no puede ser visto. Cuando el planeta se sitúa en la zona superior de la conjunción, «Horizonte de visión oculto»,  o en la zona de inferior  de la conjunción, más cercano a la Tierra, Venus no puede ser visto por el observador por ser también oculto por el brillo del Sol.  Siendo  los vértices de la zona inferior de conjunción del planeta donde se define el comienzo o la finalización de sus efemérides como «Estrella de la Mañana» y «Estrella del Atardecer», así como de sus respectivos periodos.

Según estos fenómenos astrales observados, los babilonios definían el «estado divino»  de la diosa Ishtar, en su ambivalencia como diosa de la Fecundidad y de la Guerra. En el «Enûma Anu Enlil» en su tablillas 59-63, correspondientes a las «Tablas de Venus», el nombre habitual para la diosa era «[d/mul] dil-bat» , «La Estrella Brillante»  formando parte de la triada celestial junto a Shamash y Sin.  Así en los textos exorcistas «Utukku Lemnûtu» (CT 16, 19-54). parece un texto donde Enlil,  después de conferenciar con Enki, ubica a Sin, Shamash e Ishtar para mantener el orden en «Šupuk šame»,  los Cielos, junto a Anu. 

Con la ascensión a los Cielos de Ishtar, se produce un ruptura en la tradición del panteón mesopotámico. El planeta Venus siempre tuvo un carácter «bisexual» , cambiando su sexo en función de las dos mas importantes efemérides conocidas según su posición con respecto al Sol. Ishtar adopta una personalidad  de hombre y de «maleficiencia» cuando entra en el ciclo de «Estrella del Atardecer», y benéfica y femenina cuando lo hace como «Estrella de la Mañana» (BPO  II, pag 46. Texto IV, 6-7a)

 «Te invoco, Señora de las señoras, Diosa de las diosas. Ishtar, Reina de los territorios habitados, que otorgas el orden a los pueblos, antorcha brillante de los Cielos y la Tierra, esplendorosa luz de los territorios habitados. Donde tu miras allí resucita el muerto, sana el enfermo, el desdichado se vuelve próspero al ver tu rostro. He sido yo quien te ha llamado, tu servidor fatigado, derrumbado, herido. Mírame, Señora, y acoge mi súplica, pon tu mirada confiada sobre mí, escucha mi ruego. Concédeme la gracia para mi cuerpo tembloroso, turbado y desconcertado; gracia para mi dolorido corazón anegado de lágrimas y sufrimiento; gracia para mi alma que suspira y llora. Pon tu benévolos ojos sobre mí, desde tu esplendoroso rostro mírame. Es en tí en quien confío, Señora, pues he sido atento; es a tí a quien suplico, cancela mi deuda, absuelve mi falta, acoge mi plegaria, libera mis ataduras, devuélveme la libertad, guía mi paso, que, radiante como un señor, recorra de nuevo el camino de los hombres» «Himno a Ishtar».  Primera dinastía de Babilonia. RA, XII, 170-171. Año 1600 a.c. aprox.


Referencias:

«Cosmos, an illustrated History of Astronomy and Cosmology» John North (2008)

«Mesopotamian Astrology» Ucha Koch-Westenholz (1995)

«Ancient Near East, An Anthology of texts and pictures» James Bennett y otros (2011)

Imágenes:

bloganavazquez.com

en.wikipedia.org


Mitología Mesopotámica. Poema de Enki y Ninhursag.

«¡ Sagradas son las ciudades – y vosotros sois aquellos a lo que les son entregadas! ¡Sagrada es la Tierra de Dilmun, sagrado es Sumer – y vosotros sois aquellos a lo que les es entregado! ¡ Sagrada es la Tierra de Dilmun,  Sagrada es la Tierra de Dilmun!  ¡Virginal es la Tierra de Dilmun, virginal es la Tierra de Dilmun! ¡Inmaculada es la Tierra de Dilmun! ¡El yació con ella en el  Dilmun  y el lugar donde Enki había yacido con su pareja,  seguía siendo  virginal e inmaculado! ¡El yació con ella en el Dilmun y el lugar donde yació con Ninsikila, seguía siendo virginal e inmaculado!

En el Dilmun, el cuervo no graznaba (y) la perdiz no cacareaba; El león no mataba (y) el lobo no se llevaba a los corderos. El perro no había aprendido como acurrucar a los niños  (de miedo y ) el cerdo no había aprendido que el grano fuera comestible.  Cuando la viuda extendía la malta sobre el tejado, los pájaros no habían aprendido que la malta se pudiera comer  allí (y)  la paloma, por aquel tiempo, no metía la cabeza bajo el ala.

Ningún enfermo de los ojos decía: «Yo soy un enfermo de los ojos». Nadie que tuviera dolor de cabeza decía: «Yo tengo dolor de cabeza» Ninguna anciana,  en edad de serlo,  decía: «Yo soy una anciana». Ningún anciano, en edad de serlo, decía: «Yo soy un anciano». Ninguna soltera en estado de suciedad (periodo…)  (texto perdido…) en la ciudad. Ningún hombre dragando el río decía: «Se está volviendo sucia (el agua)» Ningún heraldo  hacia su ronda en el término de su distrito. Ningún cantor entonaba un «elulam» (canto funerario…)  (y) ningún lamento era pronunciado en las afueras de la ciudad (en los cementerios…)

Ninsikila dijo a su padre Enki: «Tu  has legado una ciudad», «tu has legado una ciudad» ¿Porqué no la has dado utilidad para mi? Tu has legado una ciudad, Dilmun. Tu has legado una ciudad. ¿Porqué no la has dado utilidad para mi? Tu  has dado una ciudad ¿Qué me legas? Tu has dado (…), una ciudad que no tiene muelle en el río.  ¿Qué me legaste? (Una línea fragmentada…)  Una ciudad que no tiene campos, ni gleba, ni labranza. (Tres líneas perdidas..)

(Enki contestando a Ninsikila)  «Cuando Utu suba a los Cielos,  aguas claras brotarán para ti de la tierra en los pozos a orillas de Ezen, del radiante y alto templo de Nanna (y) de la boca de las aguas subterráneas. Haré que las aguas vengan crecidas en sus grandes cuencas ( y así)  tu ciudad tendrá agua en abundancia. Haré que tus acequias de agua salada se conviertan en acequias de agua dulce. Haré que el puerto de tu ciudad sea un emporio en la Tierra. Haré que el puerto del Dilmun sea un emporio en la Tierra.  (Posible punto de inserción de las líneas procedentes de Urim/Ur…) . Haré que la Tierra de Tukriš embarque para ti oro de Harali (y) lapislázuli (…) . Haré que la Tierra de Meluhha flete para ti un rico cargamento de preciosa cornalina, madera sagrada de Magan, y madera de «abba» en los grandes barcos. Haré que la Tierra de Marhasi extraiga preciosas piedras de topacio. Haré que la Tierra de Magan ofrezca su fuerte (y) robusto cobre, diorita, piedras «u» y piedras «šumin» Haré que los Territorios del Mar ofrezcan su madera de ébano (..) de un rey. Haré que las Tierras de los que habitan en tiendas ofrezcan sus exquisitas multicolores lanas. Haré que la Tierra de Elam te ofrezca su escogidas lanas, su tributo. Haré que el regente de Ur ,  lugar del trono real, cargue en grandes buques sésamo, regios vestidos y finos ropajes. Haré que el ancho mar  te proporcione sus riquezas. Las casas de la ciudad son buenas casas, las casas de Dilmun son buenas casas. Su grano es un grano pequeño, los días son extensos días, sus cosechas son triples y su madera (…) madera»

En ese instante, en ese día, las aguas crecieron en sus grandes cuencas (y)  su ciudad bebió abundantemente de ellas.  Sus acequias de agua salada se tornaron  en acequias de agua dulce. Sus campos, gleba y labranza produjeron grano para ella. El puerto de su ciudad  se convirtió en un emporio en la Tierra. El puerto de Dilmun  se convirtió  en un empeorio en la Tierra. En ese instante, en ese día, y bajo el Sol,  ocurrió.

Solo el sabio hacia Nintur, el País de la Madre.  Enki el sabio, hacia Nintur, el País de la Madre, estaba metiendo su falo dentro en los diques, sumergiendo su falo en los cañaverales  El divino sacó su falo y grito: ¡Ningún hombre tomará lo mio en los cañaverales!. Enki grito: ¡ Por el aliento de vida del Cielo, yo te  conmino!  Yace conmigo en el pantano, yace conmigo en el pantano que será placentero. Enki esparció el semen destinado para Damgalnuna. Derramó el semen dentro del útero  de Ninhursag, la Madre del País, y ella concibió el semen dentro del útero, el semen de Enki.

Para ella un mes fue un día. Para ella dos meses fueron dos días. Para ella tres meses fueron tres días. Para ella cuatro meses fueron cuatro días. Para ellas cinco meses fueron cinco días. Para ella seis meses fueron seis días. Para ella siete meses fueron siete días. Para ella ocho meses fueron ocho días. Para ella nueve meses fueron nueve días. En el momento propio de la mujer, como ha de ser. Placenta como, como ha de ser. Placenta, como caldo de la abundancia. Nintur, la Madre del País,  como debe ser. La placenta vio nacer a Ninnisig.

A su vez, Ninnisig salió de las riveras del río.  Enki fue capaz de verla allí por encima de los cañaverales, era capaz. El dijo a su ministro Usimud: ¿Es ésta la  hermosa joven que no puede ser besada?. Su ministro Usimud le respondió: ¿Es ésta la hermosa joven que no puede ser besada? ¡Es ésta Ninnisig la que no puede ser besada? ¡Mi Señor, sal a navegar! Permíteme  el navegar.  El salió a navegar.  Permite el navegar. (Pero) antes de poner los pies en el barco,  puso sus pies sobre la tierra firme. El la cogió del pecho (y) la besó. derramó el semen en la vagina  de ella y ella concibió el semen dentro de ella, el semen de Enki. Para ella un mes fue un día. Para ella dos meses fueron dos días. Para ella nueve meses fueron nueve días. En el momento propio de la mujer, como ha de ser. Placenta como, como ha de ser. Placenta, como caldo de la abundancia, Ninnisig como debe ser. La placenta, vio nacer a Ninkura.

A su vez, Ninkura salió de las riveras del río.  Enki fue capaz de verla allí por encima de los cañaverales, era capaz. El dijo a su ministro Usimud: ¿Es ésta la  hermosa joven que no puede ser besada?. Su ministro Usimud le respondió: ¡Besa a esta hermosa joven! ¡Besa a la hermosa Ninkura! ¡Mi Señor, sal a navegar ! ¡Permíteme el  navegar!.El salió a navegar. Permíteme el navegar. (Pero) antes de poner los pies en el barco,  puso sus pies sobre la tierra firme. El la cogió del pecho (y) la besó. derramó el semen en la vagina  de ella y ella concibió el semen dentro de ella, el semen de Enki. Para ella un mes fue un día. Para ella dos meses fueron dos días. Para ella nueve meses fueron nueve días. En el momento propio de la mujer, como ha de ser. Caldo como, como ha de ser. Caldo, como caldo de la abundancia, Ninkur como debe ser. Caldo, que vio nacer a Uttu. la exaltada/receptiva mujer.

(Punto de inserción de líneas originales de origen desconocido…) 

A su vez Ninkura dió a luz a Ninimma. Se llevó a la niña y la crió. A su vez Ninimma salió de las riveras del río. Enki estaba remolcando su barca (y) el fue capaz de verla allí (por encima de los cañaverales..) El puso los ojos en Ninimma y le dijo a su ministro Usimud: ¿He besado alguna vez a una joven como ésta? ¿He hecho el amor alguna vez a una joven como Ninimma? Su ministro Usimud dijo: ¿He besado alguna vez a una joven como ésta? ¿He hecho el amor a una joven como Ninimma? Su ministro Usimud le contestó: ¡Mi Señor sal a navegar!  ¡Permíteme navegar! El salió a navegar. Permite el navegar. (Pero) antes de poner los pies en el barco, puso sus pies sobre tierra firme. El la cogió del pecho, yaciendo en su entrepierna hizo el amor a la joven y la besó. Enki derramó el semen dentro de la vagina de Ninimma (y) ella concibió el semen en el útero. El semen de Enki.

Para la mujer un mes fue un día. Para ella dos meses fueron dos días. Para ella tres meses fueron tres días. Para ella cuatro meses fueron cuatro días. Para ellas cinco meses fueron cinco días. Para ella seis meses fueron seis días. Para ella siete meses fueron siete días. Para ella ocho meses fueron ocho días. Para ella nueve meses fueron nueve días. En el momento de propio de la mujer, como ha de ser. Placenta como, como ha de ser. Placenta, como caldo de la abundancia. Ninimma,  como debe ser. La placenta vio nacer a Uttu, la exaltada/receptiva mujer.

Nintur dijo a Uttu: «Déjame que te advierta y deberías hacer caso de mi consejo» «Déjame decirte unas palabras y deberías prestar atención a mis palabras» Desde el pantano a  aquí  un hombre es capaz de verte, el es capaz; Desde el pantano hasta aquí, Enki, es capaz de verte, es capaz de verte, es capaz. El pondrá sus ojos sobre tí» (10 líneas de texto perdido)  Uttu, la remilgada mujer (…). (Tres líneas de texto corrompidas) (Uttu dice.) » Lleva los pepinos en (…), Lleva las manzanas con los tallos que le salen, lleva las uvas en su racimo, (y)  en la casa. ¡Tu has de mantener atados las lazadas de mi vestido! ¡O Enki, tu has de mantener atados los lazos de mi vestido!

Cuando el estaba llenando con agua una segunda vez. El llenó  los diques de agua, el llenó los canales con agua, llenó el barbecho con agua. El Agricultor, en su alegría (¡?), se levantó del polvo (y) lo abrazó. ¿Quien eres tú (…) el agricultor? Enki (dijo a) (…) agricultor. (cuatro líneas perdidas…) El (labrador…) le llevó pepinos, le llevó manzanas con los tallos que le salen, le llevó uvas en su racimo, le llenó su regazo. (Entonces) Enki hizo su rostro atractivo y tomó una vara en su mano y fue a por las lazadas de Uttu llamando a su puerta. ¡Abre…, abre!  ¿Quien eres tu..? ¡Yo soy un labrador! . Permíteme darte pepinos, manzanas y uvas a fin que consientas. Alegremente Uttu abrió la puerta (y) Enki dió a Uttu, la remilgada mujer, pepinos (…) , le dió manzanas con los tallos que le salen, le dio uvas en su racimo. El escanció cerveza para ella en general larga medida. Uttu, la remilgada mujer, (…)  a su izquierda, movió las manos para el. Enki «despertó» a Uttu. El la cogió del pecho, yació en su entrepierna, acarició sus muslos, la acarició con la mano. Yaciendo  en su entrepierna hizo el amor a la joven y la besó. Enki derramó su semen en la vagina de Uttu  (y) ella concibió su semen en el útero, el semen de Enki. Uttu, la hermosa mujer exclamó: ¡Ay, mis muslos…! ¡Ay, mi cuerpo…! ¡Ay, mi corazón…! ¡Ninhursag, quita el semen de los muslos…!  (Dos líneas corrompidas…)

Ella hizo crecer la «planta árbol», hizo crecer las «plantas de miel»,  hizo crecer los vegetales,  hizo crecer el alfalfa (¿?), hizo crecer la «planta de attutu»,  hizo crecer la «planta aštatal», hizo crecer (…) planta, hizo crecer la «planta amharu». Enki fue capaz de verlo allí por encima de la marisma, el fue capaz de verlo allí, era capaz. El dijo a su ministro Ekimud:  ¡Yo no he determinado el destino de esas plantas..! ¿Qué es esto…? ¿Que es esto…? Su ministro Ekimud le dio la respuesta: «Mi Señor: ¡ La planta árbol!, lo cortó y se lo dio de comer a Enki» «Mi Señor: ¡»La planta de la miel»!,  la arrancó  y  se la dio de comer a Enki» Mi Señor le dijo: ¡ Vegetales!,  los cortó  y se lo dio de comer a Enki» «Mi Señor le dijo:  ¡Alfalfa (¿?)!,  la cortó y se la dio de comer a Enki . Mi Señor le dijo: ¡ La «planta attutu»!, la cortó y se la dio de comer. Mi Señor le dijo: ¡La «planta aštatal»!, la cortó y se la dio de comer. Mi Señor le dijo: ¡La «planta (…)»!, la cortó y se la dió de comer. Mi Señor le dijo: ¡La «planta amharu»!, la cortó y se la dió de comer. (Entonces)  Enki determinó el destino de las plantas, había sabido lo que había en sus corazones.

Ninhursag maldijo el nombre de Enki: ¡Hasta el día de su muerte, nunca volveré a verle con los «ojos que dan la vida» El Anunna se sentó en el polvo, pero un zorro fue capaz de hablarle a Enlil: ¿Si le consigo a Ninhursag…? ¿Cual será mi recompensa…? Enlil contestó al zorro: «Si tu consigues a Ninhursag para mi, levantaré dos «árboles birch» para ti en mi ciudad y te será reconocido.  El zorro ungió su cuerpo. Primero se deshizo de su piel (¿?) , primero puso «khol» en sus ojos. (cuatro líneas corrompidas)  El zorro dijo a Ninhursag:  » He estado en Nibru (Nippur), pero Enlil.  He estado en Urim (Ur), pero Nanna. He estado en Larsam (Larsa), pero Utu (…) He estado en Unug (Uruk), pero Inanna (…) Estoy buscando refugio con alguien  ¿Quien es (…) (Siete líneas ilegibles)

Ninhursag se apresuró al templo.  La Anunna se despojó de su vestido, hizo (…), determinó su destino (y) (…) Ninhusarg hizo sentar a Enki sobre su vagina (una línea de Nippur…)  Ella colocó (¿?) sus manos sobre (…)  a su lado.

Ninhursag preguntó: «¿Hermano mío (Amante…), que te duele..? La coronilla (parte alta de la cabeza «ugu-dili»  me duele (y)  ella hizo nacer  a Ab-u de ella (de la cabeza de él…) ¿Hermano mío, que te duele..? Las raíz del mi pelo («siki»)  me duele. (y) ella hizo nacer a Ninsikila de él ¿Que te duele…?  Mi nariz («giri») me duele (y) ella hizo nacer a Ningirutud de él.¿Hermano mío, que te duele..? Mi boca («ka») me duele (y) ella hizo nacer a Ninkasi de él. ¿Hermano mío, que te duele..? Mi garganta («zi») me duele (y)  ella hizo nacer a Nuzi de él. ¿Hermano mío, que te duele..? Mi brazo («a») me duele (y) ella hizo nacer a Azimua de él.¿Hermano mío, que te duele..?Mis costillas («ti») me duelen (y) ella hizo nacer a Ninti ¿Hermano mío, que te duele..? Mis costados («zag») me duelen (y) ella hizo nacer a Ensag de él.

Ella dijo: «Para lo pequeños a los que he dado a luz no puede faltar recompensa. Ab-u se convertirá en Señor de la Vegetación» Ninsikila se convertirá en Señora de Magan» «Ningirutud se casará con Ninazu», «Ninkasi será la satisfacción de mi corazón…». «Nuzi se casará con Nindara», «Azimua se casará con Ningišzida». «Ninti será la Señora de los Meš (y) Ensag será el Señor de  Dilmun.»

¡Alabado sea el Padre Enki…!

Referencias:

http://etcsl.orinst.ox.ac.uk/cgi-bin/etcsl.cgi?text=t.1.1.1#

Los desvaríos de Z. Sitchin. Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos (II)

Con esta nueva entrada continuaremos nuestro recorrido por ese mundo de «incontinencia intelectual» que son los libros del malogrado Zecharia Sitchin, y cuyos primeros párrafos del capítulo 5 «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos», de su libro ·El doceavo planeta», dejamos con la «exquisita primera conclusión» que Inanna/Ištar era una aeronauta/astronauta.

El texto prosigue, tras el «primer esfuerzo», de esta guisa:

« El antiguo Testamento llamaba a los «ángeles» del Señor malachim -literalmente, «emisarios» que llevaban los mensajes divinos y hacían cumplir los mandatos de Dios. Tal como se nos revela en multitud de casos, eran aviadores divinos: Jacob los vio subiendo una escalera celeste, a Agar (la concubina de Abraham) le hablaron desde el aire, y fueron ellos lo que llevaron a cabo la destrucción de Sodoma y Gomorra. »

Primero hacer un inciso para contextuar: Estos pasajes de Génesis corresponden a la labor de los escribas hebreos en los siglo VIII-VII a.c aproximadamente. – y esto es debido a que Israel, como tal, es inexistente con anterioridad al siglo VIII a.c – .  Escribas que para su concepción se basaron en los escritos amorrito-babilónicos, y de ahí la extensa concordancia de gran número de sus pasajes con la mitología clásica mesopotámica. Estamos, temporalmente, en el máximo esplendor intelectual de  la ciudad «santa» de Babilonia con la llegada del Imperio neo-babilónico.

Ya imbuidos en el texto, decir que término el «malachim» resulta impropio, siendo «mala’akh(im)» más correcto – curiosamente el termino acadio es «Malãku(m)», «El/Los que avisa(n)» , o los que «representan», tal vez y en este caso , los «malos augurios» y que concordaría más con un  momento temporal donde el concepto de la dualidad divina bien/mal, ángeles/demonios, no existía, o era un concepto  «en construcción» sustentado con posterioridad en las teologías zoroástricas.- y que es mas adecuado, en su significancia, al papel de «anunciadores/destructores» de Sodoma y Gomorra. Si bien el texto nos presenta dos actos: La anunciación de la paternidad de Abraham –  Génesis 18: 1-15, que sería mas asociable con las  tradiciones semítico amorritas y anatólicas de las tríadas que representaban la Fertilidad (García Trabazo) – y por otro lado, el «aviso de la destrucción» de las ciudades de Sodoma y Gomorra (Génesis 18: 16-22).

Como rubrica de los antes comentado sobre el Génesis tenemos el pasaje de Jacob:

« (10) Salió, pues Jacob de Beerseba y fue a Harán. (11) Y llegó a cierto lugar, y durmió allí, porque el sol se había puesto; y tomó de las piedras de aquel paraje y puso a su cabecera, y se acostó en aquel lugar (12) Y soñó: y he aquí una escalera que estaba apoyada en tierra, y en su extremo tocaba en el cielo; y he aquí los ángeles de Dios que subían y descendían de ella. (13) Y he aquí, Jehová estaba en lo alto de ella, el cual dijo: Yo soy Jehová, el Dios de Abraham tu padre, y el Dios de Isaac; la tierra en que estás acostado te daré a ti y a tu descendencia (…) (17) Y tuvo miedo y dijo ¡Cuan terrible es este lugar!, No es otra cosa que casa de Dios, y puerta del Cielo (…) (19) Y llamó el nombre de aquel lugar Bet-el, aunque Luz era el nombre del lugar primero »  Génesis 28:10-19. Biblia Reina Valera, 1960.

Es muy posible que la visión profética de Jacob corresponda con la descripción del ziqqurat del gran templo del dios semítico-amorrita Sin, la Luna, en la ciudad de Harrãn/Harrânu(m)  – ciudad fundada en el II milenio a.c. e importante nudo estratégico – y los ángeles, una alegoría de los sacerdotes subiendo y bajando las escaleras del templo o «casa del dios». Así llama «Luz» al lugar, siendo éste un epíteto del dios Sin,  como » La lampara/Iluminaria de los Cielos y la Tierra» (ANET 390, 534-541). o como  «Bet-el»  o  «Bet-ilu»,  la «Ciudad de la Bienaventuranza Divina».

Independientemente que algún lector pueda no estar de acuerdo con mi interpretación, siempre le queda la opción de quedarse con el relato bíblico, tal cual.., o bien, tal vez, con esta:

« En este relato hay dos puntos interesantes. El primero consiste en que los seres divinos que suben y bajan por esta «Puerta del Cielo» lo hacían utilizando un dispositivo mecánico: una «escalera». El segundo es que la visión toma a Jacob totalmente por sorpresa. La «Morada del Señor», la «escalera» y los «ángeles del Señor» que la utilizaban no estaban allí cuando Jacob se echó a dormir en el campo. Tuvo la visión de «repente» . Y, por la mañana, «La Morada», «la escalera»,  y su ocupantes se habían ido. »

Según Sitchin… ¡Se trata del primer avistamiento UFO atestiguado en la  literatura.. y encima en la Biblia..! ,  Si bien, espero que se me permita disentir, como mínimo, en la definición de «escalera» como «dispositivo mecánico»… En los párrafos siguientes, nuestro autor, justifica la adoración de los tres enviados bíblicos por Abraham y la posterior del relato sobre Lot en Sodoma, Génesis 19: 1,  aduciendo que era debido a su «indumentaria espacial» y que, por supuesto,  me niego a comentar por «muy voladores» que fueran los «mala’akhim».

Bajorrelieve correspondiente al templo arcaico de Ishtar. Periodo proto-dinástico de Assur, 2650-2350 a.c. Representa al cadáver de una mujer con tatuajes rituales funerarios.

« El equipo dirigido por Andrae aún descubrió otra representación atípica de Isthar en su templo de Assur. Más como una escultura mural que como un relieve común, se veía a la diosa con un ajustado casco, con los «auriculares» extendidos, como si dispusieran de sus propias antenas planas, y llevando unas marcadas gafas que parecían forman parte del casco»

La supuesta escultura mural corresponde a la imagen de la izquierda y que parece estar fechada en el periodo proto-dinástico de Assur, 2650-2350 a.c. (W Andrae), Se trata de un bajorrelieve de yeso pintado encontrado en el «Templo arcaico de Ishtar».  Representa a una mujer desnuda tumbada en una cama con una serie de complejos tatuajes (G. Leick) Estos tatuajes que incluían cabeza, ojos, así como otras partes del cuerpo, forman parte de los rituales del templo sobre la Vida, la Muerte y la Reencarnación, que eran atribuidos a la diosa como representación de la Fertilidad. Fertilidad que se traduce como un «resurgimiento tras la muerte» y así aparece en numerosos rituales funerarios, como la «Dama de los Ojos», a finales de IV milenio a.c. en Siria, Tell-Brak (Savory). 

« No hace falta decir que, cualquier hombre que viera a una persona – hombre o mujer . así vestida, se daría cuenta de inmediato de que se acababa de encontrar con una aereonauta divino »

Si obviamos que los «auriculares extendidos» sean posiblemente un «reposa-cabezas»; si despreciamos la evidencia que estaba desnuda y no vestida, por lo que ésta fuera de lugar el aceptar atavío alguno;  si excluimos el hecho que  el supuesto casco y gafas es un tatuaje – unos tatuajes en los ojos que tenían la función de representar una «santidad máxima» (J. Black) –  y que seguramente nuestra protagonista, al posar si lo hizo, estuviera muerta…  Si pasamos todos estos pequeños y grandes detalles por alto…,  aún así.., tampoco.

Mujer con cabeza de serpiente y niño en brazos. Periodo El-Obeid IV, 3900-3500 a.c. Eridu. National Museum of Irak

«Las figurillas de arcilla encontradas en lugares sumerios, y que se estima tienen 5000 años de antiguedad, bien podrían ser burdas representaciones de estos malachim con armas tipo varita mágica. En una de estas figurillas se ve el rostro a través del visor del casco. En otra el «emisario» lleva el clásico tocado cónino divino y un uniforme tachonado de objetos circulares cuya función se desconoce»

(La terracota de la izquierda se corresponde con el supuesto «otro emisario» ..) Me gustaría comentar primero que el periodo propiamente sumerio  se extiende desde la Época Baja de Uruk o Jemdet Nasr, hacia el años 3150 a.c., hasta la conclusión del Dinástico Arcaico en el 2300 a.c.  aprox. Dicho esto, y aunque esta representación podría ser considerada como proto-sumeria,  si tenemos en cuenta la opinión de algunos autores sobre que la etapa de El-Obeid, lo que resulta evidente es que forma parte de rituales anteriores de origen neolítico que se extienden desde el periodo de Hassuna, 5800-5500 a.c. hasta el propio Dinástico Arcaico sumerio,  por lo que definir cualquier representación de éste tipo y su significación religiosa como de «origen sumerio» resulta arriesgado. Aclarado lo anterior, me gustaría indicar, someramente – si se quiere mas información sobre ésta terracota ver enlace, que se trata de exvotos funerarios y que enlazan con un culto de reencarnativo representado por la serpiente, ya que dentro de las creencias mesopotámicas,  las raíces se consideraban como ofidios que alimentaban a árboles y plantas con un sentido regenerativo.  Así, el término  «raíz», en sumerio «arina»,  consistía en dos signos cruzados sobre el sumerograma «mus», serpiente (JCS, 1961). 

Exvoto «Templo de los  Mil Ojos», 3500-3300 a.c. Representa la rogativa de un familia.  Tell-Brak (Siria) Metropolitan Museum of New York

Resuelto el enigma de la «varita mágica» y que en las representaciones funerarias femeninas parece corresponder a niños, y que los mala’akhim de los textos semíticos hebreos no tienen la nada que ver, ni por asomo, con las citadas terracotas mesopotámicas, a continuación el texto vuelve a hablarnos de «cascos y gafas de forma elíptica». Éste supuesto «descubrimiento» se apoya en una interpretación «sui generis» de las las ofrendas votivas de alabastro y otros materiales, ver foto de la derecha,   depositadas en el «Templo de los  Mil Ojos» en Tell-Brak en la actual Siria y que, según J. Black,   posiblemente correspondan a ofrendas a una «diosa-ojo» que todo lo ve y que coincide con otros cultos parejos mesopotámicos y mediterráneos hacia «diosas-madre» omnividentes, cuya devoción se extiende desde periodo Dinástico Antiguo sumerio hasta el Imperio Neo Asirio, siglos X-VII a.c., y si apuran, al  resto del mundo, por lo que resulta evidente que no tiene nada que ver con la exposiciones vertidas en su relato por el señor Zitchin.

Y me dirán Udes… vale.. pero tan sospechoso resulta que tenga razón en sus conjeturas como que , por el contrario,  ninguna referencia que aporta sea correcta, y que yo, por supuesto, atiendo como una reflexión razonable, pero permítanme hacer valer , por última vez en este escrito,  mis argumentos:

« Indudablemente, no es una mera casualidad que los hittitas, conectados con Sumer y Acad a través de la zona del Khabur, adoptaran como señal escrita para designar a los dioses el símbolo un préstamo claro de las «figurillas de los ojos» »

No voy a entrar a rebatir que los hittitas estuvieran conectados o no con los sumerios y acadios que, como tales, no lo estuvieron. Tampoco voy a entrar en que los hittitas, como tales,  no escribían en caracteres jeroglíficos, salvo para mantener correspondencia con otros pueblos, sino en cuneiforme. Pero es que encima, este símbolo de «divinidad»,  que aquí si le voy a dar la razón a Sitchin que tiene ese significado (sin que sirva de precedente…) y es más, hasta es posible que tenga relación con su «hipótesis óptica»,  no es hittita, sino… ¡Luvita…!. ¡Cachis..!

Texto jeroglífico luvita. Donde se puede apreciar que aparece varias veces el símbolo de «dios»

Referencias:

«Gods, demons, and symbols of ancient Mesopotamia: An ilustrated dictionay» J. Black, A. Green, T. Rickard (1992)

«Corpus of hieroglyphic luwian inscriptions»  H. Cambell, JD Hawkins (2000)

» The city of the Moon god: religious tradition of Harran» T.M. Green (1992)

Biblia Reina Valera, 1960

www. bibliotecapleyades.net

Imágenes:

http://www.tochoocho.blogspot.com

http://www.uned.es

biggan-projukti.blogspot.com

http://www.biliotecapleyades.net

Los desvarios de Z. Sitchin: Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos (I)

Si bien en su día dí por concluida la serie «Los desvaríos de Z. Sitchin» con la premisa que las explicaciones vertidas, sobre la iniquidad de las supuestas pruebas aportadas en sus escritos por parte del seudo traductor de textos mesopotámicos y hebreos, con el pensamiento que resultarían suficientemente aclaradoras para cualquier escéptico, ó persona que tuviera por costumbre no dejarse llevar por «modismos» y profesionales en lo «magufo». Hoy, ante la proliferación de páginas que, o bien apoyan sus tesis  ó bien las utilizan para conseguir magros beneficios de incautos, me decido  a reabrirla con un comentario sobre la publicación «El duodécimo planeta» en su capítulo 5, titulado «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos», en la versión de la «Biblioteca Pléyades», uno de sus máximos adalides en la red.

Sitchin hace una introducción del capítulo con la siguiente afirmación:

«Los textos sumerios y acadios no dejan lugar a dudas de que las gentes de Oriente Próximo de la antigüedad tenían por cierto que los Dioses del Cielo y de la Tierra eran capaces de elevarse en el aire y ascender a los cielos, así como de recorrer los cielos de la Tierra a voluntad» «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos»

Para empezar un comentario desafortunado. Muy pocos dioses de la tradición sumerio-acadia tenían la capacidad de volar, habiendo dioses incluso principales que carecían de ella. Un claro ejemplo demostrativo pudiera ser el dios Enki sumerio –  personaje harto nombrado en las publicaciones de Zecharia Sitchin –, el Ea acadio, que se desplaza en el «Íbice del Apsu», su barca sagrada. Barca que nunca dejó sus dominios de «Señor de las aguas profundas y de los cañaverales» y que se desplazaba sobre la Tierra siguiendo los cauces del Tigris, Éufrates y el actual Golfo Pérsico. Una posible corroboración está en el hecho que Enki nunca tuvo representación astral y como éste,  multitud de otros dioses del panteón mesopotámico a lo largo de milenios.

A continuación para certificar tales afirmaciones hace referencia al mito de «Inanna y Shukallituda» – Un texto de carácter agrícola y cuya última parte, muy deteriorada, tal vez sea origen, por las semejanzas,  del mito hebreo de  «Las diez plagas de Egipto» – y las “capacidades aéreas” de la diosa Inanna/Ishtar.  Lectura que en exclusiva demostraría que la diosa de la Fertilidad se desplazaba bien por sus medios, bien mediante un transporte, por el Cielo,  siendo la posterior alusión a historiador S. Langdon y a su libro » La liturgia clásica de Inanna», añadido innecesario que, y es un suponer, se utiliza para dar un “ empaque erudito” a tales consideraciones.

« Esta capacidad de Inanna, capacidad que también muestran otros de los principales dioses, solían reflejarla los antiguos artistas representado dioses- antropomórficos en todos los demás aspectos, como ya hemos visto – con alas, tal como se puede ver en numerosas representaciones, no formaban parte del cuerpo – no eran alas naturales -, sino más bien, un añadido decorativo de la vestimenta del dios » «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos»

Este párrafo afirma, de nuevo, que los grandes dioses volaban, cosa que es incierta, como ya hemos demostrado para el caso de dios Enki. Es cierto que determinados dioses se valían de diferentes transportes para sus periplos: El dios Zuen/Sin viajaba en una barca celeste, Utu/Shamash lo hacía en un carro alado o se desplazaba a pie, Enlil lo hacía en un carro alado o sobre las nubes, etcetera… Pero fundamentalmente esta cualidad era definitoria de divinidades con representación astral, léase La Luna, El Sol, Venus, figuración astral de Inanna/Ishtar, exceptuando a Enlil que tenía una vertiente dual ctónica y astral al representar al Viento y así, otros dioses menores.  Lo que no cabe duda es que existieron otras divinidades que carecieron de ella, caso de los que representaban aspectos de la Naturaleza o bien tutelaban labores y artes, así como que tampoco eran representados “con alas” – Aquí Sitchin pretende asimilar a los principales dioses sumerios con los apkallu de la imaginería asiria que aunque dioses, no lo fueron principales –

Dando Sitchin por irrefutable la demostración anterior, a la vez que proporciona la imagen de una Inanna/Ishtar alada, el texto nos propone lo siguiente:

«Los textos que tratan de este arriesgado viaje (hace aquí referencia al mito de «El descenso de Inanna a los Infiernos»…) dicen que Inanna se puso, meticulosamente siete objetos antes de emprender el viaje, y cuenta que tuvo que entregarlos en los siete pórticos que tuvo que atravesar para llegar a la morada de su hermana (Ereshkigal..). Estos siete objetos se mencionan también en otros textos que tratan de los viajes aéreos de Inanna

1El SHU.GAR.RA se lo puso en la cabeza.

2. «Pendientes medidores», en las orejas.

3.  Cadenas de piedrecillas azules, alrededor del cuello.

4.«Piedras» gemelas, sobre los hombros.

5.  Un cilindro dorado, en las manos.

6. Correas, que le abrazaban el pecho.

7.  La vestimenta PALA, con la que vistió su cuerpo » «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos»

La transcripción del texto original sumerio de este pasaje, así como su traducción, son los siguientes:

« (14) me 7-bi zag mu-ni-in-KEC2 (15). me mu-un-ur4-ur4 cu-ni-ce3 mu-un-la2 me dug3 jiri3 gub-ba i-im-jen (17) tug2cu-gur-ra men edin-na saj-ja2-na mu-un-jal2 (18) hi-li saj-ki-na cu ba-ni-in-tij4 (19)na4za-gin3 di4-di4-la2 gu2-na ba-an-la2 (20)na4nunuz tab-ba gaba-na ba-ni-in-si (21) tug2pala3 tug2 nam-nin-a bar-ra-na ba-an-dul (22) cimbi lu2 he2-em-du he2-em-du igi-na ba-ni-in-jar (23) tu-di-da lu2 ja2-nu ja2-nu gaba-na ba-an-gid2 (24) har kug-sig17 cu-na ba-an-du8 (25) gi 1 ninda ec2-gana2 za-gin3 cu ba-ni-in-du »

« (14) Ella tomó los siete «me» sagrados. (15) Recogió los sagrados poderes y los asió entre sus manos (16) Con los positivos «me» sagrados, ella emprendió su camino (17) Ella  se colocó el» tug2cu-gur-ra», la «Corona de la Llanura», sobre su cabeza (18) Colocó el tocado sobre su frente. (19) Colgó un collar de pequeñas cuentas de lapislázuli sobre su cuello. (20) Puso sobre sus pechos dos iguales perlas ovuladas (na4nunuz..) (21) Se cubrió con un vestido tug2pala3 , el ropaje de las (grandes) damas (22) En el contorno de sus ojos aplicó el afeite » Que se acerque, que se acerque..»  (23) Sobre el pecho deslizó el blusón llamado «Ven, hombre, ven..» (24) Colocó en su dedo  el anillo de oro. (25) (y) en sus manos la vara de lapislázuli y la cuerda de medir » Pasaje de «El descenso de Inanna a los Infiernos»

«Diosa del Vaso» II milenio a.c. Mari (Tell-Hariri). Siria. Aleppo National Museum

(continúa el texto de Z. Sitchin..) « Aunque nadie ha sido capaz, todavía, de explicar la naturaleza y significado de estos siete objetos, creemos que la respuesta la teníamos al alcance de la mano desde hace tiempo. En las excavaciones que realizaron entre 1903 y 1914 Walter Andrae y sus colegas en la capital asiria de Assur, se encontró en el Templo de Ishtar una estatua muy deteriorada de la diosa, donde se podían observar diversos ‘artilugios’ sujetos al pecho y a la espalda. En 1934, los arqueólogos que excavaban en Mari se encontraron con una estatua similar pero intacta, enterrada en el suelo. Era la presentación a tamaño natural de una hermosa mujer »

Vamos a intentar, primero, «colaborar» en resolver el enigma de los siete objetos apoyándonos en el texto sumerio:

(1) El «Shu-ga-rra«. En el texto parece corresponder a la «Corona de la Llanura» (S Kramer). Corona que es una alegoría de los poderes de Inanna y que se relacionan con las fértiles tierras de las cuencas del Tigris y Eufrates como fruto de su intervención divina.

(2) «Pendientes medidores» en sus orejas. Sinceramente.., yo.., ni en el texto cuneiforme ni en la traducción, advierto de tal posibilidad, ni cercana ni remota, de semejantes «pendientes».

3) Collar de cuentas de lapislázuli.

(4) «Piedras gemelas» sobre sus hombros. Que no cabe duda que o bien es una mala traducción o bien es una «libertad literaria», por decirlo de alguna manera…, de las perlas  ovuladas que Inanna coloca sobre sus pechos para hacerlo coincidir, digo yo.., con la imaginería de la «Diosa del Vaso».

(5) «Un cilindro dorado en las manos». Y que corresponde con «la vara de medir» de lapislázuli – o  «na2 za-gin»  en sumerio (J. Black). Piedra preciosa, que no dorada, sino más bien de color azul -, siendo con la cuerda, un símbolo de la divinidad. Estos complementos sagrados tienen un significado de posesión de la Tierra, ya que con estos enseres se median, en la práctica habitual mesopotámica, los terrenos y sus lindes.

(6) «Correas, que le abrazaban el pecho». me pasa igual que en el punto 2 (¿?) ¿Donde están tales «arreos»  reflejados en el relato..?.

(7) «La vestimenta ‘Pala». Y que ya viene definido su protagonismo en el propio texto.

En resumidas cuentas, la idea es hacer coincidir, «tirando del porque yo lo valgo»  la representación de la diosa encontrada en la ciudad de Mari, en el palacio del  rey Zim-ri-lim,  y fechada entre el 1775-1761 a.c., con una descripción que ofrece un texto sumerio sobre la vestimenta de Inanna de finales del III milenio a.c.

Llegados a este punto, la pregunta sería saber el fin de tan erróneas aseveraciones. Fin que encontramos en el párrafo siguiente:

« A diferencia de las tallas planas o de los bajorrelieves, esta representación tridimensional y a tamaño natural de la diosa revela interesantes rasgos de su atuendo. En la cabeza no lleva un sombrero de señora, sino un casco especial; sobresaliendo de él, a ambos lados, y adaptándose a las orejas, hay unos objetos que le recuerdan a uno los auriculares de un piloto. En el cuello y sobre el pecho, la diosa lleva un collar de multitud de piedrecillas (probablemente preciosas); y en las manos sostiene un objeto cilíndrico que parece demasiado grueso y pesado como para ser un recipiente de agua.» «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos»

« Sobre la blusa semitransparente, dos correas le cruzan el pecho, llevando a la espalda, y sosteniendo en su lugar, una extraña caja de forma rectangular. La caja está estrechamente ceñida a la parte posterior del cuello de la diosa, firmemente sujeta al casco con un correa horizontal. Fuese lo que fuese lo que la caja llevase dentro, debió de ser algo pesado, pues el artilugio precisa del apoyo adicional de dos grandes hombreras. El peso de la caja debió incrementarse con una manguera que está conectada a su base con una abrazadera circular. El equipo completo de instrumentos se sostiene en su lugar con la ayuda de dos series de correas que cruzan la espalda y el pecho de la diosa.

El paralelismo entre los siete objetos que necesitaba Inanna para sus viajes aéreos y el vestuario y los objetos que lleva la estatua de Mari ( y probablemente, también la otra mutilada que se encontró en el templo de Ishtar en Assur es fácilmente demostrable. Vemos los ‘pendientes medidores’ – los auriculares- en las orejas; las hileras o ‘cadenas’ de piedrecillas alrededor del cuello; las ‘piedras gemelas’ – las dos hombreras  sobre los hombros; el ‘cilindro dorado’  en las manos, y las correas que se entrecruzan en su pecho. Ciertamente, va vestida con una ‘vestimenta PALA’ (‘vestimenta del soberano’), y en la cabeza lleva el casco SHU.GAR.RA, un término que, literalmente, significa ‘lo que hace ir lejos en el universo’. Todo esto nos  sugiere que el atuendo de Inanna era el de una aeronauta o un astronauta. » «Nephilim: El pueblo de los cohetes ígneos»

¡Que decir..! Aunque debo de aclarar que en algunos aspectos, en un primer momento, la representación encontrada en Mari,  y corroborando a Z. Sitchin, tiene detalles que pueden parecer extraños.  Detalles tan sugerentes como que la «Diosa del Vaso» era un ¡Surtidor de agua..! De ahí la posición del vaso y otros detalles, como que el hecho que esté hueca.

Emplazada en la sala del trono de Mari, donde se encontró tras éste, se supone que formaba parte de una pareja igual que representaba la «Abundancia» y que concuerda con los ritos de coronación meritas, donde el agua era vertida con esa significación. De ésta guisa, así, aparecen tales divinidades junto a Ishtar en representaciones  de la Fertilidad en cilindros-sello acadios (D. Collom) ¡Como..! Pues si.., después de todo resulta que nuestra venerable «diosa acuífera» no es Ishtar, y mucho menos Inanna, se trata de una diosa de segundo rango del extenso panteón mesopotámico… ¡Que decepción..!

Cilindro-sello post-acadio. III dinastía de Ur, (De izquierda a derecha..): Ishtar, una servidora portando un sacrificio , una diosa con un vaso que fluye, Gilgamesh,y la diosa Nisaba. El propietario es un escriba llamado Ili-Ishtar. British Museum.

Referencias:

http://www.etcsl.orinst.ox.ac.uk (University of Oxford Library)

«A concise dictionary of Akkadian» Jeremy J. Black (2000)

«Catalogue of the Western Asiatic seals in the British Museum» Dominique Collom (1985)

http://www.bibliotecapleyades.net.

Imágenes:

http://www.icobase.com

http://www.bibliotecapleyades.net

El «Templo Blanco» de Uruk: Estructura, funciones y rituales.

Según la mitología sumeria, el primer templo que se construyó fue el é-apzu en honor al dios Enki – é-apzu, ó é-engur,  «La Casa de la Aguas Subterráneas» – en Eridu y cuyo hecho está corroborado por la excavaciones arqueológicas realizadas en Tell-Abu Shahrein, su actual nomenclatura, en Iraq.

« (nam)-lugal an-ta èd-dè-a-ba (eri)du [ki] nam-lugal-la »   «(Cuando) la realeza del Cielo bajó;  en Eridu estuvo el reino » Inicio de la «Lista Real Sumeria».  Prisma  Weld-Blundell, 1923,444,  2170 a.c.

Estas evidencias arqueológicas nos conducen al  posible primer templo de Eridu y que podríamos situarlo a finales del periodo de Hassuna en los principios del V milenio a.c. Seguramente este «sacro lugar»  no consistiera más que en una choza de mampostería y  a la que se identifica como tal por el hecho de ser el nivel más antiguo de una serie de estratos que,  en un nivel determinado, nos proporcionan evidencias de un altar, unos nichos decorados, así como de ofrendas – más exactamente de un conjunto de huesos ennegrecidos de pescado (N. Postgate, 1999)  -.  Esta construcción capitular   se vería modificada en su concepción en el nivel IX, y  ya dentro del periodo IV de Obeid (3900-3500 a.c.) , donde aparece sobre una plataforma aislante del suelo  y cuya estructura y edificación fue   ampliada,  repetidas veces durante el periodo de Uruk, 3500-3100 a.c.,  mediante apliques de mampostería que paulatinamente elevarían la altura del conjunto y que, ya dentro del III milenio, constituirían, por los sucesivos añadidos y restauraciones, lo que conocemos en la actualidad con el término acadio de «ziqqurat» o,  como la denominaban los sumerios: «É-gal» o «casa-grande». Sigue leyendo

El Calcolítico en Oriente Próximo: Los ídolos serpiente.

Cabezas de ídolos en terracota. Periodo de El-Obeid II,  4.500 a.c. aprox.  Se aprecian en los rasgos faciales los ojos tipo «grano de café») y los cráneos alargados y  el «moño» o corona.

Aunque el término «Calcolítico» y su significancia nos  evoca el paso humano hacia un periodo, dentro de la prehistoria, de «evolución tecnológica» – Si bien la labor sobre cobre ya era conocida desde el Neolítico anatólico, en el VII milenio a.c., ésta no tomará relevancia hasta fechas posteriores –, como así nos dicta J.J. Eiroa.  Circunstancia a la que debemos añadir un «escalón más» en su evolución cultural. Éste incremento en el nivel de desarrollo permite,  por un lado, una utilización más sistemática y diversificada del medio y por otro,  una organización social más compleja. Es en éste último hito, la organización social, donde comienzan a cimentarse conceptos como la «jerarquización» y/o  la «estratificación social»,  y que son fruto de otro gran acontecimiento histórico: El nacimiento de las sociedades proto-urbanas.

En Mesopotamia, la «Cultura del El-Obeid», derivada de la «Cultura de Samarra».  sin solución de continuidad, representa la transición desde el Neolítico al Calcolítico. Una evolución que cronológicamente  será la siguiente: Sigue leyendo