Las predicciones de la máquina de Anticitera y los rituales de sustitución. Una de sus funciones, una de sus soluciones.

Tal vez uno de los primeros ingenios mas sorprendentes que se han descubierto, entendida su maquinaria y revelada su función, haya sido el «mecanismo de Anticitera». Hablamos del primer instrumento portátil conocido, siglo I  a.c. aprox.,  vinculado a la realización de cálculos y predicciones astronómicas y que puede considerarse como la recopilación de todo el conocimiento conseguido en los anteriores milenios, mediante la observación,  por las primeras civilizaciones afectas al Mediterráneo Oriental y Mesopotamia.  Así, una de  sus dos esferas plasma el «ciclo metónico»,  que se estudiaba ya en la Babilonia mesopotámica y que remonta sus premisas conocidas a la confección del  calendario  neo-sumerio de Shulgi a finales del II milenio a.c. en el periodo de Ur III,  permitiendo la confección de calendarios vinculados a la Luna y el Sol.  La segunda esfera de  la máquina de Anticitera refleja el denominado «ciclo de Saros»;  un ciclo de Saros cuya instrucción desde la época kassito-babilónica, 1571-1156 a.c., facultaba a los sacerdotes templarios, o «tupšar»,  el poder predecir eclipses.  Sigue leyendo

La «prostitución sagrada» en las antiguas culturas mesopotámicas.

«Enki respondió a Ninmah: «Yo decreté un destino para el primer hombre con las «manos débiles»(impedido), le  di pan (sustento). Decreté un destino para el hombre al que «la luz le volvió la espalda» (ciego),  le di el pan, Decrete un destino para  el hombre con amputaciones, con parálisis en los pies,  le di pan. Yo decreté un destino para el hombre que no puede contener su orina (eneurético), le di pan. Decreté un destino para la mujer que no puede alumbrar (estéril), le proporcioné su pan. Yo decreté el destino para aquellos sin pene (eunucos) o vagina en su cuerpo (agenésica), yo les di pan.» Pasaje del poema  de Enki y Ninmah, 102-110.  II milenio a.c.

En el relato anterior a éste pasaje, y dentro del poema de Enki y Ninmah,  el dios Enki es felicitado en un banquete por los dioses tras haber creado a la Humanidad, siendo éste hecho molesto, por ignorar su contribución, a ojos de Ninmah, la parera de Enki. Así éste poema, que habla someramente de la «creación de mundo»,  toma el tono de los antiguos «tensones» o «dialécticas enfrentadas» propias de los antiguos textos sumerios y acádios , desarrollándose una diatriba entre el dios y la diosa alrededor de sus respectivas relevancias en el hecho  de  la creación humana: Una como «Naturaleza creadora» y otro como «Hacedor de sus destinos». Al final del relato es Enki quien consigue sobreponerse a la diosa, dando un futuro a los «supuestos errores» que la Naturaleza comete en la creación del hombre.  Uno de éstos «errores» son las mujeres estériles y a las que Enki «da pan»  al posibilitarlas el ejercer un papel en la sociedad mesopotámica.

«Después tomó a una «qadištum» de la calle. Debido a su amor por ella, con ella  se casó a pesar que se trataba de una «mujer- qadištu». La «mujer- qadištu» cogió un niño de la calle y  en la mama, con leche humana, [ella lo cuidó] » Pasaje de las  series «Ana ittišu», VII iii 7-10.  1400-1000 a.c.

Con la raíz acadia «qdš,», –  y que puede ser traducido como «sacro» o «sagrado» –,  nos aparecen generales  nombres o adjetivaciones en los antiguos textos mesopotámicos, tales como  «qadištu«, «qaššatu«o «qašdatu«,  en referencia a una mujer con un determinado estatus social. Por el texto, pudiera parecer  que las qadištu tenían un relación con la calle. Siendo éste, y según los relatos jurídicos, un determinado papel dentro de las estructuras sociales acádias, ya que era  en  la calle  donde la gente que no disponía de casa  se congregaba para ofrecer sus servicios. Si bien por el escrito, y en un principio,  podríamos suponer que tales mujeres eran meretrices, la posición social de una «qadištu» era muy diferente al de una  prostituta. En el «Poema de Enlil y Sud», Enlil confunde a su futura esposa, Ninlil/Sud,  con una «qadištu»,

« Enlil, la Gran Montaña, se detuvo en Eresh y mientras ojeaba por allí, encontró a una mujer de su gusto. Se acercó y, rebosante de satisfacción, entabló  conversación con ella: » Yo te tornaré incomparable con un vestido de gran dama, (aún) después de estar en la calle,  tu serás (…) ¡Cuan impresionado estoy de tu belleza,  siendo, como eres,  una mujer sin vergüenza…! » Pasaje del poema de Enlil y Sud, 12-16.  ETCLS Oxford Oriental Institute.

Representación en terracota de la diosa Narundi o Narunte, la Inanna/Ishtar elamita, procedente de Susa, 2100 a.c. aprox. Museé du Louvre

Cuando tomamos en consideración referencias mesopotámicas sobre cualquier  temática, al igual que  en otros diferentes ámbitos culturales humanos,  debemos  de contextuarlo siempre dentro de un lapso temporal y un ubicación determinada.  De esta guisa, cuando tratemos con simbología religiosa, títulos ciudadanos, o cualquier otro  término social y cultural, hemos de tener en cuenta la evolución  de tales preceptos y sus modismos. Al igual que ocurre en las sociedades actuales, determinadas «etiquetas sociales» mas antiguas son sustituidas por otras nuevas, cambiando parcial, o radicalmente su anterior significado.  Así, por ejemplo,  dentro de la organización social que definen los textos legislativos babilónicos amorritas, la realidad social de las qadištu aparece dividida en dos ámbitos y cuyo ordenamiento civil, en un primer caso,  vienen a definirlas por los términos  «nadîstu«, «kulmašîtu» o «ugbabtu«. Tales mujeres estarían vinculadas con  cultos a una deidad femenina y cuya regulación en el ámbito sexual vendría condicionado por mantener un celibato  o  por estar casadas.  Por otro lado, existirían las «harimtu«, «šamhatu» o «kezertu» que, aunque también pudieran estar vinculadas al culto divino, no disponían de ninguna pauta reguladora en cuanto a sus actividades sexuales.

« No te cases con una «harimtu», cuyos maridos son muchos; Una «ištarîtu» reservada a la divinidad, ni con una «kulmašîtu» cuyos favores (necesidad de..) son muchos. En la desgracia, ellas no te ayudarían. En la adversidad,  se burlarían de ti. Ellas ignoran el respeto y la sumisión » «Babylonian Wisdow literature», pag 102.  Wilfred. G. Lambert

En definitiva,  las funciones de las qadištu son vagas dentro de las diferentes referencias textuales mesopotámicas. Así,  en los textos jurídicos amorrito-babilónicos,  éstas mujeres serían ciudadanos de pleno derecho, podrían casarse, tener niños y ser amas de crías de otras mujeres, En Nippur, en el periodo de Isin-Larsa, 2003-1760 a.c..  hay constataciones escritas de mas de un caso de «nu-gig»  – vocablo sumerio para «qadištu» –.  En la misma época y en referencia a una localidad denominada Inbatum, ,   nos advierte que poseen un  domicilio y  casa propia. –  aunque , por otra parte,  también nos es relatado su envío a Inbatum   como botín para su «sacrificio»  tras una expedición  a Nawar, si bien el significado de tal «sacrificio» no queda plenamente revelado en el texto –. También durante el citado periodo, en la ciudad de Larsa,  el rey Sin-iddinam, 1785-1778 a.c.,  trata a sus enemigos  de «incultos» por no tener  «mujeres-qadištu»  alojadas en sus templos, apareciendo incluso en sus listas estatales de raciones de alimentos.

« ¡Vamos, Lalegre..! ¡Que te asigno ahora tu destino..! ¡Que te asigno, yo mismo, un destino..!  Un destino eterno y para siempre, y que contra ti profiero. Una maldición poderosa que se apodere de ti lo mas rápido posible: «Jamas te construirás un hogar feliz.  mimarás (…). o  entrarás en el harén de las jóvenes.  Los posos de cerveza mancharán tu bello seno y con su vómito el borracho salpicará tus ropajes. A un menaje de alfarero, no tendrás jamás derecho, ni tampoco al contenido del frasco de perfume. La blanca plata, orgullo del mundo, no permanecerá por mucho tiempo en tu casa. La más placentera de tus residencias será la parte delantera de una puerta y tu morada los bordes del camino. Habitarás en la soledad y frecuentarás las sombras de las murallas. Zarzas y espinas dejarán tus pies en carne viva. Borrachos y sedientos de vino te abofetearán a su antojo. En la calle te gritarán y el albañil no tapará las fisuras del techo de tu casa. En tu (…) se instalará la lechuza y nunca habrá alegría. Porque a mi que era libre, tu me has (…) y me has destruido»

Cuando (el dios)  Shamash escuchó las palabras de Enkidu, sin poder contenerse y desde lo alto del cielo, le espeto: » ¿Porque Enkidu maldices a la cortesana Lalegre.., la que te alimentó con alimento divino,  que te dio de comer con comida regia, que te engalanó con suntuosos vestidos y que te dio como compañero a éste  Gilgamesh perfecto..?» » Pasaje de la Epopeya de Gilgamesh. Tablilla VII, 6-39.

Rituales del agua donde aparecen sacerdotisas qaššatu . «Fresco  de la Investidura». Palacio de Zim-ri-lim en Mari. 1775-1761 a.c. Museé du Louvre.

Las «qaššatu«, una forma merita del término, aparecen en dos diferentes textos (ARM  9 291 y 23 296) formando parte censal de diferentes ciudades. En éste censo aparecen catalogadas bajo la denominación de «Amat PN«, «servidora de PN«, «almattum» o «viuda», o como «mujer-qadištu». El primer grupo están bajo el control y autoridad de un tutor – aunque aparece un caso donde están bajo la tutela de una qadištu -, mientras que el segundo y tercer grupo figuran como ciudadanas libres. En Mari, tales mujeres son presentadas como devotas de la diosa Annunîttu, así como del dios Adad en Kish y Sippar – dentro de un contexto de dios de la fertilidad y hermano de Bêlet-Ìli.  Divinidad, ésta última, relacionada con la fertilidad, al igual que Annunîttu -. También en Meri y textos de  Kish, aparecen como participes en  los ritos acuíferos de fertilidad y purificación (G. Lambert, 1960)  – Estos rituales son en extremo trascendentes  en las ceremonias de coronación meritas (Parrot, 1958) – , siendo también en Sippar custodias de los cilindros-sellos de la diosa patronal de la ciudad, Ištar.

Volviendo a los textos del periodo amorrito-babilónico, 1894-1595 a.c. aprox. y dentro de éstos al «Poema de Atra-hasis» y   encontramos el siguiente párrafo donde tales mujeres acompañan a comadronas :  «Permite que la partera se ufane en la «casa de una mujer-qadištu», donde las esposas preñadas dan a luz» . Aparentemente, y según Westenholz, mientras la parteras asistían «físicamente» a la preñada, las qadištu ofrecían las «necesidades rituales»  para un satisfactorio  alumbramiento. En escritos posteriores babilónico-kassitas aparecen como «Madres» (A.T. Clay, 1915) y vinculadas con los partos:  – «Las parteras, que con su habilidad se preocupan del feto y las qadištu, las que realizan las purificaciones con agua.. » (KAR, 321,7) -.  En otra vertiente, y dentro de los escritos clásicos babilónicos – textos  exorcistas Maqlu III, 40-55 y Shurpu III, 69, 116-117 –,  las qadištu aparecen adjetivadas como de hechiceras o brujas, por ser supuestas «mediums» de los poderes demoníacos,  las enfermedades , teniendo durante el primer milenio una doble vertiente como personajes  «benignos» o «malignos» (G. Meier, 1937, E Reiner, 1958, S Rollin, 1983)  Aunque ésta última «popular consideración» vendría dada por oficializar dentro de los  rituales exorcistas templarios  el papel de  la verdadera hechicera y de  sus poderes  y  que durante la ceremonia eran sometidos al exorcista. (S, Parpola, 1983).

En Assur, durante periodo antiguo asirio, 2003-1742 a.c. aprox., las mujeres- qadištu tenían la posibilidad de casarse. (Ass. Code § 40)  Si estaban casadas,  le estaba permitido ir veladas en público, mas había duras penas para las mujeres qadištu  solteras que fueran con velo y de igual manera que en Babilonia, en los textos, aparecen al lado de las parteras en los embarazos. (Afo 17, 268, 11). En los rituales del periodo medio asirio, 1742-1192 a.c. aprox, y al igual que en Kish y Sippar,  las qadištu oficiaban los cultos al dios Adad en la capital asiria junto a los » sacerdotes Sanga» (KAR 154) – o «iššakuk šangû» En Asiria, sacerdote principal  del culto a una divinidad –  entonando y pronunciando el canto «inhu» en cada parada procesionaria para, tras concluir, consumir los restos de las ofrendas junto al sacerdote. En dos textos neo-asirios, 1192-605 a.c. aprox,  aparecen referenciadas las qadištu con funciones rituales, uno en el que se utiliza sal para deshacer un juramento (E. Ebeling, 1953) y otro  hace referencia a su asistencia en las abluciones del dios Shamash (R.F. Carter, 1914)

En tercer milenio a.c. y en Sumer, el término «nu-gig» define a las qadištu sumerias, si bien aparece también en descripciones de las diosas Inanna, Aruru/Ninmah, Nanaja o Nini(n)sina. Pero, y en definitiva, ¿Que significa la palabra  «nu-gig»..?. Según Westenholz, y obviando otra interpretaciones de carácter sexual, puede ser traducido como «lo sagrado»(para los dioses),  lo que un hombre mortal no puede tocar. En definitiva un sinónimo de «tabú» definido tanto para actos, objetos, como a personas.

Impresión del cilindro sello de Mes-ane-pa(da): Aparece la inscripción: «Mesanepada, rey de Kish, esposo de una ‘nu-gig’ » I dinastía de Ur , 2400 a.c. aprox.  U.13607 Vorderasitiches Museum

El oficio de «nu-gig» aparece en la léxica de los textos sumerios figura con una significancia paralela al de los códigos legales del periodo amorrito-babilónico., antes mencionados, apareciendo también en textos administrativos de la ciudad de  Shuruppak, Tell-Fara(h). En el cilindro-sello (izquierda..) aparece la inscripción: «Mesh-ane-pa[da] lugal-Kis dam-nu-gig». (J. Copper, 1986) y que puede traducirse como «Mesanepada, rey de Kish, esposo de una nu-gig» y donde, según Cooper, Renger (1975), tal texto  debe ser interpretado como una referencia a los  rituales de casamiento del rey de Ur y la diosa Inanna, ésta última representada por una sacerdotisa. que siglos mas tarde serán parte de las festividades del Año Nuevo – festivales relacionados con la muerte/vida dentro del ciclo anual de la Naturaleza –. En otro cilindro sello del periodo neo-sumerio aparece la inscripción:  » Nin-kin [da] nu-gig-gal urí [ki]-ma lugal-ha-ma-ti-du-sar ard-zu» y que puede traducirse como «Nin-kin-da, el señor de las nu-gig de Ur, Lugal-hamati, tu siervo», como parte de una organización, y que viene corroborado en otro texto de la ciudad de Lagash (F. Thureau-Dangin, 1903) . En la Lagash pre-sargónida, las «nu-gig» figuran en las listas de reparto de alimentos junto, por casamiento,  a importantes miembros de la sociedad de alta posición (J.M. Asher-Greve, 1975). En la ciudad acadia de Umma nos encontramos con un relato que hace alusión a dos personas: Ín-he-nun, la nu-gig, y Al–la, la «nu-gig nigín» o nu-gig del alumbramiento»(B. Foster 1982). Otro interesante texto no relata la existencia, en el templo a Inanna de Zabalam, de un «ningín-gar»o «lugal sagrado para el nacimiento»(Sölberg). La relación entre las nu-gig, el «nacimiento» y el «ningin-gar»  se da igualmente en el templo de Inanna en Akkade y en el de Nini(n)sina en Isin. 

« Para los miles de jóvenes doncellas, para favorecer la fertilidad y regular el útero. Para determinar el destino, para ayudar a la puerta del ningín-gar, para permitir que el feto llegue a  feliz conclusión:  Un hijo de un hombre que se resguarda en las caderas. Para que llore en voz alta, para depositar la placenta sobre la tierra, y para darle  la vuelta a la cabeza;  La presencia de la  nu-gig , para actuar con rapidez y cantar una alabanza propia, cuando se manifiesta  el gran «mes»(milagro o esencia de las cosas..) mi Señora, ha pronunciado su himno de alabanza, ¡ Nini (n) sina, acertadamente,  a ti misma  alabas! » Himno a Nini(n)sina. «Sumerian religius texts»  E. Chiera (1924)

No cabe duda que la prostitución existía en la antigua Mespotamia, como nos describen textos expuestos anteriormente, pero lo que también es comprobable es que nunca hubo una «prostitución sagrada» ni el Assur, ni en Babilonia y mucho menos en Sumer, como pueden hacernos pensar tanto los relatos griegos como los hebreos. El adjetivo «hieródula» que es utilizado para definir la «prostitución sagrada»– el  término griego es ἱερόδουλοç – viene a referirse al concepto de «esclavas sagradas» dentro de las acepciones que tiene en la cultura griega. una cultura, aunque semejante,  posterior en el tiempo.. En el caso hebreo, si existía tal concepto, y tal práctica,  dentro de los cultos  canaanitas a la diosa Ashera, anteriores a la reforma religiosa del siglo VII a.c.

«Sobre las cimas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de las encinas, álamos y olmos que tuviesen buena sombra, por tanto, vuestras hijas fornicarán y adulterarán vuestras nueras. No castigaré a vuestras hijas cuando forniquen, ni a vuestras nueras cuando adulteren, porque ellos mismos se van con rameras, y con las malas mujeres sacrifican…» Oseas 4: 13-14. Biblia Reina-Valera 1960.


Referencias:

«Tamar, Qedesa, Qadistu and Sacred Prostitution in Mesopotamia! J. Goodnick Westenholz (1989)

Imágenes:

en.arup.cas.cz

inanna-maat.blogspot.com

it.wikipedia.org


Mitología amorrito-babilónica: El «Enuma Elish». Tablilla I y II

« (1) Cuando en lo alto, el Cielo no estaba nombrado, (2) y la Tierra, abajo, aún no tenía razón: (3) El primigenio Absû, que los engendró  (4) y el Caos, Tiamat, la madre de ambos, (5) sus aguas mezclaron.  (6) (Cuando) los campos no habían sido creados, y los pantanos no eran posibles de vislumbrar. (7) Cuando ninguno de los dioses había sido llamado a existir , (8)  al no poseer (todavía) nombre, y los destinos (aún) no estaban escritos . (9) En ese instante, fueron creados   los dioses  en el seno de los Cielos.

(10) Lahmu y Lahamu fueron nombrados en su seno,  (11)  siendo [llamados] . Largos fueron los tiempos que siguieron [(y) crecieron en tamaño y  edad] (12) En ese instante Anšar y Kišar fueron nombrados, y sobre[pasaron a] ellos (13) Largos fueron los días (que pasaron)  y entonces surgieron cuatro (…) [Alternativa: y años fueron añadidos]  (14) Anu, su hijo, [fue parejo a sus padres]  (15)  De Anšar, Anu [su primogénito, fue su igual] (16)  Y el dios Anu [ a su imagen engendró a Numimud]  (17) Numimud, quien de sus padres, sus progenitores [ fue Señor] (18) Vasto en toda sabiduría, [erudito],  (19) y grandemente poderoso [en fuerza] (20) El no tenía rival. (21) Así fue como los dioses fueron establecidos y fueron [nombrados] los grandes dioses. (21) [Alternativa: Andaban en averío los divinos hermanos]

(22) Mas Tiamat y Absû  se sintieron perturbados [con sus escarceos] (23) Tornándose  en  problema [para las entrañas de Tiamat] (24) [Con su estruendoso ruido en la mansión de los Cielos]  (25) Absû no era poseedor de menor fuerza (…) [ (25) [ Alternativa: Absû no podía disminuir el clamor de ellos]  (26) y Tiamat se enrabietó [con su comportamiento] (27) [Apsu]  estaba afrentado [con sus] actos  (28)  Su  camino era infame, [abrumaban] (29)  Entonces, Absû,  el progenitor de los dioses, (30) se lamentó a Mummu, su ministro, diciéndole:  (31) ¡ Oh, Mummu, ministro que reconfortas mi espíritu/hígado,  (32) apoyemos a Tiamat ! (33)  Ellos  fueron ante Tiamat y se le unieron. (34)  Terciaron un plan   en contra de (34) [Alternativa: Comisionaron a acerca de]  los dioses, sus hijos.] (35) Absû abrió su boca y habló, (36)  a Tiamat, la resplandeciente, el dispuso del mundo (…) (37)  Su destino [me es verdaderamente aborrecible]  (38)  ¡No habrá día de sosiego, ni noche que pueda reposar en paz, (39) hasta que no destruya su futuro..!  ¡ Yo [malograré sus modos]¡ (40) ¡Sea para ellos el infortunio a la par que para nosotros sea el reposo! (40) [Alternativa: ¡Que el sosiego sea restaurado y nosotros durmamos!] (41) Cuando Tiamat escuchó tales palabras, (42)  lanzó un quejido y lloró largamente,  (43) [Encolerizándose espetó a su esposo], (44) dirigió sus palabras a Absû y habló: (45) ¿Que podemos hacer, [iremos a destruir lo que nosotros hemos creado?] (46) ¿Sea su destino lleno de infortunio a la par que para nosotros sea el descanso..? (47) Mummu contestó y aconsejó a Absû (48)  e implacable fue el consejo que contra los dioses, Mummu, dió:  (49) ¡Vayamos, [Padre mío, contra su sedicioso comportamiento]! ¡ Sus destinos son vigorosos  pero han de ser destruidos!  (50)  ¡Habrá días entonces para vuestro sosiego y noches para vuestro reposo!  (51)  Absu consintió con él y su semblante brilló. (52) , por los males que tramó contra los dioses, sus hijos. (53)  él (Mummu) estaba temeroso (…) (53) [Alternativa: Mummu lo abrazó por el cuello]  (54) Sus rodillas empezaron a temblar;  debido a que los dioses primigenios le daban un destino infame, [(54) [Alternativa: cuando se sentó en sus rodillas para besarlo] (55) Por las maldades que los «primeros nacidos» habían urdido. (56) fue repetido a los dioses, sus primogénitos alterados (57) [Cuando los dioses lo escucharon,] ellos [se sintieron agitados] (58) Lamentándose  que ellos se dispusieran para tal sufrimiento.

(59) [Vasto en toda sabiduría, erudito, fértil en recursos]. (60) Ea (Numimud). la personificación de la Sabiduría,  reparó en su destino. (61) [(y) un omnímodo plan trazó y erigió en su contra] (62) [lleno de talento, contra el hizo su encantamiento, excelso y sagrado.] (63) [ Lo recitó y lo perpetuó en las aguas (del Absû)] (64) [Vertiendo sueño sobre él,  (donde) profundamente dormido ya yace] (65) [Cuando a Absû hubo abatido, colmado de sueño] (66) [Mummu, el ministro, fue incapaz de inquietar] (67) [Desabrochó su ceñidor y arrancó su tiara] (68) [, retiró su halo, se revistió con él] (69) [ (y) habiendo sometido a Absû, lo ejecutó] (70) [A Mummu lo cargo de cadenas, dejándolo bajo cerradura] (71) [Dominado Absû y reafirmado su yugo] (72) [, sometió a Mummu asiéndolo del aro de la nariz] (73) [Después de que hubo vencido y humillado a sus adversarios] (74) Ea, consolidado el triunfo sobre sus enemigos] (75) [descansó con profunda paz en su cámara sagrada] (76) [, a la que denominó «Absû» y que designó como su sagrado lugar] (77) [En el mismo lugar construyó una íntima morada] (78) [(donde) Ea y Damkina, su esposa,  establecieron señorío]

(79) [En la cámara de los hados, en la mansión de los destinos] (80) [,  un dios fue nombrado, el más apto y sabio entre los dioses] (81) [En las entrañas del Absú, Marduk fue llamado] (82) [En las entrañas del sagrado Absû, Marduk fue nombrado] (83) [Ea, su padre, fue quien lo engendró] (84) [, fue Damkina, su madre, quien la trajo a la luz] (85) [ De pechos de diosas mamó] (86) [la nodriza que lo amamantó,  le formó  sobrecogedor (en cualidades físicas)] (87) [Seductora era su figura, centelleante el brillo de sus ojos] (88) [Señorial era su porte, singularmente altivo] (89) [Cuando Ea lo vió, el padre que lo había engendrado]

A partir de la línea 90 se produce una clara diferenciación entre el texto de L.W. King y las traducciones-recopilaciones posteriores que se prolongan hasta la línea 109(1902)/128(1989). En un primer término, (A),  aparecerá el texto original de 1902 y posteriormente,  (B), optaremos por el texto recopilatorio de Luis Astey de 1989.

 (A) (90) Para siempre (…) (91) (…) el demonio  (92) (…) El habló (…). (93) (…) Tú (…) El se ha sometido y (94) (…)  llora, sintiéndose pesaroso. (95) (…) de pánico. (96) (…) Nosotros no descansaremos en paz. (97) (…) Absû intuyó el desastre. (98) (…) y Mummu, que fue tomado como cautivo, en (…). (99) (…) tú (..) (100)(…) ¡Sea para nosotros el descanso!. (101) (…) ¡Ellos sentirán padecimientos!.(102) (…) ¡Sea para nosotros el descanso!.(103) (…) ¡Nosotros tomaremos represalias  sobre ellos!. (104) (…) ¡Vosotros padeceréis la tempestad! .(105) Y Tiamat consintió con esa palabra dada por el dios que brilla, y dijo: (106) (…) ¡Confiaré en tí!  ¡Vamos a la guerra! (107) (…) los dioses en el seno (…) (108) (…) para los dioses que ella creó.

(B) (90) Exultante y resplandeciente, el corazón se le llenó de júbilo. (91) Lo educó y dotóle  de un doble valor divino (92) Ampliamente fue él por encima de ellos (los dioses), sobresaliente en todo. (93) Perfectos eran sus miembros, mas allá del discernimiento, (94)  imposibles de ser asimilados, difíciles de ser apreciados. (95) Cuatro eran sus ojos y cuatro sus orejas. (96) Cuando entreabría los labios, fuego llameaba (97) Cuatro orejas le han crecido, (98) sus ojos, iguales en número, escudriñan el mundo (99) Es el mas alto de los dioses, de una estatura sin parangón (100) Enormes son sus miembros, sobresaliente es por su naturaleza. (101) ¡Mi infante, mi infante. (102) Mi hijo, el Sol, dios de la iluminaria de los dioses! (103) Vestido con el halo de diez dioses, poderoso era en extremo,  (104) por cuanto sus vigorosos destellos, se acumulaban sobre él.

(105) Engendrados por Anu , llamó a existir los cuatro vientos, (106a) para rechazar con su poder al mas vigoroso de la hueste (106b) Formó al polvo e hizo que el torbellino lo llevase (107) Provocaba corrientes y agitaba a Tiamat (108) Perturbada estaba Tiamat, sin descanso día y noche. (109) Los dioses sin reposo, padecían en la tormenta. (110) Urdiendo en su interior lo diabólico, (111) dijeron a Tiamat, su madre: (112) «Cuando ellos mataron a Abšu, tu esposo, (113)  tú no le ayudaste y permaneciste al margen (114) Ahora que el ha convocado a los terribles cuatro vientos, (115) tus entrañas están agitadas y nosotros no podemos dormir. (116) ¡Que Abšu, tu esposo, éste en tu corazón, (117) así como Mummu que ha sido vencido! ¡Te has quedado sola! (118) (…) de un lado al otro, desconcertada, das pasos (119) (…) sin cesar, tú no nos quieres (120) Mira, de insomnio (…) apesadumbrados están nuestros ojos (121) (…) sin reposo, que durmamos (122) (…) A la batalla, ¡Véngalos, (123) (…) y vuélvelos como el viento!» (124)  Cuando Tiamat escuchó éstas palabras, se complació: (125) «(…) habéis dado, creemos monstruos (126 (…) los dioses en medio (…) (127)¡ (…daremos) batalla, contra los dioses (…)!»

(109/128) Ellos se congregaron y al lado de Tiamat, avanzaron; (110/129) Estaban furiosos; Urdiendo sufrimientos sin descanso,  día y noche, (111/130) se prepararon para la batalla, enardecidos y llenos de rabia. (112/131)  Reunieron sus ejércitos y presentaron frente de batalla.  (113/132) Ummu-Hubur (Tiamat) fue quien lo preparó todo, (114/133)  proveyéndolos de armas invencibles  Ella engendró serpientes monstruosas (115/135) de dientes agudos y de implacables colmillos; (116/136) dotó a su cuerpo de veneno en lugar de sangre. (117/138) Fieros monstruos viperinos que ella revistió de terror (sentimiento). (118/139) De majestuosidad ella las cubrió y de magnifica estatura las dotó.  (119/140) Quien las vio, se llenó de angustia. (120/141) Sus cuerpos se alzaron y parecía que nadie podría contener su ataque.  (121/142) Ella (Tiamat)  hizo surgir serpientes y dragones,  al monstruo Lamahu, (122/143) así como huracanes, perros de guerra, hombres-escorpión, (123/143)  grandes tempestades, y hombres-pez, y criaturas cornudas que, sin miedo a la lucha,   portaban abominables armas. (125/144) Sus comandantes eran (seres) poderosos que nada parecía poder resistirseles. (126/145) De tal porte y de tal tremenda estatura, ella creó siete/once monstruos. (127/146) De entre los dioses, quienes fueran sus hijos, y habían permanecido fieles, (128/147) ella propuso a Kingu y  en el concilio (de los dioses), le propuso para el poder. (129/148) Para marchar tras las tropas y dirigirlas en la contienda, (130/149) para dar la señal de lucha y advertir del ataque, (131/150) para capitanear la batalla y  [151]  conducir la refriega. 

(132) Junto a él, envuelta en soberbios ropajes, le hizo sentarse, diciendo (Tiamat): [ Alternativa (151): Dejo tal en tus manos, mientras lo sentaba en el consejo]  (133/152) «Yo he pronunciado mi alegato/encantamiento, ante la asamblea de los dioses y te he propuesto para el poder. (134) La soberanía sobre todos los dioses me ha sido envestida junto a ti [Alternativa (153)  De la soberanía sobre todos los dioses, he colmado tu mano] : (135/154) Tu has sido ensalzado mi esposo elegido,  (136/155) Magnificaran tu nombre sobre todos ellos.( los Anunnaki) » (137/156) Ella le entregó «las Tablas del Destino»y sobre su pecho las colocó, diciendo: (138) «Tu mandato no se entiende sin aval y la palabra de mi boca será quien lo establezca» [Alternativa (157) «En cuanto a ti, tu mandamiento será inmutable, ( tu palabra) perdurará]  (139/158) Desde ese momento, Kingu,  ahora ensalzado y habiendo recibido el poder de Anu, (140/159) decretó el destino de los dioses, sus hijos,  diciendo: (141/160) » Sea la apertura de tu boca quien aplaque al dios del Fuego. (142) El que es ensalzado para la batalla, mostrará su valía» [Alternativa: Humillará al Potente Armamento de tan poderoso poder]»

TABLILLA II

« (1) Tiamat realizó concienzudamente su cometido. (2)  Ella urdió sufrimientos contra los dioses, sus hijos. (3) Para tomarse revancha, (sobre) Absû, Tiamat planeó latrocinios. (4) En el preciso momento que ella hubo reunido sus fuerzas, un dios afín a Ea le avisó. (5) Ea consistió con lo dicho, y  (6) se sintió intensamente afligido, sentándose apesadumbrado.  (7) Pasado los días,  su rabia se aplacó, (8) y  a la residencia de Anšar, su padre, el inició su camino. (9) Cuando llegó, y estuvo delante de su padre Anšar, el progenitor que lo engendró, (10) todo lo que Tiamat había tramado, el se lo repitió, diciendo: (11) «Tiamat, nuestra madre, ha alimentado odio contra nosotros (12)  con todas su  colérica fuerza [Alternativa: Ha convocado una asamblea]  (y)  en el colmo de la ira. (13)  ( y) todos los dioses se han vuelto  hacia ella. (14)  junto con ellos , los (seres) que  ella/tu ha/s creado y que a su lado marchan (15) Ellos han hecho causa común   y al lado de Tiamat, avanzan: (16) están furiosos y urden maldades sin descanso día y noche.  (17) Se preparan para la batalla, enardecidos y llenos de rabia. (18) Reúnen sus ejércitos [Alternativa: han congregado concejo] y presentan frente de batalla. (19) Ummu-Hubur (Tiamat: La madre del Hubur) es quien lo prepara todo, (20) les provee de armas invencibles. Ella ha engendrado serpientes monstruosas  (21) de dientes agudos y de implacables colmillos/fauces;  (22) dotando a su cuerpo de veneno en lugar de sangre. (23) Fieros monstruos viperinos que ella ha revestido de terror (sentimiento de). (24) De majestuosidad ella las ha cubierto y de magnifica estatura las ha dotado. (25) Quien las ha visto, se ha llenado de angustia. (26) Sus cuerpos se alzan y parece que nadie podrá contener su ataque. (27) Ella (Tiamat)  ha hecho surgir serpientes-dragones, y al monstruo Lamahu, (28)  así como huracanes, perros de guerra, hombres-escorpión, (29) grandes tempestades, y hombres-pez, y criaturas cornudas  (30) que, sin miedo a la lucha, portan abominables armas. (31) Sus comandantes son (seres) poderosos que nada parece poder resistirseles. (32) De tal porte y de tal tremenda estatura, ella ha creado a siete/once monstruos. (33) De entre los dioses, quienes fueran sus hijos, y han permanecido fieles, (34) ella ha propuesto a Kingu y  en el concilio (de los dioses), le ha propuesto para el poder . (35) Para marchar tras las tropas y dirigirlas en la contienda, (36) para dar la señal de lucha y advertir del ataque,  (37) para capitanear la batalla y  conducir la refriega.(38) Junto a él, envuelta en soberbios ropajes, le hizo sentarse, y dijo: [ Alternativa; De la soberanía sobre los dioses, ella le ha colmado] (39) ‘Yo he pronunciado mi alegato, ante la asamblea de los dioses y te he propuesto para el poder.  (40) La soberanía sobre todos los dioses me ha sido envestida junto a ti. [Alternativa: De la soberanía de los dioses, he colmado tu mano] (41) Tú has sido ensalzado  mi esposo elegido. (42)  Magnificaran tu nombre sobre todos ellos. (los Anunnaki) ‘. (43) Ella le ha  entregado «las Tablas del Destino»y sobre su pecho las ha colocado, diciendo: (44) ‘Tu mandato no se entiende sin aval y la palabra de mi boca será quien lo establezca’. [Alternativa:»En cuanto a tí, tu mandamiento será inmutable, ( tu palabra) perdurará] (45)  Desde ese momento, Kingu,  ahora ensalzado y habiendo recibido el poder de Anu, (46) ha decretado el destino de los dioses, sus hijos,  diciendo: ‘(47)  Sea la apertura de tu boca quien aplaque al dios del Fuego. (48) El que es ensalzado para la batalla, mostrará su valía’ [Alternativa: Humillará al Potente Armamento de tan poderoso poder].

(49) Cuando Anšar oyó como Tiamat había urdido una revolución [Alternativa: Tiamat estaba rencorosamente perturbada], (50) [Hirió sus flancos] y se mordió los labios, (51) [Melancólico estaba su corazón, perturbadas sus entrañas]. (52) [Cubriendo su boca], pronunció una breve lamentación. (53) [¡Levántate, Ea, hijo mío, sal a la] Batalla!. (54) [El arma que] tu has fabricado ¡Adelante, blándela!] (55) Mummu y Absû,  habéis sido  sometidos [ Alternativa: ¡Has encadenado a Mummu, y a Abšu ya ejecutaste! ], (56)  pero Tiamat ha ensalzado a Kingu, más ¿Donde estás aquellos que se le han opuesto? [Alternativa: (Mata esta vez a Kin)gu, el que camina delante de ella] (57) (…) Deliberación/Sabiduría. (58) (..) 59 (…) (60) [Respondió] el [consejero] de los dioses, Numimud: (61) [«¡(…) corazón insondable que designas los destinos!] (62) [¡(A quien) corresponde moldear y destruir!] (63) [¡(Anšar, corazón) insondable que designas los destinos!] (64) [¡(A quien) corresponde moldear y destruir!] (65) [¡Llevar a cabo tus designios, también lo deseo yo!]

( Hay un paréntesis de aproximadamente 7 líneas  en el texto…)

 (72) (Anšar), junto con su hijo (Anu), tomó la palabra:   (73) «(…) mi poderoso héroe, (74)  el de fuerza prodigiosa, aquel cuyo ataque no puede ser resistido.  (75) Ve y preséntate ante Tiamat.  (76) Haz que su espíritu se apacigüe y que su corazón se vuelva misericordioso. (77)  Si ella no prestara  atención a tus palabras, (78)  nuestra  palabra será oída y ella será apaciguada.» (79) El oyó la palabra de su padre Anšar y dirigió sus pasos en busca de Tiamat. (80) Hacia ella, él tomó el camino.  (81) Anu trajo el anochecer [Alternativa: (Cuando Anu estuvo suficientemente) cerca]  y vio lo tramado por Tiamat. (82)  él  no pudo ofrecer resistencia y regresó.

(83) [Rastreramente volvió ante] Anšar, [su padre] (84) [ (y como si éste fuera Tiamat) ], el  habló a su lado:  (85) «[No es (su)ficientemente fuerte mi mano para someterte]» (86) [Sin palabra, quedó Anšar, fija su vista a la tierra, ] (87) [con el pelo agitado y en dirección a Ea moviendo la cabeza.] (88) [Todos los Anunnaki se reunieron en aquel lugar, ] (89) [Con los labios cerrados (y) prietos, (se sentaron) en silencio,] (90) [(lamentándose:) «Ningún dios puede ir (al combate),] (91) [desafiar a Tiamat y volver (con vida).] (92) [Anšar, el Señor, padre de los dioses, (se levantó con) solemnidad] (93) [y (después de) haber enfrentado sus pensamiento con el corazón, (dijo a los Anunnaki):]

(105/94)«[Aquel cuya (fuerza) es preponderante, será (nuestra)] venganza (…),  (106/95) [Aquel que es sagaz en la batalla, Marduk, el] héroe.»

(107/96)  En el momento de su decisión, [Ea alejó a (Marduk) a su cámara privada] (108/97) [(Dándo)le consejo,  habló a su lado [ de lo que estaba en su corazón:] (109/98) «[Marduk, considera mi advertencia, haz caso a tu]  padre.  (110/99) Tu eres mi hijo, el que tiene  compasivo su corazón. [Alternativa: el que conforta mi corazón] (111) (…) a la batalla traerás el anochecer [ (100) Alternativa: Cuando éstes frente a Anšar, acercate como (si fueras) al combate.] (112/101) [Permanece en pie cuando estés frente a] él, que te contemple, se sosiegará «(113/102)  Y el Señor (Marduk)  reconfortado con la palabra de su padre, (114)  dibujó la noche y se presentó ante Anšar [Alternativa (103): Se aproximó y permaneció en pie ante Anšar.] (115/104) Anšar le contempló y su corazón se llenó de regocijo. (116/105) Le besó en los labios y su recelo se apartó de él (117) «Padre mío, que no sea  contravenida la palabra de tus labios; [Alternativa (106): «Padre mío, no éstes mudo, abre ampliamente tus labios] (118/107)  déjame partir, ya que yo puedo lograr lo que tu corazón ansía». (119) «Anšar, que no sea contravenida la palabra de tus labios; [Alternativa (108): Anšar, no éstes mudo, abre ampliamente tus labios] (120/109) déjame partir, ya que yo puedo lograr lo que tu corazón ansía»  (121/110)¿Que varón es éste que dió lugar a tal batalla..? (122/111) [(No es si no)] Tiamat, una mujer, la que armada nos ataca. (123/112) [(Padre mío), mi progenitor:] ¡Regocijaos y permanecer contentos! (124/113)  El cuello de Tiamat será prontamente hollado por [tu] pie (125/114) [(Anšar), mi progenitor:] ¡Regocijaos y permanecer contentos! (126/115)  El cuello se Tiamat será prontamente hollado por [tu] pie  (127/116) «¡Hijo mío, conocedor de toda sabiduría! (128/117) Pacifica a Tiamat con un sagrado encantamiento. (129) ¡Rápidamente, ponte  en camino! [Alternativa (118): ¡En el carro de las tormetas, aprémiate!] (130)¡ Por la sangre que no puede ser derramada, regresa de nuevo! (131/120) El Señor (Marduk) se emocionó con las palabras de su padre. (132/121) Con el corazón exultante, dijo a su padre: (133/122)  «Señor de las divinidades, destino de los dioses (134/123) Si, yo tu venganza,  (135/124) somete a Tiamat y te da la vida,  (136/125) convoca un asamblea,  haz patente mi  supremo destino y proclámalo. (137/126) [Cuando] en el trono de Apzukinaku podaís regocijaros juntos. (138/127) Con mi palabra puesta en el lugar de la tuya,  yo fijaré el destino, (139/128) que deberá por siempre permanecer inalterado (140/129) , así como la palabra de mis labios no podrá ser cuestionada o considerada sin aval! »

Aclaración sobre la entrada:

En un primer momento he de reconocer que la idea era plasmar, en exclusiva,  la traducción realizada por L.W. King en 1902 sobre las tablillas descubiertas en Nimrud, biblioteca de Assurbanipal, durante los años 1848 y 1876, más un estimado compañero, que comparte mis aficiones, me hizo ver que tal versión podía dar lugar a interpretaciones equívocas del relato. Aún tomando en consideración tal sugerencia,  he decido mantener la versión de 1902, pero ofreciendo, y en numerosos párrafos completando el texto, una alternativa lectura basada en una de sus traducciones recomendadas: La de Luis Astey V. de 1989.

De esta guisa, entre corchetes [] aparecerán  las traducciones alternativas y los párrafos añadidos, pareciendo con doble numeración de las líneas en el caso de existir una aceptable coincidencia.

Decir que está más moderna traducción incluye cinco fuentes arqueológicas de un primer documento que se estima datado, en su originalidad, entre los siglos XVII-XVIII a.c. y que incluye tablillas del «grupo de Nimrud», siglo VII a.c. y el «grupo neobabilónico», siglos VI-II a.c., conformando la base de la traducción de L.W. King, así como el «grupo de Assur», siglo IX a.c. aprox.; «grupo de Kish» y «grupo de Uruk», siglos VIII-VII a.c. y siglo VI a.c. respectivamente;  y por último, el «grupo de Sultantepe», siglo VIII-VII a.c.

Referencias:

«Enuma Elish: The epic of creation» Traducción de  L.W. King (1902)

«El Enuma Elish. El poema de la creación».  Traducción de Luis Astey V. (1989)

El primer gran tratado de Astronomía: La tabla de Venus del rey Ammi-Zaduqa.

A partir del IV milenio a.c. en Mesopotamia, y ya plenamente inmersos en el revolucionario suceso de la agricultura,  se vive  un nivel de desarrollo cultural que permite una utilización sistemática y diversificada del medio. Este nuevo paso en la tecnificación de los medios productivos trajo consigo un incremento en la diversidad de las atribuciones sociales dentro  los asentamientos,  definitivamente inmersa en un periodo urbano o proto-urbano, y que sofistica las funciones  organizativas y legislativas. Éste nuevo paso en la estructuración de las poblaciones, y que tiene como consecuencia una progresiva diferenciación social,  tendrá su  máximo exponente en la institución templaria. El Templo o lugar de culto del dios protector de éstas ciudades-estado  se alzará como  el aglutinador y gestor único de ese progresivo desarrollo socio-económico.

Nomenclatura cuneiforme numérica babilónica

En el último siglo y medio, los arqueólogos han estado excavando en estos recintos religiosos en forma de torre escalonada o «ziggurat» y  han encontrado importantes muestras plasmadas en  barro cocido de su historia. Éstos escritos relatan  un poder político teocrático que  posee en casi su totalidad  las parcelas agrícolas disponibles,  a la vez que se destaca como exclusivo propietario de sus canales de irrigación. En añadidura a su posición como referente religioso del enclave, el templo es un centro administrativo donde se comercia con mercancías y servicios, disponiendo de sus propios talleres manufactureros, y ejerciendo como único centro posible de aprendizaje de los diferentes oficios y artes. No cabe duda que el progresivo desarrollo de éste emporio haría necesario una metodología que  permitiera cuantificar y valorar los movimientos económicos de tales riquezas. También parece lógico pensar en la existencia de un ordenamiento organizativo para su conservación y explotación, así como de unas premisas administrativas que sirvieran  como eje de la burocracia del prominente estado. De los segundos y terceros conocemos su denominación y funciones, se trata de los rituales templarios, y de los primeros su necesidad de crear un sistema contable. Pero un sistema de información de semejante índole haría necesario la creación de un soporte duradero que asegurara su perdurabilidad  en el tiempo y por tanto, su legitimidad y consulta.  Éste soporte será la escritura realizada sobre tablillas de barro mediante una caña terminada en cuña que serían posteriormente cocidas, lo que conocemos genéricamente como escritura cuneiforme.

Como parte de éste sistema, y que progresivamente se fue imponiendo en la Baja Mesopotamia a partir del III milenio a.c.,  la representación  numérica sumeria en escritura cuneiforme fue un excelso logro que permitió el desarrollo de la primera ciencia conocida. Su valor es tal que ha perdurado hasta nuestro días como de uso estandarizado en geometría, así como en nuestra forma de medir el tiempo.  La estructura representativa sumeria es considerada como la base de nuestro actual sistema decimal matemático,  pero con la leve diferencia que la  numerología sumeria era  decimal  sólo para  los cincuenta y nueve primeros números, para a continuación seguir su anotación en sexagesimal.

Tablilla astronómica de Venus. Reinado de Ammi-Zaduqa. 1646-1626 a.c. I dinastía Babilónica. British Museum

Gracias a éste potente método,  los sumerios, y posteriormente los babilonios, comenzaron a ser unos verdaderos expertos en el arte matemático. Ayudados por su impronta, los mesopotámicos fueron los introductores de una de las más preciadas herramientas del cálculo:  Las «tablas numéricas». Tablas que eran utilizadas como ayuda en  operaciones matemáticas simples, recíprocos, cálculos angulares y raíces cuadradas. Más adelante,  los babilonios fueron capaces de resolver ecuaciones lineales y cuadráticas, e incluso algunas con superior potencia, siendo los precursores en la utilización de formulación algebraica en el cálculo geométrico, mucho antes de lo que nos ha dictado nuestra tradición greco-latina. Bajo la dinastía amorrea de Babilonia, siglo XVIII a.c.,  el calendario, así como la nomenclatura de unos meses de estricto origen babilónico, conseguirá ser unificado. Meses que estarán compuestos de 29-30 días – esto era como consecuencia que los babilonios empezaban el mes durante la «Luna Negra» o «Novilunio» y su aparición no es constante. Oscila entre  las 18 y 30 horas anteriores a la «Luna Nueva» – , conformando  un total de 12,4 meses para un calendario lunar que se mantendrá prácticamente inamovible hasta el siglo VI a.c.

Para entender el interés mesopotámico por la Astronomía habría que reconsiderar la evolución de los preceptos religiosos. Dichos cambios vendrán definidos por  la adaptación  de los diferentes panteones  sumerios debido al progresivo asentamiento o  su conquista  por parte de diferentes clanes y tribus semitas de las  urbes sumerias. Éste acontecimiento dará como solución la institución por convergencia de  nuevos credos patronales, caso de la ciudad de Ur/Urim –  donde se comenzará a venerar al dios lunar Sin – , Sippar o Larsa,  -cuyo patrono sera el dios solar Shamash –  y donde las antiguas genéricas creencias a la diosa de la Fertilidad, Inanna  se personalizarán en otra divinidad de carácter semita identificada con el planeta Venus: la diosa Ishtar.  Con la integración en el panteón sumerio de éstas creencias semitas de carácter astral  se produce una intensificación del estudio de los astros como posible fuente de conocimiento de los designios divinos. – anteriormente los estudios astronómicos estuvieron principalmente encaminados  a la obtención de un calendario con una finalidad agrícola – Así en el reinado de Ammi-Zaduqa, 1646-1626 a.c.,  nos ha llegado la recopilación de un estudio de la posición y apariencia de Venus  y que se tiene por el tratado antiguo más importante sobre Astronomía, si bien, y como hemos comentado, también añade una interpretación astrológica de tales acontecimientos y su vinculación sobre hechos mundanos. El extenso panteón astral, que se creará como consecuencia de la unificación, será progresivamente asociado, en su principalidad,  a los distintos fenómenos cósmicos observados – según nos relata el  texto astronómico del » Enûma Anu Enlil» y del que formará parte el texto de las tablillas de Venus – y cuya vigencia se extenderá desde el siglo XVI hasta XII a.c. con la caída de la dinastía kassita babilónica, aunque buena parte  de sus asimilaciones deben ser datadas durante el imperio semita acadio en el siglo XXIV a.c.

Las tablas de Venus del rey Ammi-Zaduqa nos proporcionan  la posición relativa en el cielo,  desde la perspectiva  de un observador en la Tierra en la Babilonia del siglo XVII a.c y  facilitada en años/meses/días, del planeta Venus en  un  ciclo de veintiún años. – Decir que  el  ciclo completo de Venus es de ocho años , es decir 99 meses y cuatro días del calendario babilónico   – donde describe cinco ciclos completos de cuatro fenómenos cósmicos observados:

Mediante el esquema de la izquierda se ha representado el periodo sinódico de Venus  – tiempo que toma su órbita alrededor del Sol en referencia a un observador en la Tierra según un calendario lunar – . y que corresponde a 583,92 días del calendario babilónico que multiplicado por cinco ciclos corresponden a 2.919,60 días o lo que es lo mismo: Ocho años de 365,25 días para un total de 2.922 días del calendario solar actual y donde se puede apreciar la exactitud de la observación. 

Para entender las cuatro efemérides de Venus reflejadas en las tablillas, habría que imaginarnos que encontramos en un punto del Hemisferio Norte y que desconocemos el heliocentrismo de las órbitas de los  planetas. Así, la sensación que tendremos del planeta será la de  una estrella  que se alza y desaparece diariamente, pero a la que se le percibe un progresivo desplazamiento hacia la izquierda del firmamento en el transcurso de un determinado periodo de tiempo. Esta percepción dará como resultado  que  parezca que cada día, Venus,  «amanece» más tarde – Esto verificaría que la Tierra gira alrededor del Sol en el sentido contrario a las agujas del reloj – . Por otro lado,  para un observador terrestre,   El sol giraría en sentido contrario a las agujas del reloj con respecto a la Tierra y definiría porque la posición de determinados fenómenos cósmicos en la astronomía mesopotámica se hicieran en función de la Eclíptica o Ecuador.

Si bien los planetas se mueve generalmente mediante la percepción anterior, llamada «directa», hay veces que los planetas pueden  moverse de forma contraria.  la denominada «retrógrada» . Como Venus está mas cercano al Sol que la Tierra,  cabe la posibilidad que pueda situarse o bien  entre nosotros y el Sol o más allá de él,  según la visión  del observador .  Cuando Venus se sitúa lejos del Sol, moviéndose de forma directa, compartirá su trayectoria y  sumará  su resplandor al suyo.  Pero si su posición es  más cercana al Sol ,  es posible que  tenga un movimiento retrógrado apareciendo  a ojos de nuestro observador que se mueve de forma más rápida que el  propio Sol por  ir éste de derecha a izquierda. También existen ciertos puntos, visto desde la Tierra, donde puede parecer que no se aprecia ningún movimiento – marcado en el diagrama como EM y EA –: El primer episodio corresponde,  tomando de ahí el nombre  de «Estrella de la Mañana», cuando en el Amanecer el planeta es visto frontalmente al Sol Naciente, pero donde al Atardecer, Venus, se mueve por debajo del horizonte antes del Sol y por ello será «invisible» durante ese momento.  Cuando se sitúa, desde la perspectiva del observador, en el punto que hemos denominado EA, Venus, sólo puede ser visto por la tarde, tomando entonces el nombre de «Estrella del Atardecer», mientras  que por la mañana y como consecuencia de la incidencia de los rayos del Sol, no puede ser visto. Cuando el planeta se sitúa en la zona superior de la conjunción, «Horizonte de visión oculto»,  o en la zona de inferior  de la conjunción, más cercano a la Tierra, Venus no puede ser visto por el observador por ser también oculto por el brillo del Sol.  Siendo  los vértices de la zona inferior de conjunción del planeta donde se define el comienzo o la finalización de sus efemérides como «Estrella de la Mañana» y «Estrella del Atardecer», así como de sus respectivos periodos.

Según estos fenómenos astrales observados, los babilonios definían el «estado divino»  de la diosa Ishtar, en su ambivalencia como diosa de la Fecundidad y de la Guerra. En el «Enûma Anu Enlil» en su tablillas 59-63, correspondientes a las «Tablas de Venus», el nombre habitual para la diosa era «[d/mul] dil-bat» , «La Estrella Brillante»  formando parte de la triada celestial junto a Shamash y Sin.  Así en los textos exorcistas «Utukku Lemnûtu» (CT 16, 19-54). parece un texto donde Enlil,  después de conferenciar con Enki, ubica a Sin, Shamash e Ishtar para mantener el orden en «Šupuk šame»,  los Cielos, junto a Anu. 

Con la ascensión a los Cielos de Ishtar, se produce un ruptura en la tradición del panteón mesopotámico. El planeta Venus siempre tuvo un carácter «bisexual» , cambiando su sexo en función de las dos mas importantes efemérides conocidas según su posición con respecto al Sol. Ishtar adopta una personalidad  de hombre y de «maleficiencia» cuando entra en el ciclo de «Estrella del Atardecer», y benéfica y femenina cuando lo hace como «Estrella de la Mañana» (BPO  II, pag 46. Texto IV, 6-7a)

 «Te invoco, Señora de las señoras, Diosa de las diosas. Ishtar, Reina de los territorios habitados, que otorgas el orden a los pueblos, antorcha brillante de los Cielos y la Tierra, esplendorosa luz de los territorios habitados. Donde tu miras allí resucita el muerto, sana el enfermo, el desdichado se vuelve próspero al ver tu rostro. He sido yo quien te ha llamado, tu servidor fatigado, derrumbado, herido. Mírame, Señora, y acoge mi súplica, pon tu mirada confiada sobre mí, escucha mi ruego. Concédeme la gracia para mi cuerpo tembloroso, turbado y desconcertado; gracia para mi dolorido corazón anegado de lágrimas y sufrimiento; gracia para mi alma que suspira y llora. Pon tu benévolos ojos sobre mí, desde tu esplendoroso rostro mírame. Es en tí en quien confío, Señora, pues he sido atento; es a tí a quien suplico, cancela mi deuda, absuelve mi falta, acoge mi plegaria, libera mis ataduras, devuélveme la libertad, guía mi paso, que, radiante como un señor, recorra de nuevo el camino de los hombres» «Himno a Ishtar».  Primera dinastía de Babilonia. RA, XII, 170-171. Año 1600 a.c. aprox.


Referencias:

«Cosmos, an illustrated History of Astronomy and Cosmology» John North (2008)

«Mesopotamian Astrology» Ucha Koch-Westenholz (1995)

«Ancient Near East, An Anthology of texts and pictures» James Bennett y otros (2011)

Imágenes:

bloganavazquez.com

en.wikipedia.org


El culto a Marduk. La evolución teológica durante el II milenio a.c.

Si bien el origen de las creencias hacia el dios Marduk sigue siendo una incógnita, no cabe duda  que su éxito religioso fue en paralelo a la progresiva importancia comercial del enclave de Babilonia. Incremento de importancia que proviene de su inicial estatus como colonia comercial sumeria en la ruta  hacia el noroeste y que vio engrandecida su transcendencia como consecuencia del progresivo deterioro, por cuestiones naturales y comerciales,  de los puertos marítimos en las desembocaduras del Tigris e Eufrates, así como de las rutas hacia el Golfo Pérsico. El giro del comercio mesopotámico hacia el norte,  y el incremento de la riqueza que tal situación generaba,  fue el detonante económico del afianzamiento de su divinidad patronal.  Una divinidad patronal que todos los indicios nos conducen a la adoración de un dios solar, no ya solamente por ser su nombre la posible corrupción de una denominación del dios sumerio-acadio Utu,  damar-ud o «Joven Toro del Sol» sino también por las referencias hacia sus creencias dentro del culto asirio. Culto asirio que lo identifica con Meslamtea (VA 08917, 40), relacionándolo con la «faceta oscura» del dios Sol, aquella que transcurre cuando el dios «baja al inframundo» en su recorrido nocturno desde Poniente a Levante.  Aunque, y como nos apunta DDD, en sus primigenios orígenes fuera denominado en sumerio como «amar.uda.ak»,  o «Joven Toro de las Tormentas»,  sin ninguna acepción solar, lo que  exclusivamente indicaría la deriva  de su personalidad divina desde el IV-III milenio a.c.  hasta el II-I milenio a.c. y su adscripción a renovadas creencias.

La coyuntura en Mesopotamia en el II milenio a.c.  se  nos presenta de un modo complejo. Por una lado,  el  periodo que corresponde a los años que van desde 2004 al 1595 a.c.,, y que comprende el final de la  III dinastía de Ur y el final de la I Dinastía Babilónica, la Baja Mesopotamia será testigo de las incursiones y  posterior conquista del poder por parte de los diferentes  clanes amorritas. Clanes o tribus nómadas de semitas occidentales que posteriormente se vieron envueltas  en las luchas de las dinastías intestinas amorritas de Isin y Larsa por el control supremo de Sumer y Akkad. Éste periodo concluirá con la final preponderancia de la I dinastía, también amorrita, de Babilonia, 1894-1712 a.c.  a manos de Ammu-Rapi/Hammurabi, 1792-1750 a.c., y que nos acerca al momento del ascenso a la  posición suprema del panteón mesopotámico por parte del dios Marduk, como así nos relata en el Enuma-Elish. Si bien, como aclara J. Botteró,  aunque progresivamente fue sustituyendo a la triada sumerio-acadia Anu, En-lil, Ea, de forma institucional, el pueblo siguió conservando por largo tiempo,  sus anteriores creencias hacia Ishtar, la diosa-madre,  y hacia el genuino dios solar supremo semita, Shamash. 

El final de la dinastía amorrea de Babilonia a manos de los hittitas y la posterior cesión de su capital a los kassitas – Los kassitas se supone que son pueblos nómadas procedentes de la meseta iránia que penetraron en Mesopotamia cruzando los Montes Zagros y que avanzaron hacia Babilonia a través del Valle del Diyala fundando el reino de Khana/Hana – como fruto de su alianza ante el auge de los hurritas/mitannos en Shubartu, dio como solución una nueva soberanía sobre Esagila.

Presentación simbólica de Marduk en un kudurru. Aparece un altar ó asiento sobre el que figura una lanza que se acompaña de  un mušhuššu,  o dragón cornudo, acostado 1099-1082 a.c. British Museum.

Con el retorno desde Khana de la estatua de Marduk al templo de Esagila, tras el expolio de la ciudad veinticuatro años antes a manos del primer soberano de la dinastía kassita, Augum II, se cierra un periodo de incertidumbre y abandono tras la destrucción hittita. El periodo kassita babilónico, 1571-1156 a.c., supone una continuación y una reafirmación del culto a Marduk en Babilonia, siendo en este momento cuando se establece el definitivo «ciclo cultural» dedicado a la figura del dios, protagonizando en exclusiva las festividades del «Año Nuevo». De éste modo, aunque se mantenga el panteón establecido por el Enuma Elish amorreo, se  produce una evolución de las creencias que las hará diferenciarse del modelo anterior como fruto de una nueva sensibilidad social y cultural.  Estamos ante la evolución de unas creencias desde  un dios solar vinculado a la justicia divina sobre lo terrenal que aplica y establece penas y las aplica, de carácter semita, hacia un divinidad protectora ante los avatares humanos, tanto físicos como morales.  Evolución que  tal vez  estuviera influenciada por el  carácter indoeuropeo del mismo pueblo kassita y su forma de afrontar un periodo aquel de severas dificultades en el devenir general babilónico.

Ya en épocas anteriores, como consecuencia del tránsito desde divinidades ctónicas paleo-neolíticas a las astrales semitas, se había producido una modificación en las personalidades de los entes divinos mesopotámicos hacia conceptos representativos de cualidades morales del hombre. Durante el periodo kassita, esta «transformación» de las improntas divinas se acentúa, como relata M. Liverani, encaminándose hacia un «dios personal único y todopoderoso» y que define el afianzamiento de los credos nómadas. De ésta guisa,  que el creyente establece un vinculo personal con la divinidad, considerándola como su «confidente» y el destinatario único de sus plegarias y sacrificios, pues se trata de la  único ser, si bien e un principio existía la potestad de escogerlo entre la extensa relación del panteón mesopotámico,  que hará posible su sanación o salvación en detrimento de los avatares que le toca vivir. Esta variación teológica queda reflejada en el texto kassita «Ludlul Bel Nemequi» En este relato, el héroe, un hombre piadoso  es despojado de su salud y riquezas por los dioses sin mediar falta alguna,  siendo Marduk, mediante su mediación, quien restituye a Shusbi–meshrû-Shakkan tanto salud como hacienda –. y que refleja una reflexión, en un contexto babilónico antes mencionado de sinsabores tras la derrota sufrida, sobre la iniquidad de los dioses. Diatriba que salvaguarda sus creencias hacia las divinidades mediante la conclusión del  haber cometido una afrenta a los dioses sin ánimo o sin conocimiento de ella , como así queda  reflejado en  los rituales de los «Textos Shurpu» en la liturgia exorcista kassita. – Conceptos que son extensibles al dogma hebreo en particular muy similar y al semítico occidental en general – y que trastoca una antigua máxima de la  Creciente Fértil: «La de dios humillado por las armas terrenas, dios apartado».

Otro precepto incipiente en la relación del hombre con lo divino, es el binomio Bien/Mal de clara influencia indoeuropea. El creyente se siente objeto de una lucha entre  unas «fuerzas negativas» que le acosan y las «fuerzas positivas», que mediante rituales y plegarias, pueden contrarrestarlas – Hasta ahora los dioses hacían y deshacían a su antojo y capricho sin  que en ningún momento fueran considerados como «seres malignos» o «seres benignos»,. Exclusivamente eran dueños y señores con derecho a vidas y haciendas, y que influían en  éstas  en función de su atributo moral o natural –  A raíz de la anterior bifurcación teológica, y por primera vez en la Baja Mesopotamia,  aparece el concepto de «demonio«, un ente que será hijo de los dioses, y por tanto con un origen divino, que será la representación de unos padecimientos mundanos tanto físicos como económicos y cuyo propósito es el castigo  ante una «ausencia de moralidad». Tales comportamiento éticos emanan de unas conductas establecidas por los propios dioses – Los infortunios surgían como consecuencia de una culpa o infidelidad hacia el dios. Se suponía que únicamente la voluntad del dios protector era la que permitía que las invocaciones de brujas y hechiceros, u otros dioses, a los demonios provocadores de padecimientos llegaran a fin – que además incorporarán otras conceptos de tipo mágico y adivinatorio propios también de culturas provenientes de Anatolia y la meseta iraní, como pudieran ser el caso de las maldiciones reflejadas en los «kudurru«.

En contraposición a los seres malignos, nos encontramos a la pareja bienhechora personal: El «Ilu» y la «Ishtaru». El «Ilu» viene a representar al dios o  la «Bienaventuranza Divina» ,volviéndonos  a encontrar una nueva posible referencia al topónimo «Babilonia» y a su dios solar Marduk como «Babbar-ilu-um» o «Lugar  del bienhechor brillante».  La «Ishtaru»  o «Diosa de la Fortuna», y  que suele ser la pareja del dios y a la que se unen otros dioses menores de carácter benéfico, caso de los «lamašu» y los «shedu»– Como nota anecdótica decir que los shedu ó «keruba» son el origen, en plural,  del término hebreo «querubín» –

Marduk. Parcial nueva impresión de un cilindro-sello. Siglo IX a.c. Imperio neo-asirio.

Dicho esto y tomando de nuevo el hilo de la relación de la dinastía kassita y Marduk, habría que decir que realmente la soberanía kassita nunca tuvo al dios patronal de Babilonia como adalid. En principio, y así parece en la representaciones artísticas y en los títulos reales, – Como era el  de «shagin [d]Enlil-la»  que viene a significar el «administrador de En-lil», así como otros similares.. Aunque, muy posiblemente, habría que interpretar que se trata del dios Buriash kassita en el papel de «En-lil»  –  así como la relevancia que Nippur, residencia de En-lil, tuvo en esta época. Esta situación cambio con la definitiva derrota de la soberanía kassita de Babilonia por el reino de Elam y su posterior conquista  por  parte de Nabû-kudurru-usur I, 1125-1103 a.c. de la II dinastía de Isin.

Es de anotar que durante el transcurso y conclusión del periodo kassita-babilónico, la ciudad de Babilonia, como consecuencia de la labor de sus templos, adquirió un halo de «Ciudad Santa»  como cuna de erudición tanto teológica como en otras artes sacerdotales. Halo que se vio favorecido por una veneración sin fisuras al dios del templo de Esagila por parte de la dinastía reinante de Isin/Pasha que deseaba desterrar de la Baja Mesopotamia cualquier afecto hacia un dios En-lil, como sosias  del dios Buriash y al que se  ligaba a la derrotada de la dinastía kassita, como así lo reflejan  los retomados títulos reales como «Sol de Babilonia», título amorreo, y «Príncipe Amado de Marduk». Desde el punto de vista teológico y tras la caída en desgracia de En-lil, Marduk  aumentó  sus adjetivos retomando sus atribuciones de dios universal y único.

« …Ninurta es el  Marduk del azadón; Nergal es el  Marduk de la batalla; Zababa es el Marduk de la contienda;  Enlil es el Marduk de la majestad y del consejo;  Nabu es el Marduk auditor; Sin es el Marduk que ilumina la noche; Shamash es el Marduk de la Justicia; Adad es el Marduk de las lluvias… » Pasaje de himno a Marduk, (CT 24, 50, BM 47406, obverse) Periodo Neo-Babilónico.

Referencias:

«El antiguo Oriente Próximo: Historia, Sociedad y Economía» Mario Liverani (1995)

«El fin del segundo milenio» E. Cassin, J. Botteró, J. Vercoutter (1976)

Imágenes:

biblemuseum.blogspot.com

La Serpiente Primigenia: Tiamat y Leviatán. Conexiones.

Según las generalizadas creencias del Antiguo Oriente Próximo, al principio de los tiempos nada existía, salvo dos cualidades que daban presencia  al acuoso «Caos Primigenio» y que representaban,  dentro de ésta  primitiva explicación, los dos estados básicos del agua  como el componentes únicos de un Universo infinito. Estos conceptos, si los extrapolamos metafísicamente,  podrían perfectamente ser la dual abstracción de la idea,  ante  esa imprescindible necesidad a las que no dirige  los vericuetos de nuestro cerebro y su supuesta «racionalidad», del principio de «Causa y Efecto». Tales principios formarán las premisas básicas de los diferentes mitos creativos repartidos por el mundo y que estarán basados en la existencia en dos diferenciadas entidades como origen de los creado: Lo «masculino» y  «femenino» y que en estas creencias están soportados sobre el «Agua Dulce» ,  el dios Apsû, y el «Agua Salada»,  la diosa Tiamat. Tiempos donde no tener nombre era paralelo a no tener existencia.

« Cuando en lo alto, el Cielo no estaba nombrado, y  la Tierra, abajo,  aún no tenía razón:  El primigénio Absû, que los engendró y el Caos, Tiamat, la madre de ámbos,  sus aguas mezclaron.   (Cuando)  los campos no habían sido creados, y los pantanos no eran posibles de ver. Cuando ninguno de los dioses había sido llamado a existir , al no poseer nombre, y los destinos no estaban escritos…» Pasaje de la I tablilla del «Enuma Elish» texto sumerio de Nippur. I milenio a.c.

Representación de la lucha entre Marduk y Tiamat. Cilindro-sello neo-asirio siglo X-VIII a.c.

El nombre «Tiamat» es una deformación del vocablo acadio «Tiamtum», «Mar/Océano», (J.A. Black) y según A. Westenholz, en afO 25 (1975), una contribución acadia al panteón mesopotámico. Un hecho que  supondrá la conversión, dentro de la monstruosidad mitológica de tales creencias y que se cree acontecida durante el II milenio a.c.,  cambiando el  origen de Tiamat desde un ser vinculado a las montañas en su primitivo relato sumerio a un horrendo ser marino de tradición mediterránea levantina y semítica occidental, posteriormente. Ésta modificación en el pensamiento religioso, y que aisladamente pueda parecer anecdótico, formará parte de una revolución más profunda en las creencias de Sumer y Akkad y que es la general incorporación del esquema cosmogónico semita occidental en el episodio mitológico de la  «Creación del Mundo» sumero-acadia. De ésta guisa, se arrincona  o se da una posición secundaria, tal y como queda reflejado en los primeros versos del «Enûma Eliš»,  a un más antiguo y único concepto  sacro fundador de lo universal basado en unos principios ctónicos –  y cuya evolución, bien podrían estar presentada en el relato de la «Teogonía de Dunnu» –.  El reflejo de tal circunstancia,  como puede ser interpretado por el texto, es la «transmutación» de Tiamat desde una posición de «esencia primera»  al papel de «ente energúmeno» que es vencido por el dios Marduk, como así nos dicta el  relato. La derrota de los principios básicos de la Naturaleza, que están representados por los antiguos dioses Tiamat y Apsû, propone la creación de una nueva estructura divina  de poder en el Universo.  Renovado panteón que se edificará mediante el pacto de los jóvenes dioses, ahora ya soberanos, y que se culminará con la creación del Cielo y la Tierra a expensas de las entrañas de los anteriores. Pacto y alianza que es firmado sobre un acto conciliatorio típicamente semítico como son los rituales «karat b’rit» y que consiste en dividir en dos mitades a la diosa Tiamat en sacrificio.

« Khotar (otra de) dos mazas hizo bajar y proclamó su nombre: «Tú tienes por nombre Ayyamur ¡Ayyamur echa a Yam de su trono, a Nahar de solio de su poder! » Saltó la maza de las manos de Baal, como un águila de (entre) sus dedos, golpea el cráneo , en la frente al Juez Nahar ¡Que se desplome Yam y caiga a tierra!  Saltó la maza de las manos de Baal, como un águila de (entre) sus dedos. Golpeó  en el cráneo al príncipe Yam, en la frente al Juez Nahar. Se desplomó Yam, cayó a tierra. Se doblaron su artejos, y se descompuso su figura. Arrastro Baal y descuartizó a Yam, acabó con el Juez Nahar… » Pasaje del «Ciclo de Baal». KTU 1.2 tablilla IV. Siglo XIV-XII a.c. Ugarit/Ras-Shamra.

Leviatán, Behemot y Ziz. Ilustración bíblica. Año 1238 d.c. Biblioteca del monasterio de Ulm, Alemania.

Ésta postrera «conversión» de Tiamat, también conocida como Mummu,  «La Gran Madre», en la narración del texto del «Enuma Elish» amorrito-babilónico – Un texto que muy posiblemente fuera redactado, por los textos que nos han llegado,  en el siglo XII a.c. durante la  dinastía kassita – , tendrá como paso previo y, tal vez, como fuente de influencia, unos panteones semíticos occidentales con evidentes influencias del Levante Mediterráneo . Éstas creencias semíticas levantino-occidentales  nos llegarán también a través del desarrollo del mitológico «Ciclo de Baal», y por ende de los textos sagrados ugaríticos, donde Tiamat aparece definida con el vocablo «thmt», dentro de una ambivalencia divina, o como «grml wthmt», «Diosa de la Montaña y  de las Aguas Profundas»,  y cuyo avatar andrógino será su hijo, el dios Yam/Yamm, «Dios del Mar/Océano». Un dios Yamm que tendrá una personalidad basada sobre determinados aspectos afectos a las «diosas-madres» del Egeo. Es muy posible que, desde el ámbito conquistador semítico occidental, Tiamat continuara siendo relacionada con  el «Monte Saphon» o «Monte Casius», «La Montaña Santa«, y  de donde, según la mixtura levantino-semítica, brotaron las  primitivas «Aguas Ancestrales».

«(8) tan.lšmb (9) tšt trks (10) lmrym.ibnn (11) pl.tbtn.yymm (12) hmlt.ht.ynhr…» Pasaje de la «Captura de Yamm» KTU 1.83 (JNES 57).

« (8) Ella (la diosa Anat, amante de Baal..) colocó una mordaza a Tunnan, (y)  le ató contra las cimas del  Libano (11) ¡Oh Yamm,  fuera de agua, tu te consumirás,(12) (Juez) Nahar, llevado por el pánico!… »  Pasaje de la «Captura de Yamm» KTU 1.83 (JNES 57)

« Para los Elohim, tu eres nuestro más antiguo Melech/Protector, la obra de Yahweh en medio de Ha’aretz/ la Tierra. Tu dividiste a Yam en tu Oz/Poder. Tu quebraste las cabezas de Tannin en las aguas. Tu hicíste pedazos la cabeza de Leviatán, y la entregaste como  ma’akhal/alimento  a los seres que habitan Tsyiyim/Infértil desierto o/y Inframundo. Tu forzaste la apertura de la Fuente (de Aguas Primigenias..) y de la Inundación. Tu secaste el poderío de Nahar.»  Salmos 74: 12-15 . Biblia Ortodoxa Hebrea.

En el primer texto, un pasaje exorcista  de Ugarit, Yamm aparece asimilado a un monstruo marino,  tomando la representación del «Mal» o «Tunnan», en hebreo «Tannin» o «Tan.ni.n(im)» – Según un pasaje el Antiguo Testamento, Tanin,  fue un demonio-monstruo  incorporado al episodio bíblico de la creación del mar en el quinto día. (Génesis 1:21), si bien debe ser interpretado en exclusiva como un avatar de la Gran Diosa-Madre mediterránea. Un ejemplo perfecto sería la personalidad de  la diosa Potnia minoico-cretense  y que en su deriva andrógina helénica será representada por Potneidas: El dios Poseidón griego – y al que  los mitemas ugaríticos y bíblicos definen en los siguientes textos:

«La Bestia del Mar». Tapiz de la colección  de la Tenture de l’Apocalypse. Siglo XIV d.c. Galeria del Cháteau d’Angers (Francia) Aparece el «Dragón de Siete Cabezas» cediendo trono y poderes a la «Bestia del Mar», según el pasaje bíblico de Las Revelaciones 13-14

«(38) Cierto es que yo (Baal)  herí a Yamm, el amado de Ēl; Cierto es que yo acabé con Nahar, el gran dios; Cierto es que lo rendí y acabé con el. Yo mal herí a la sinuosa serpiente, (42)  el tirano de siete cabezas..»  KTU 1.3, columna III.

« Hashem Elohei Tzva’os/ Dios de los Ejércitos ¿Quien como tu, Oh, poderoso Hashem, Tu al que el Emunah/Conocimiento Absoluto rodea. Tu que dominas la soberbia del Mar. Cuando las olas se encrespan, tu la apaciguas. Tu que despedazaste a Rahab, lo mismo que a un cadáver. Tu que destrozaste a tus oyevim/enemigos con tu excelso poder. » Salmos 89: 9-11 Biblia Ortodoxa Hebrea.

Dicho esto, existe una última concordancia que vendría dada por el término hebreo «Téhôm» – comparar las similitudes etimológicas de»thm», Tehôm, con «thmt», Tiamat – ,»Lo Profundo» en Génesis 1:2, como su paralela  designación como ente asociado a las «Aguas Primigenias», y cuyo término es frecuentemente usado en Antiguo Testamento para definir a  las «Aguas Celestiales».

Leviatán, en hebreo «liwyatan», «Lo Sinuoso», aparece una sola vez en textos pre-bíblicos, siendo mencionado en la Biblia en un número de seis veces. En el libro de Enoc 60: 7-9,  aparece como un dragón de género femenino que reside en las profundidades del océano junto a «Behemot»,  un dragón de género masculino , que vive en el desierto, el dios Mot(h), volviendo a rememorar en su paralelismo a los actores del ciclo mitológico de Ugarit. Una divinidad, ésta última, que encarna a la La Infertilidad y la Muerte y que vuelve a incidir en los conceptos religiosos ctónicos anteriores a la invasión semítica del III milenio a.c. de los territorios afectos a las culturas megalíticas del Levante mediterráneo. Ambos,  según la Apocalipsis y los textos rabínicos, estarán presentes en la «Comida de los Justos» durante el escatológico banquete que acontecerá en el Final de los Tiempos.

« En el Yom Hahu,  Hashem con su cherev hakashah v’hagedolah v’hachazakah/terrible grande y fuerte espada escarmentarás a Leviatán, Nachash bari’ach/La Huídiza (diosa) Serpiente,  cuando Leviatán (sea), la Sinuosa Nachash; El matará a Tanin,  la que está en el mar » Isaías 27: 1. Biblia Ortodoxa Hebrea.

« ¡Levántate, Levántate, vístete de poder ,Oh, Vigor de Hashem!; Levántate como durante los yemei kedem/ancianos tiempos, como en las dorot olamim/antiguas generaciones. ¿No eres tú quien destrozaste a Rahab  y atravesaste a Tanin » Isaías 51:9. Biblia Ortodoxa Hebrea. 

Dicho lo anterior, puede ser tomado en consideración la existencia de una reforma religiosa o preponderancia de las creencias semíticas desde dos vertientes: Una vertiente, ya comentada, de derrocamiento de los antiguos dioses ctónicos sumerios por unos nuevos de dioses de influencia claramente semita occidental – Marduk exclusivamente será un renovado aspecto del dios sol semítico Shamash: El llamado «Joven Toro del Sol» –; y dos: La yuxtaposición de las creencias hacia la «Diosa Madre» de ámbito mediterráneo sobre las creencias astrales semíticas.

Tomado lo anterior en consideración, es posible que cuando el texto de Enuma Elish nos hable de la «Gran Serpiente», que no de Tiamat, nos éste hablando en realidad de un avatar o personalidad de la misma deidad primigenia, como representación de la «Fertilidad Creadora»,  dentro del conjunto de «Poderes de la Naturaleza». Poderes de la Naturaleza que son sometidos por los dioses supremos andróginos de la tradición semítica, y que  hacen inclinarse a la «Gran Serpiente» – Decir aquí que las raíces de los árboles, en la mitología sumeria, eran consideradas ya como fuente vivificante de la Naturaleza, y simbolizadas  como «serpientes» que se extendían por el subsuelo (Lévy-Bruel) -,  la antigua todopoderosa «Diosa Madre», ante el auge de los dioses de los nuevos conquistadores de la «Creciente Fértil».

Referencias:

«The future of biblical archaeology:…» James K. Hoffmeier, Alan R. Millard (2004)

«Gods, demons and symbols of the ancient Mesopotamia: an ilustrated dictionary» Jeremy A. Black, .. (1992)

«Dictionary of the deities and demons in the Bible DDD»  Karel Van der Toorn … (1999)

Biblos.com

Imágenes:

http://www.tali-virtualmidrash.org

de.wikipedia.org.

fr.wikipedia.org

Los desvaríos de Z. Sitchin: Los Anunnaki y los Igigi

Resulta importante, antes de hacer referencia explícita a los anunnaki e Igigi, realizar una pequeña reseña sobre la consideración que la tradición histórica mesopotámica da a la creación del Universo.

El Universo, de acuerdo con las más antiguas explicaciones sumerias y acadias,  fue creado por los dioses en los inicios de los tiempos conforme a un acuerdo  establecido  entre ellos. Está narración, en líneas generales,  se mantiene tanto en los documentos correspondientes a la mitad III milenio a.c., como en el  nacionalista «Enuma Elish» babilónico, en las postrimerías del II milenio a.c , e  incluso en los textos preservados durante época  helenística de Uruk a finales del primer milenio a.c,  enumerando, en su generalidad, tres bóvedas metálicas que dividían el cielo, junto con una desconocida región situada por encima de éste, las llamadas «Cuatro regiones del Universo», «An.ub.da lim.mu.ba» en sumerio  o «kibràt arba∂i» en semita, y  cuyas acepciones perduraron hasta el final de la escritura cuneiforme.

« (30) Los Cielos Superiores son de piedra «luludanìtù». Ellos albergan a Anu. El acomodó  dentro a 300 Igigi. (31) Los Cielos Medios son de piedra «saggilmund». Ellos albergan a los Igigi. Bel se encumbró dentro, en lo alto (32) del santuario de lapislázuli. El proporcionó  allí una candela de cegador brillo. (33) Los Cielos Inferiores son de jaspe. Ellos albergan a las estrellas. El dibujó las constelaciones de los dioses sobre ellos. (34) En el (…)  de la Tierra Superior, el depositó los espíritus de la sabiduría (35) [En el] (…) de la Tierra Media, el acomodó a Ea, su padre. (36) (…) El no dio por olvidada la rebelión. (37) [En el (…) de la Baj]a Tierra, el expulsa a los 600 Anunnaki » «Los niveles del Universo».  Pasaje de KAR 307 (VAT 08917) Periodo neo-asirio. (912-612 a.c.)

Texto del Enuma-Elish. I milénio a.c. Photo by proel.org

Este planteamiento conceptual del Universo nos deja las evidencias de una curiosa situación: Por una lado aparecen los «apkallu» sobre la faz de la Tierra y los identifica como los «espíritus de la sabiduría» y por otro condena, parece ser que como consecuencia de una rebelión, a los anunnaki al «inframundo», «junto a sus puertas..» según la «Ubicación de Marduk para los demonios» (AfO 19 117 24-30),  si bien debemos aclarar que esta percepción universal era desconocida con anterioridad al reino medio asirio. La anterior afirmación nos hace pensar que tal situación pudiera tratarse de una secuela del proceder a encumbrar en el panteón general mesopotámico al dios asirio «Assur» en detrimento de dioses de la tradición sumerio-acadia como «En-lil» o «Anu». Un hecho significativo del texto es que los Igigi aparecen representados  en la línea 30 y 31  como » d5.1.1″, «Los Siete», mientras que los anunnaki lo son en la línea  37 como  «da-nun-na-ki» y que nos hace consideran una diferenciación de presencias y que puede ser corroborada en el siguiente texto:

«(1) ÊN ma-mit DÛ.A.BI  ša  LÚ DUMU  DINGIR- šú is-ba-tu (2) ú-pa-áš-šar maš-maš DINGIR.MEŠ dAsal-lú-hi  (continúa el texto …)  (109) ma-mit dI-(gi-gi).MEŠ (texto perdido…) (110) ma-mit  dA-nun-na-ki. MEŠ DINGIR.MEŠ (111) ma-mit DINGIR.MEŠ  muš-si-ti » Pasaje III tablilla de Šurpu. Series babilónico-kassita (1595-1157 a.c.)

« (1) Los efectos de las palabras de éste hombre (el hechicero…), hijo de dios, (2) De Asalluhi, el exorcista de los dioses, están por debajo  (…) (109) De la palabra de los Igigi (…) (110) De la palabra de los Anunnaki, los grandes dioses, (111) De la palabra de los dioses de la noche ».

Resulta paradójico, en un primer vistazo a ambos textos, que en los textos Shurpu kassitas, textos exorcistas íntimamente relacionado con los sacerdotes de alto rango babilónico, los «asipu», los anunnaki, si mantengan un rango de «Grandes Dioses»  y que resulta antagónico con lo antes propuesto . Vamos a tratar de explicarlo:

Una de las consideraciones mas habituales en las que se suele caer, a la hora de considerar la generalidad en los cultos mesopotámicos, es percibir una única vertiente de liturgias y tradiciones  sumerio-acadias y pretender sostenerlas exclusivamente sobre la evolución de las creencias babilónicas y dejar de lado, si bien éstas son paralelas y convergentes, panteones o estructuras como la asiria,  e incluso elamita o  merita. Así por ejemplo, en el primer texto aportado neo-asirio, la vinculación que se  da a Marduk,  al que se nos relata como «dentro del Sol» (VA 08917, 40) y nos dice: « Meslamtea es Marduk, quien se eleva y desciende del «Inframundo», porque Assur le confinó dentro de un agujero y abre su puerta » o según la denominación para el dios en el texto: «dAMAR-UTU» – o «Joven Toro del Sol». Siendo Utu el dios Sol de las creencias y escritos sumerios -, y de cuyas tablillas se presenta como propietario, Kisir-Assur, el exorcista del templo de Assur.  Por otro lado existe la evidencia de la existencia de una «reforma religiosa» con la llegada al poder de la dinastía amorrita del rey Hammurabi, 1792-1750 a.c.,  en la Alta Mesopotamia, junto con el incremento de la importancia de la ciudad de Babilonia, así como del conjunto templario de Esagila  donde Marduk, como dios hasta ese momento patronal, es encumbrado dentro  del panteón general sumerio-acadio y donde, igualmente, se percibe la decadencia  de  dioses como En-lil.  Estos acontecimientos tienen como desenlace un giro en la percepción teológica que conlleva una reestructuración del panteón mesopotámico y que queda reflejado en el conocido texto del «Enuma-Elish».

« (39) dMarduk šarru ilani ú-za∂ -iz (40) dA.nun.na.ki gim-ra-sut-nu e-liš u šap-liš (41) ú-ad-di a-na da-nim te-re-tuš na-sa-ru (42) 300 (5 UŠ) ina šamê[e] úkin ma-sar-tu (43) uš-taš-ni-ma al-ka-kát ersetim [tim] ú-as-sir (44) i-na šamê [e] ú ersetim[tim] 600 (DIŠ.U) uš-te-šib » Pasaje tablilla VI del «Enuma Elish».  primer milenio a.c. sobre textos del siglo XII a.c.  II dinastía de Isin.

«(39) Marduk, el rey, dividió a los dioses, (40) a todos los Anunnaki, entre arriba y abajo (41) El designó a Anu para proteger su mandato, el envió a 300 a los cielos como retén (42) e  hizo una segunda parte,  y pusola sobre la Tierra (43) (Así) en el Cielo y en la Tierra, a 600 el ubicó. »

Aunque, si bien, en la misma tablilla VI de «Enuma Elish» no dicta: «(69) 300 (5 UŠ) dI.gì-gì šá ša-ma-mi u 600 (DIŠ.U) šá apsî kali-šú-nu pah-ru» que traducido viene a decir: « 300 Igigi del Cielo y 600  del Apsu, todo ellos, fueron convocados »

Aunque ambos textos, en su trasfondo, nos dirijan hacia una lucha por el «poder celestial» – Según J.M. Blázquez, en referencia al Enuma Elish, nos dibuja una lucha entre los «antiguos dioses»y los «jóvenes dioses» – se pueden apreciar dos finales diferentes: Por un lado,  en el caso asirio y Assur, se trata de un «episodio de rebelión» que queda sofocado, siendo los rebeldes condenados al «inframundo» – En algunos textos aparecen como «shairsitim», «Los del mundo subterráneo» o  como «los jueces de los difuntos» – . En el caso babilónico y de Marduk, y siguiendo las opiniones de J.M. Blázquez, se trata de un derrocamiento en toda regla. Se  da la particularidad que en el bando de los «antiguos dioses» sólo sufren castigo  Tiamat , que es divida en dos partes a partir de la cuales se crea el Cielo y la Tierra – Como nota curiosa decir que el hecho de dividir en dos mitades a  un ente en sacrificio forma parte de los «rituales de juramento» en pactos entre entidades semitas enfrentadas,  apareciendo incluso en  diversos pasajes de la Biblia -, y el dios Kingu/Lamga, lugarteniente de la diosa Tiamat,  que es sacrificado  – Según la mitología mesopotámica,  de los restos de Kingu se creó al hombre, siendo la porción que cada hombre posee del dios inmolado su «espíritu inmortal» o «Ekimmu». Espíritu que a su muerte  habitará en el Kur o «Mas Allá»-,  mientras que el resto de los dioses involucrados son perdonados y reubicados.

Siguiendo con J.M. Blázquez, y ya en referencia a los «anunnaki», determina el origen del término  en las antiguas «teogonías cósmicas» sumerias de Nippur –  las teogonías cósmicas presentaban la necesidad de un elemento masculino y otro femenino. En Nippur,  de los dioses Anu y Antu  nace  el dios En-lil , que junto a En-lil,  y como padre de los dioses, engendra al resto -. Término éste  que representa un «todo» o  el concepto de la «deidad» como conjunto. (J.Black, 1999), siendo otras representaciones escritas acadias: » da.nun.na.ku»,» de.nun.na.ku»,  o » da.nun.na(ke4.ne)». Por otro lado tenemos otra acepción,  «Anunna»o «da.nun.na» que no aparece en los textos anteriores y cuyo significado, según nos dictan los estudiosos,  resulta sinónimo de anunnaki. Dicho esto, y desde mi punto de vista,  estas nomenclaturas suelen aparecer en contextos sumerios relacionados con el dios Enki, como  heredero de En-lil, en la ciudad de Eridu y con lo que  N. Kramer define como  la «Épica Sumeria» . – Enki, en el poema «Enki y el Orden del Mundo», se titula como «Señor de todos los Anunna» o bien como «den-ki en ḫe2-ĝal2-la da.nun.na-ke4-ne», «El Señor de multitud de Anunnaki», y de ésta guisa los dioses así  son citados en»El viaje de Enki a Nibru» (ETCSL 1.1.3)  –  y que podría dirigirnos a considerar, en su origen etimológico, una primera relación con las «Teogonías de Eridu»cuyos dioses poseían un carácter dual masculino-femenino . Una posible corroboración de los anterior vendría de la mano de  los «Himnos de Drehem» – Antigua Puzrih-Dagan, III dinastía de Ur,  ciudad  fundada entre el 2094-2047 a.c. -,  donde aparecen como «un todo» o como los «Cincuenta dioses de Eridu», «da.nun.na-eriduki nin.nu.bi»,  y que, tal vez, les conectaría con los «Inim», los dioses poseedores de los creadores «me»– Los «me»son la esencia de la creación de todo lo que existe en el mundo  y define a los dioses de carácter ctónico –,  unos  antiguos dioses principales, que en número de cincuenta, componían el panteón sumerio. Dicho esto, lo que parece evidente es que tanto unos como otros son el reflejo de la significación universal del «hecho divino» e inequívocamente, tanto anunna como anunnaki, son términos , que si bien «zarandeados» tanto por escribas como  por las diversas teogonías surgidas en el tiempo en Mesopotamia a lo largo de tres mil años,  vienen a reseñar lo mismo.

Otro concepto en similares derroteros es Igigi,  «Í.gì.gì», «Igigû» en acadio ó como hemos visto  plasmado anteriormente en escritura cifrada, como «d5.1.1″– Según J. Black, también aparecen representados como «ú-sa8» en contraposición a los annunaki que aparecen como  «d9″ o «[i] lim9» (MSL  XVII, 197) – y que autores como Hrozny interpretan como una variante semita para obviar representar el número siete por ser «tabú» (¿?) , aunque posiblemente sea debido al uso  de la base sexagesimal como términos nominativos, si bien está nomenclatura cifrada de los Igigi incluso llegó  a ser incluso  «d5″. En un contexto amorrito-babilónico, los Igigi,  aparecen como los «Grandes Príncipes»  o los «Diez Dioses Principales», donde, parece ser, fueron introducidos como concepto divino. Aunque con el siguiente texto afrontamos nuevas dudas:

«(1) Cuando los dioses hacían de hombres, del trabajo, ellos llevaban la carga. Dioses, «La carga era demasiado pesada». Las labores muy duras, los inconvenientes muchos. Los grandes Anunnaki hicieron a los Igigi, llevar las tareas de siete »  Pasaje de la «Epopeya de Atrahasis». (BM-78941-78943) Tablilla I. versión del Siglo XVII a.c. Sippar.

Siguiendo el relato  de la «‘Epica de Atrahasis, nos encontramos una situación ya conocida en  anteriores apuntes: Un revuelta por parte de los dioses, en éste caso de los igigi, ¿Os suena..?,  que lleva a considerar la creación del hombre, si bien es cierto que en la «Épica de Atrahasis» es el dios «Gesthu-e»  quien es inmolado  y la humanidad es creada mediante el parto de la «Diosa Madre»o «Belet-ili» –

«(25) El trigo abrió la boca y dijo (26) nombrando a Nisaba como «diosa del inframundo»: (27) Nisaba, ¿Porqué tu creces sobre la tierra..?(28) Tú has traído la disesión entre las plantas. (29) Tu has engendrado conflictos y (con tu comportamiento) has invocado a los demonios. (30)Tu hablas mentiras y las sostienes (31) Tú has traído la disputa entre Igigi y Anunnaki. » Pasaje de la fábula «Nisaba y el trigo». Periodo neo-asirio. Siglo VII a.c. Sultantepe.

Según las narraciones aportadas, nada para ser estar, evidentemente.., aclarado  y pueden  continuar preguntas como: ¿Quienes eran en definitiva  los Anunnaki (o Anunna e  Igigi..) y que papel tuvieron en el desarrollo de  la teogonía mesopotámica..?  ¿Cual era en definitiva su número y que implicaciones tenía..? ¿Cual es su origen dentro de las diferentes teogonías..? ¿Quienes eran los dioses residentes del Cielo Superior, del Cielo Medio, del Apsu o del «inframundo»,..?  y por último  ¿Que versión de la creación es la mas  fidedigna: El «Enuma-Elish», la de KAR 307, o las múltiples existentes de carácter sumerio-acadio, caso del «Génesis de Dunnu»..?

Para estas contestaciones Zecharia Sitchin  y sus seguidores nos dan una iluminada contestación: «Se trata de seres extraterrestres de apariencia reptiloide procedentes del planeta Nibiru. Planeta cuya órbita, dentro del Sistema Solar, le acerca a la Tierra cada 2500 años»

Yo, más mundano,  me atrevería a pensar que se trata de la evolución, durante milenios, de varias teogonías ctónicas y cósmicas repartidas por Mesopotamia, con un posible origen sumerio, que se entremezclaron con otras de carácter astral culturalmente semíticas, en un desarrollo sincrético que posteriormente  siguió evolucionando. Ésta evolución, así como la anterior,  incluyó  un proceso de sustitución, asimilación y adopción de multitud de dioses, así como de conceptos,  en función de un crisol de culturas, que posteriormente se cristalizaron en unos principales  panteones que fueron el  asirio, el babilónico y donde podríamos incluir otros ya mencionados.

Cito por último a  J.M. Blazquez en «Mitos de la Creación Mesopotámica»:

« Como puntualiza J. Bottéro, el Poema  no fue para su autores ni para aquellos que lo usaban, ni un libro santo,  ni una autoridad religiosa, ni una doctrina verdadera, conceptos alejados de una religión popular, como era la de Mesopotamia. Baste recordar que después de su redacción, aunque el clero de Babilonia había conseguido elevar a Marduk, este dios nunca reemplazó a Enlil y jamás formó parte de la antigua triada compuesta por Anu, Enlil y Ea, que perdieron poco a poco la supremacía en el culto. Los devotos se encomendaban más bien a Marduk ó a las deidades astrales como Ishtar y, principalmente, Shamash, dios solar. La denominación Poema babilónico de la Creación ó Enuma Elish es impropia, pues su finalidad no fue de ningún modo el tratamiento teogónico, cosmogónico y antropogónico..»

Temas relacionados:

«Cilindro-sello VA 243«, La»Estela de Naram-Sin«,  La»Copa de Gudea»

Referencias y textos:

«Mesopotamian Cosmic Geography» Wayne Horowitz (1998)

«A concise dictionary of Akkadian» J.A.Black. A George & N. Postgate (2007)

«Šurpu, a collection of sumerian and akkadian incantations» Erica Reiner (1958)

www. etcs.orinst.ox.ac.uk

Imágenes:

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Series Shurpu. Serie babilónico-kassita.Tablilla II (de los pecados y los dioses).

Enlazada con el cuerpo central de las invocaciones, tablilla I,  para la conjuración de posesiones demoníacas en la religión mesopotámica, la tablilla II  de las series Šurpu, puede ser dividida en tres partes: Una primera donde se identifica al poseso y se hace dictado, como pecador confeso, de una relación de faltas que el individuo haya podido realizar – recordar que éstas series están vinculadas, a diferencia de las «Udug-hul» y las «Maqlu», a supuestos sacrilegios contra los dioses – y que reconoce  que pueda haber cometido contra lo humano para luego afirmar su desconocimiento de hechos sacrílegos ó vinculados con los dioses – recordar que las violaciones ante los dioses pueden tener  también características hacia lo humano protegido por el «dios hechizador» – , jurando tanto por sus dioses personales, como por los de sus allegados,  así como por los de los señores y dioses patronales de su ciudad. En un segundo término el oficiante inscribe la posibilidad que haya sido presa de artes por parte de los «kassatu» ó «kassaptu», brujos y hechiceras, ó bien que haya sido por propia voluntad – voluntad de la cual se arrepiente –,  haciendo una relación de los sortilegios que sobre acontecimientos, posesiones, y útiles de habitual manejo pueden ser vía de acceso para posteriores posesiones demoníacas.  Por último hace una relación de los principales dioses que tanto pueden ayudar a la exorcización, como por ser ruego a la deidad causante de enviar al demonio,  a la cual se pide indulgencia.

ó (1) [Conjuro,  para deshacerlo], grandes dioses, (2) [dios y] diosa,  señores del perdón. (3) [NN,  el hijo de] NN, cuyo dios es NN, cuya diosa es NN (4) [Quién está…] enfermo, en peligro (de muerte), afligido, atribulado. (5) El que ha comido lo que es im[puro] para su dios, que ha comido lo que es impuro para su diosa. (6) El que dijo «no» por «si», quien dijo «si» por «no», (7) que puso el dedo (acusatorio) [en las espaldas de]  su [acólito], (8) [que calumniador],   comentó lo que no está permitido decir, (9) [que….(…)] infama, (10) [que….(…)]…deshonestamente, (11) [que repudió  a su dios], que despreció su diosa. (12) [El que…(…)], habló de prácticas demoníacas,(13) [que….], habló (sobre) temas prohibidos, (14) [que como cizañero], causó desgraciados sucesos  como para ser contados, (15) que juró en vano, (16) que está siempre presente [….(…)….], (17) [que dice […], [que] siempre habla exageraciones, (18) [quien…], se ha aprovechado de la debilidad femenina, (19) que [a….una mujer] ha hecho abandonar su ciudad, (20) que enfrentó a hijo [contra padre], (21) el que enfrentó a padre contra hijo,  (22) el que enfrentó a hija con madre, (23) el que enfrentó a madre con hija, (24) que enfrentó a nuera con  suegra, (25) el que enfrentó a suegra con nuera, (26) que enfrentó a hermano contra hermano, (27) que enfrentó a amigo/a contra amiga/o, (28) que enfrentó a compañero/a contra compañera/o, (29) quien no liberó a un cautivo, quien no redimió a un hombre de su contrato (de esclavo), (30)  el que no permitió a un prisionero ver la luz (del día), (31) el que dijo a un cautivo: «Permanece en cautiverio»,(y) al hombre con contrato (de esclavo):  «Mantengo  (sus  condiciones) férreas». (32) El desconoce el crimen contra  dios,  desconoce el pecado contra la diosa. (33) por el que repudió al dios, por el  que despreció a la diosa, (34) sus pecados son contra su dios, sus crímenes son contra su diosa. (35) El está lleno de desprecio hacia su padre, lleno de odio hacia su hermano mayor. (36) Despreció a sus parientes, ofendió a su hermana mayor, (37) Entregó en medida pequeña y recibió en medida grande, (38) El afirmó: «Hay», cuando no había,  (39) el afirmó: «No hay», cuando había. (40) H[abló] de temas indebidos, habló de cuestiones indecentes. (41) El habló con palabras insolentes, [ha]bló [….] (42) El us[ó] una contabilidad amañada, (y) [no us]ó  [la contabilidad legal], (43) asentó ingresos que no iban dirigidos a él (y) no asentó ingresos que iban dirigidos a él. (44) El que despojó  al hijo legítimo,  [no dando cur]so a los derechos del hijo legítimo. (45) El  que colocó un falso «kudurru» (y) no levantó el [verdade]ro «kudurru», (46)  el que removió marcas, fronteras y «kudurreti». (47) El que entró en casa de su vecino,  tuvo relaciones con la mujer de su vecino, derramó la sangre de su vecino,  (50) vistiéndose con los ropajes  de  su vecino. (51) Que no vistió a un hombre joven cuando iba desnudo. (52) El que apartó a un prometedor joven de su familia, (53) empujado a torvo clan, (54) usado  en  espera para el (….) (55) Su boca es honesta, su corazón es falso, (56) su boca dice «si», su corazón dice «no»,(57) en cualquier situación el pronuncia falsas palabras.(58) El que (….), se estremece y tiembla (de rabia), (59)  el que destroza, rechaza y lanza al viento (¿?) (60) acusado y convicto,  de provocar rumores, (61) equívocos, robos e incitaciones al robo, (62) manipulando para endemoniar, (63) su boca es (….) mentira, sus labios desorden y violencia. (64) El que tiene conocimiento de temas deshonestos, que ha aprendido saberes prohibidos. (65) El que ha conseguido su posición de los débiles, (66) traspasó los límites de lo justo,(67)  cometió actos indecentes, (68)  utilizó sus manos para hechizar y practicar la brujería. (69) Porque de los alimentos prohibidos ha comido, (70) porque muchos pecados cometió, (71) porque al consejo dividió, (72) porque  la voluntad unitaria del colectivo socavó, (73) porque en general renegó  del dios y  la diosa, (74) porque prometió de palabra y obra, pero no lo hizo, (75) omitió el nombre de su dios en su ofrenda de incienso, (76) en la purificación,  (por ello) desvirtuada e invalidada, (77) (….) apartó cosas (para el dios, pero) se las comió, (78)  para después,  de forma irrespetuosa,  comenzar a rezar. (79) arruinó la ofrenda que había sido preparada (80) haciendo pasar hambre a su dios y a su diosa con ello, (81) permaneció en pie en las asambleas para decir cosas impropias.

Cara frontal de un amuleto neo-asirio contra demonios Lamaštu.Siglo X a.c. Istanbul Archeology Museum. Photo by wodolot.wordpress

(82) Deshaced (el conjuro), porque ha jurado que de tales hechos el era inconsciente, (83) ha jurado que el tomó (alguna cosa) después, (84)  el ha jurado que ocultó alguna cosa después, (85)  ha jurado sobre la severa falta que cometió, (86) ha jurado en el caso de asesinato, (87)  ha dirigido sus dedos (su plegaria) hacia una deidad protectora (en el texto babilónico hace referencia a un «lama.šu.si» ó «espíritu lamašu«, (88) ha jurado por la deidad protectora de (su) padre y de (su) madre, (89)  ha jurado por la deidad protectora de (su) hermano y hermana mayor, (90) ha jurado por la deidad protectora de (su) amigo/a y compañera/o, (91) ha jurado por la deidad protectora de (su) dios y rey, (92)  ha jurado por la deidad protectora de (su) Señor y Señora; (93) pisoteó sobre la sangre (ofrenda) (94) usó la misma cuando ya estaba ofrecida, (95)  comió lo que era impuro en su ciudad, (96)  reveló (al extranjero) los asuntos de su ciudad, (97) dió mala reputación a su ciudad.

(98) El fue puesto en contacto con un hechicero, (99) un hechicero fue puesto en contacto con él, (100) durmió en la cama de un hechicero, (101)  se sentó en la silla de un hechicero, (102) comió en la mesa de un hechicero, (103) bebió de la copa de un hechicero. (104) Ha preguntado, ha preguntado; (105)  ha preguntado por rituales de cama, (106)  ha preguntado por rituales de silla, (107) ha preguntado por rituales para la mesa, (108)  ha preguntado por ritos para bebedizos, (109) ha preguntado por rituales para la luz del candil, (110) ha preguntado por rituales para antorchas,( 111) ha preguntado por rituales para fuelles, (112) ha preguntado por ritos para tablillas y cinceles, (113) ha preguntado para rituales «sûtu» y para  rituales»qa»,(114) ha preguntado por ritos para establos, (115) ha preguntado por ritos para animales (domésticos), (116) ha preguntado por ritos para acequias, (117) ha preguntado por ritos para lo bueno, (118) ha preguntado por ritos para el río, (119) ha preguntado por ritos para la barca, el barco, la balsa, (120) ha preguntado por ritos para el «sol naciente» y para la «puesta del sol» (En el texto habla del dios Utu-ši, «si-it Utu-ši» y «e-rib Utu-ši»), (121) ha preguntado por rituales para los dioses y diosas de Anu, los santuarios de la tierra, (122) ha preguntado por los rituales en los santuarios del Señor y la Señora, (123) ha preguntado por los rituales de abandonar la ciudad y por rituales de entrar en la ciudad, (124)  preguntó por los rituales de entrada por la puerta de la ciudad y por ritos para salir por la puerta de la ciudad (125) ha preguntado por los rituales de entrada en la casa y por rituales de salida de la casa, (126) ha preguntado por rituales de estar en la calle, (127) ha preguntado por rituales en el templo, (128) ha preguntado por rituales para el(andar del)  camino.

(129) Deshazlo, o Šamaš, tu que juz[gas], (130) deshazlo (encantamiento), Šamaš, Señor de las alturas y las profundidades [….], (131) tu eres el único (dios) que administra justicia a los dioses, tu eres el rey de todos los países, (132) con tu mandato la justicia queda dictada, (133) ¡Que justicia habría en su tierra con anterioridad a ti! (134) Deshazlo, «rim-nu-u» (exorcista) de los dioses, misericordioso dios, Amar-ud  (Marduk), (135) Deshazlo, dios regente de nuestro templo, expulsalo, dios regente [….], (136) Deshazlo, dios de los pecadores, (137) Deshazlo, dios U.gur (Nergal), señor de la absolución, (138) deshacedlo dioses Šuqamuna y Šimaliya, (139) Deshacedlo, grandes dioses y diosas, tantas veces como haya sido invocado (el demonio), (140) Deshazlo, «Ki.ne», ¡Hijo de E[a]!, (141) (porque) deshacerlo pueden el Señor y la Señora, (142) deshacerlo pueden Anu y Antu, (143) deshacerlo puede En-lil, rey, creador de todas las cosas, (144) deshacerlo puede Ninlil, reina del Ekiûr, (145) deshacerlo puede el Ekiûr, la vivienda de la Esposa, (146) deshacerlo puede Enki, deshacerlo puede la diosa Ninki, (147) deshacerlo puede el dios En-shar, deshacerlo puede la diosa Ninshar, (148) deshacerlo puede Ea, rey del Apzû, (149) deshacerlo puede el Apzû, la casa de la sabiduría, (150) deshacerlo puede Eridu, deshacerlo puede Ešapšu, (151) deshacerlo puede Amar-ud, rey de los Igigi, (152) deshacerlo puede la diosa Saparnitum, Señora del Esagil, (153) deshacerlo pueden el Esagil y Ka.dingir.ra (Babilonia), (154) residencia de los grandes dioses, (155) deshacerlo pueden el dios Pa u (Nabû) y Nanâ en Ezida, (156) deshacerlo puede la diosa Tasmetum, la gran nuera, (157) deshacerlo pudiera el dios Dikud, el consejero de Esagil, (158) deshacerlo pudiera el dios Iqbidumqi, el que intercede (con) acertadas palabras,  (159) deshacerlo pudiera Bad.an.ki  y E.dim.gal.kalam.ma, (160) deshacerlo pudieran el dios Gal y  Deritum, (161) en Susa, pudieran Inšušinak (162) y Lahuratil deshacerlo, (163) pudieran Jabru, Humba[n](a), [Nap]rušu deshacerlo, (164) esos sublimes dioses,  (165) Pudieran desde los cuatro puntos cardinales del Sur, Norte, Este y Oeste,  (166) los siete «sibittu» volar sobre el, (167) deshaciendo su encantamiento. (168) Pudiera Ishtar deshacerlo en la  Uruk de los toisones, (169) pudiera Nineanna (Inanna, Reiner sugiere Belet-ajakki…) deshacerlo en el Eanna, sus aposentos, (170)  pudiera la diosa Annunitum  deshacerlo en Agade, la ciudad de sus de[licias], (171) pudiera [A]gade deshacerlo, [pudiera] Eul[mash deshacerlo],  (172) pudiera Išhara deshacerlo, la señora del hogar de la humanidad, (173) pudiera Šiduri deshacerlo, diosa de la sabiduría, (174) protectora de la vida, (175) pudiera Irra, Irra-gal, Irra-kal.kal, deshacerlo, (176) pudiera Laz, Haja, Luhušû deshacerlo, (177) pudieran Lugal.edin.na, Latarak, (178) Sharrahu deshacerlo, (179) pudiera el Guerrero Shamash (Sul Utu) , por mencionarle, deshacerlo, (180) pudieran Ti.bal, Sag.kud, Sag.uš (Kajamanû), (181) Immerija, deshacerlo, (182) pudieran Alioth (parte Osa Mayor), las Pleyades, Sirio, Marte, (183) la diosa Narudu deshacerlo, (184) pudiera Hendursanga, la estrella Sibzianna deshacerlo, (185) pudieran los dioses y diosas, tantos como han sido invocados, (186) desvincularlo  hoy a él, (187)  y de NN, hijo de NN, los pecados, (188) los errores, los crím[enes], (189) las [ofen]sas, encantamientos, (190) pueden ellos [elimin]ar, [pueden ellos ….], (191) olvidar, des[hac]er, (192) pudieran ellos expulsar su posesión. Final del formulario de encantamientos. —- (193) Encantamiento: «El efecto de cualquier encantamiento sobre este hombre, hijo de su dios, ha terminado».  Segunda tabla de Šurpu.

Notas sobre el texto (línea):

(140) Ki.ne. (ó Kinunû) , en acadio «Garakku», «El brasero». Enser litúrgico que en ésta lectura aparece divinizado, aunque es más posible que se refiera a él como imprescindible objeto ceremonial, legado por Ea, para realizar las exorcizaciones.

(159) Bad.an.ki (ó Bad.gal.an.ki). Nombre de la ciudad fronteriza sumerio-elamita de  Dêr y que está localizada al Este del Tigris. E.dim.gal.kalam.ma. Templo del dios supremo en la ciudad elamita de Dûr. (Choga-Zanbil)

(160) Gal. (An-gal ó Untash-Gal ¿?) Deidad de elamita, posteriormente asimilada al dios Anu (W.G. Lamber, 1971). Deritum. (Ištaran) Deidad elamita, Señor de la ciudad de Dêr. De similares facetas que Enshushinak.

(161) Inšušinak. (ó Enshushinak) Se traduce como «Señor de Susa». Dios supremo  de la ciudad elamita, Su templo era el E.dim.kalam.ma. Es asimilable con el dios Dumuzi/Dumu de Bad-Tibira e Isin ó con Ninghiszida de Gishbanda en su faceta de dios representante del «ciclo vital de la Naturaleza.

(162) Lahuratil. ( ó Ruhuratir). Posiblemente un epónimo de Enshushinak ó Ishtaran (J. Hastings, 2003). Está relacionado con los poderes del agua. ( R. D. Woodard, 2008)

(163) Jabru. (Yabnu) Dios del panteón elamita comparable al Anu sumerio.  Se da la circunstancia que  el término «Jabru» ó «Gabru»  se identifica con el Gabriel (arcángel). (M. Riyãz, 2000). Humban(a). Dios del panteón elamita comparable al iranio Ahura-Mazda ( W. Hinz, 1948), tenía su lugar de adoración y trono en el monte «Zila-Humban», la «Estela de Humban». Naprušu. Dios elamita, espíritu protector, guardián de los cuerpos de los difuntos, (SAA, 3,32, 25)  comparable al Anubis egipcio.

(166) «Sibittu». (Sebittu)  Espíritu protector asirio contra las enfermedades  y posesiones demoníacas de los ritos «bit-meseri» y «bit-ameli» (ver apkallu).

Referencias:

«Šurpu, a collection of sumerian and akkadian incantations» Erica Reiner (1958)

«A concise dictionary of Akkadian»  J. A. Black,  A. George & N. Postgate (2007)


Series Shurpu: Serie babilónico-kassita. Tablilla I

Este tipo de escritos señalan las invocaciones y lecturas mágicas que los sacerdotes, «asipu», mesopotámicos debían de realizar para expulsar, cuando los conocimientos empíricos fallaban, los demonios y maleficios causantes de la aflicción del poseído. Estos ritos  podían también formar parte de los procedimientos propiamente médicos  como «ritos asépticos». A continuación se expone la primera tablilla de una serie de nueve que se suponen recopiladas durante la dinastía kassita de Babilonia sobre, seguramente, textos anteriores sumerios y acadios.

Tablilla neo-babilónica con círculos concéntricos (CBS 01766) University Museum, Philadelphia.

«(1) Cuando dispongas los rituales para las Ŝurpu, tu deberás de preparar un brasero. (2) Pondrás un  «nap-pa»  de un extremo al otro del brasero, (3) (y) lo rodearás con un circulo mágico hecho de harina. (4) Recitarás el conjuro “Yo soy un hombre puro” esparciendo  (a tu alrededor)  agua; (5) Enciende una antorcha con un mechero de sulfuro; «Bil.gi,  sabio, adorado en el país, (6) río que te renuevas constantemente» cuando purifiques al paciente, recitarás. (7) Colocarás la (…) antorcha en la mano del paciente que prenderá el brasero. (8)  (Recitarás el) conjuro: «¡Yo tomo la antorcha,  para exorcizar al demonio!»(9) (Después de tí) harás pronunciar al paciente el conjuro: «¡Será exorcizado, grandes dioses!» (10) (y) para sí, el «lu-išib», recitará el conjuro: «¡Así sea!». El paciente vertirá (…) harina. (11) El «lu-išib» le exorcizará con el (…) harina y lo lanzará contra el fuego. (12) La oración: «Pedimos a Anu y Antu  suspender y proteger del padecimiento» (tu recitarás). (13) Esparce agua sobre el paciente. Una cebolla, un rosario de cuentas (¿?), un trozo de esterilla (¿?), un vellón de lana y un mechón rojo de pelo de cabra tu sostendrás en tus manos, (15) para pasar  sobre el paciente. (16) Recita el conjuro: «Una diabólica maldición  en forma  de Gal5.lá.gin8, yo expulsaré.» (17) Harás pronunciar al (paciente) [lo mismo y depositarás], entonces los objetos del exorcista entre las manos del paciente. (18)  Pelará entonces la cebolla y la lanzará al fuego (19)  arrancará las cuentas del rosario  (¿?) y las echará al fuego (20) Deshará la esterilla (¿?) y hará lo mismo, tomará hilos de la lana y hará lo mismo, (21) tomará el mechón de pelo y hará lo mismo, tomará el pelaje  rojo y lo mismo hará. (22) El paciente cogerá un puñado [de grano] (…), (23) (…)  que se pasará  sobre si mismo y que arrojará al fuego.(24) (…) [El conjuro:] «¡ Somete, oh poderoso Giš-bar! » (25) (…)

( A partir de aquí,  la tablilla está perdida…)

Alternativa I (6′) [Conjuro: «¡Así sea!»] (7′) [Segunda tablilla de] Šurpu. (8′) [Conjuro: «Toma)] la antorcha». (9′) [Conjuro: «Como] ésta cebolla» (10′) [Conjuro: «Como] éstas cuentas» (¿?). (11′) [Conjuro:] «Como (éstos)  retales» (12′) [Conjuro:] «Como (éstos) hilos de lana». (13′) [Conjuro:] «Como (éstos) mechones de pelo» (14′) [Conjuro:] «Como (éste) vellón rojo» (15′) [Conjuro: «Como (éste) puñado de] grano de (…) (16′)  Conjuro: «Yo soy un gam-ma-ha-ku-ma».

Alternativa II (2′) [Conjuro:] «¡Somete, oh Giš.bar!» (3′) [Conjuro:] «Expulsa por nariz y boca» (4′) Conjuro: «Tu, desviación (del camino recto)» (¿?) (5′) Conjuro: «Tú, ser hechizado quien le  ha tocado» (6′) Conjuro: «Hechizada, hija de Anu» (7′) Conjuro: » Tú indeseable» (8′) Conjuro: «Tu tamarisco» (9′) «Yo te he aplastado, (y) te expulso» (10′) «Dis  [lo dijo], Dis ip-šur lo desdijo» (11′) Tercera tablilla de Šurpu.  (12′) Conjuro: «Una diabólica maldición en forma de Gal5.lá.gin8» (13′) Conjuro: «Río» (14′) Conjuro: «Bil.gi ap-kal». Cuarta tablilla de Šurpu (15′) Conjuro: «Solitario tamarisco [que crece] en el Cielo» (16′) Conjuro: «Tomo mis curvadas mazas, en el final» (17′) Sexta tablilla de Šurpu (18′) El conjuro: » Mi dios,  yo sé que  no (recitarás) lo próximo. (19′) Tablilla de Nabu-ètirani.

Sobre el texto:

Es de notar que las primeras apreciaciones al leer el texto nos direccionan a posesiones demoníacas en que el paciente es consciente y reniega de la posesión diabólica. Siendo como son los rituales Šurpu ceremonias de «cremación» y como tal ésta es el significado de su traducción literal, se hace imprescindible, y así figura en los momentos preparatorios, la presencia del fuego. Fuego que es representado por un brasero que  debe ser «protegido» de cualquier «influencia exterior» mediante su internación en un «círculo mágico» , Círculo que será dibujado mediante la utilización de harina, y que será encendido mediante un útil de madera tallada» o  «nap-pa» junto con  un «detonante» basado en un compuesto sulfúrico – este tipo de «cerillas» ya eran conocidas, por ejemplo, en Egipto hacia el año 3500 a.c. -. Con anterioridad al encendido el brasero por parte del paciente,  como signo de su voluntad de atajar el mal , se procede por parte del sacerdote u «Hombre Puro» que realiza la ceremonia a la purificación del paciente mediante agua que será bendecida mediante un nuevo conjuro . En éste imprescindible ritual, se nombra a  un ente denominado «Bil-gi» y que literalmente significa «El que quema el suelo». Se supone que Bil-gi o  su epónimo «Gi.bil», el «Herrero»,  sea tal vez el dios Buriash kassita o su sinónimo amorreo el dios Haddad,  adaptados al contexto, si bien aquí, posiblemente,  tenga connotaciones epónimas con el  mismo dios sumerio-acadio Ea/En-ki como «Padre» y «Señor de la Sabiduría» . – Aquí había que tener en cuenta a la hora de interpretar los actores del texto,  la asimilación de los distintos dioses sinónimos en función de las diferentes dinastías soberanas semitas, a lo largo del tiempo,  en Babilonia y Mesopotamia y la propia antigüedad implícita de los textos –   e incluso una connotación asiria, y  así aparece como alternativa en la tablilla II de Shurpu con el denominativo de «Gi.bil ap.kal» o «apkallu Gibil».

El «lu-išib» o exorcista tomará entonces una serie de objetos que representan, según mi criterio,  actos y  objetos  cotidianos tales como la comida, representado por la cebolla; la alcoba representada por la esterilla o cama; las posesiones agropecuarias, representadas la  oveja, cabra; y en algunos casos, los sirvientes  y/o esclavos. Desde el punto de vista de las creencias mesopotámicas tales enseres, animales o personas  se consideraban «puertas» por donde los demonios podrían  acceder  al poseído, consistiendo el ritual de «reconocimiento del demonio» en acercarlos a él  para que el mal se identifique ante sus reacciones. De ésta manera, al sentir  la presencia del paciente, el ente culpable de la posesión se encarnaría en  alguno de los objetos. – Sobre ésta «reencarnación del demonio»  ver los «ritos de sustitución» semítico-anatólicos -. Objeto que será, posteriormente de exorcizar el mal, arrojado al fuego purificador.

Estos males o enfermedades son consecuencia, y según el criterio mesopotámico,  de las posesiones de demonios denominados «Gallû»o como aparece en el texto original: «Gal5.lá.gin8». Según las generales creencias mesopotámicas éste tipo de  demonios son los  provocadores de cataclismos y enfermedades y por ésta guisa, fueron los acompañantes de Inanna y Dumuzi en su periplo por  los infiernos.

Terminando con el conjuro de exhortación a «Giš-bar» o «Giš-bar-ra», el «Fuego Divino».  Controvertido término éste  que lo enlaza con el sumerio Gubarra (Sayce ,1890) o con un epónimo de la diosa Šala , la parera del  dios Haddad/Haddu semita noroccidental o del Dagan merita y eblaíta, aunque aquí, y según mi criterio, podemos considerarlo como un epónimo de Gibil y por tanto de Ea.

En la alternativa I del texto,  aparece la referencia a continuar el exorcismo siguiendo la  II tablilla segunda de Shurpudonde se hace referencia, como veremos mas adelante, a la relación de posibles pecados que el paciente ha podido cometer. Así podríamos intuir que  la tablilla I  de los textos funcionaría como el «cuerpo principal» del ritual, ritual que se complementaría, en función del exorcismo,  con llamadas al resto de la tablillas de la serie. Por otro lado, en este grupo de  líneas,  se hace referencia al exorcista como «gam-ma-ha-ku-ma» , un término acadio para  el «sacerdote-purificador» o exorcista.

En la alternativa II del texto, línea (5′) habla de «ser hechizado» «juramentado». Es conocido que  las posesiones demoníacas, según la general tradición mesopotámica, eran fruto de sortilegios de hechiceros o brujas.  o bien consecuencia de invocaciones por parte de  determinado dios, zaherido, por los actos  del paciente con o sin conocimiento de éste de la falta cometida.  También aparece en ritual el epíteto del ente poseedor como «hija del dios Anu(m)» y donde debemos de considerar que algunos entes demoníacos figuraban en el panteón divino como descendientes del  dios supremo mesopotámico  . Hay en (8′) un conjuro que denomina al demonio con el término de «tamarisco». El tamarisco es una planta del género de las «Tamarix» que en Mesopotamia era consideraba como un arbusto perjudicial y dañino, ya que desecaba y salinizaba los terrenos. Por otro lado en las culturas semitas, el tamarisco, así como la encina y el terebinto,  son «árboles sagrados» como residencia de los espíritus (Frazer, 1941) . También aparece en la línea (10′ ) el término «Dis» y «Dis ip-šur» y que identificaremos con el dios Ea (Reiner, 1958)  y donde podemos identificar el párrafo como: «Ea lo permitió, Ea lo desautoriza» (la posesión demoníaca..)» -, así como alusiones para continuar la conjuración en las tablillas tercera, cuarta y sexta del ritual.

Es de notar el protagonismo principal del dios Ea o En.ki,  hijo de Anu, y «protector» interesado de los hombres, pues creó a los hombres, según algunas mitologías mesopotámicas,  para sustituir a sus Igigi, sus súbditos en el Apzu, el «Reino de las Aguas Profundas» , que hasta ese momento realizaban la labor de proveedores de los dioses,  así como «Señor de la Sabiduría»  y donde el concepto de «Sabiduría» incluye la totalidad de las artes humanas, incluida, por supuesto, la Medicina y la Magia. Protagonismo que acentúa la apreciación que se trata de escritos basados en referencias más antiguas, si bien éste último puede ser sostenido en el panteón amorrito-kassita , época neo-babilónica, por ser padre del dios babilónico y nacional, Marduk . Encumbramiento de éste dios solar que comenzó  durante el periodo amorrito-babilónico, si no antes, y cuyo concepto y adjetivos posiblemente sean extensibles a todos los panteones semitas.

Referencias textuales:

«Surpu, a collection of sumerian and akkadian incantations» Erica Reiner (1958)

Los desvaríos de Z. Sitchin: Cilindro-sello VA 243.

Cilindro-sello del periodo kassita. siglo XVI a.c. Comparativa de su tamaño

Perteneciente a la colección del Vorderasitische Museum de Berlín, y catalogada como VA 243, está pieza esta basada en una piedra de serpentina – Serpentinita, roca  de color verdoso en varios tonos formada a partir del metamorfismo de rocas magmáticas ultramáficas o periodotitas. Dureza 3/4 en escala de Mohs – , cortada de forma cilíndrica, y que tiene una longitud de veinte milímetros, así como un diámetro de treinta y cuatro. Comprada en 1885 por un coleccionista privado que aseguraba su orígenes a cincuenta kilómetros de la población de Kut en Irak,  fue tallada para su uso como cilindro-sello en la época acadia aprox.  entre el 2330-2150 a.c.

Los cilindros-sellos fueron profusamente utilizados en las civilizaciones de Oriente Medio a partir del VI milenio a.c. aprox., –  aunque se tiene conocimiento de sellos cerámicos o «sellos de estampación» en Mesopotamia,  correspondientes al periodo de El Obeid,  V y IV milenio a.c.,  su tallado cilíndrico se especula comenzara en el periodo de Uruk, 3750-3150 a.c., o bien  el de «Jemdet Nasr»,  año 3150-2900 a.c. – teniendo como uso primario las funciones de rúbrica para documentos administrativos, así como la identificación propietaria de mercancías e inmuebles y cuya utilización perduró hasta finales de periodo neo-asirio en el primer milenio. a.c. cuando unos nuevos modelos de «sellos de estampación» los sustituyeron. En paralelo a su utilización mesopotámica,  se conoce su uso tanto en Mari, Levante, en Ugarit, así como en la meseta iránia y en las civilizaciones del Valle del Indo, si bien su utilización fue sustituida en el II milenio por modelos de estampación, en el caso de Canaan por la influencia del sello egipcio,  «escarabajo sello»y en las dos segundas por el modelo de estampación hittita, un sello que perduró en su utilización en la península de Anatolia desde el periodo de Obeid. 

La tipología de estos sellos cilíndrico pueden ser divididos, en función de su propiedad, en tres tipos diferentes: «De identificación personal» o «de rúbrica», estatales u oficiales, y votivos o sellos templarios. En el caso de los identificatorios personales se tiene conocimiento  desde el periodo de Uruk III, de la no existencia de restricciones en su utilización. Cualquiera que pudiera pagarse su elaboración podía ser poseedor de unos de ellos – Se conocen sellos personales de mujeres, aunque en mucha menor proporción, así como que solían ser regalos por parte de parientes al futuro propietario -. Su perdida solía ser hecho de conmoción para el propietario y mal presagio, hasta el punto que se conservan textos, en Uruk III y en el periodo  pre-babilónico, de relaciones de propietarios, así como del año, mes y día de su creación y entrega al futuro dueño.

Los sellos oficiales y estatales, incluyendo los sellos personales de la realeza, como parece obvio,  tuvieron un uso más formal y restringido. Las más antiguas y raras piezas correspondientes a este subgrupo son sellos representativos de la  ciudad-estado  de Ur  y Jemdet Nasr, y cuyas tallas narran escenas pastoriles y simbólicas. Su uso primordial el cierre de tratados comerciales y políticos. Durante el II milenio, los sellos reales, se consideraban «incontestables» e «inimitables»; tal era así que se guardaban, al muerte del poseedor, en el tesoro de templo. De esta guisa, nos aparece en un texto neo-asirio, donde  el rey Senaquerib describe el hallazgo, cinco siglos mas tarde,  en el templo de Marduk del sello de Tukulti-Ninurta muerto en el 1208 a.c.

Los cilindros votivos tenían solían ser ofrendas que los reyes hacían a los dioses en el templo, eran considerados propiedad del santuario y mas exactamente del dios. Las representaciones de estos sellos iban enfocadas a propiciar la salud y la prosperidad del rey y su familia, siendo sus motivos ornamentales y de gran delicadeza, los denominados en acadio, «kunukketi», plural de «ku-nu-kku». Se tiene evidencia de la utilización de estos sellos para operaciones comerciales y transacciones vinculadas al dios de referencia, aunque la administración del  templo  tuviera su propia «rúbrica».

Cilindro-sello y su estampación. El motivo son animales fantásticos junto con signos micénico-chipriotas. Siglo XIV a.c, Chipre. Museé du Louvre.

Los «bur.gul» sumerios – «pur-ku-llu» en acadio – eran trabajados por unos artesanos de alto rango denominados «za-dim», vinculados al estamento palaciego,  que diseñaban y escogían las piedras a labrar. Piedras que podían,  en función de su diseño  y antigüedad creativa, estar perforadas longitudinalmente para poder ser colgadas en el cuello mediante una cadena u otro medio, aunque existen piezas sin perforación y sellos que incluyen un pasador en la parte superior del conjunto. El material del cilindro solía ser de piedra semi-preciosa u ornamental – lapislázuli, hematita, calcedonia, cornalina, pirofilita, la ya mencionada serpentina, etc – o  bien de composición cerámica, aunque tampoco se descarta la utilización de madera para su fabricación. Su método de empleo consistía en rodar la talla sobre una superficie húmeda que tuviera la propiedad de permitir la impresión de los motivos, y su conservación,  después de seca.

Pero volvamos a cilindro-sello VA 243.


En el caso de esta estampación, con en otras muchas, aparece un texto en acadio que nos comunica (izquierda a derecha y de  arriba  a bajo, según la escritura mesopotámica):

« Dub-si-ga| Ili-il-la-at |Ir-su |» ;  « Dursiga, «el hombre de armas», tu siervo » (en referencia a X divinidad…).

En principio,  por éste texto, podríamos suponer que el propietario era un guerrero. A primera vista , la parte escrita del sello  no nos proporciona más información, salvo que se trata de un «cilindro-sello de presentación», con motivos religiosos,  típico de la época acadia, y donde la «divinidad»,  que incluso pudiera ser un rey  o un regente aparece sentada en un trono junto con dos personajes (de derecha a izquierda…): Un «introductor», o «sum-ma»,  y el personaje que pide la audiencia – En este que caso es de notar que el audienciado tiene en su mano derecha, reclinado sobre el hombro al estilo representativo acadio, lo que parece ser el cetro de «cabeza de león» de Nergal,  en su vertiente como dios de la guerra o quien mantiene el «Orden en el Mundo»-. Adivinar con que tipo de divinidad estamos tratando resulta más complicado. En general, los cilindros-sello de época acadia no suelen revelar claramente los atributos divinos  a diferencia de las representaciones sumerias,  si bien podemos afirmar que se trata de un dios por los ropajes y el tocado,  al igual que el «maestro de ceremonias», y que su mano derecha se apoya en lo que parece ser un «arado».  Si esto fuera así, podría tratarse del dios Ningirsu, Ninurta,  o tal vez Ea/En-ki,  e  incluso el dios amorrita Amurru/Mar-tu, si en éste último tenemos en cuenta el «íbice de las montañas» que aparece a su derecha o el motivo serpenteante de detrás de su cabeza, o   bien En-lil, si le consideramos como «inventor», como así aparece en algunos textos, del arado.

Nos queda por dilucidar, entre otros, y es  aquí, exclusivamente, donde seguidores de Z. Sitchin,  tienen expuestas sus creencias: «El motivo  que aparece  entre el «recepcionado» y el «intercesor divino».  En principio se trata de la representación de una «estrella de seis puntas», o esferoide refulgente,  rodeada de once  esferoides y un último,  separado del resto, entre el intercesor y la divinidad.

Según la opinión de determinados asiriólogos y estudiosos, que se han dignado a darle vueltas a esta pieza, y que por si misma no tiene mayor interés que el de otras similares,  parece ser que se trata de un conjunto que representa «Las Pléyades» (Van Buren, 1941), «mu-mul» en idioma acadio,  – Las Pléyades son un conjunto de estrellas, observables a simple vista,  cercanas a la constelación de Tauro. y que resaltan, de siete a once de ellas,  por su luminosidad  – Aparecen también como motivo en otros cilindros-sellos mesopotámicos, de Oriente Medio y mediterráneos (Teisser,1984). Los diferentes puntos que representan a Las Pléyades. suponen una figuración representativa del conjunto de los grandes dioses y su consejo divino. Estos consejos sumerio-acadios estarán posteriormente  íntimamente relacionados, ya con la época acadia asentada,  con la soberanía divina del dios lunar Sin,  así como con los ciclos lunares. Su representación  en la imaginería sumeria anterior  tomaba un sentido del «Principio del Mundo» como acontecimiento causado por la decisión colegiada de los dioses al inicio de los tiempos.  El hecho que resalte un gran esferoide brillante en el centro  de las Pléyades no  debería tener otra explicación que la representación  del dios supremo Anu dentro del denominado «Lugar donde los Destinos son Establecidos», así como su presidencia y dignidad dentro del citado consejo.

Dicho esto, resulta razonable interpretar que uno de los puntos que se encuentra desplazado, y que aparece entre el «introductor» y el dios, pudiera ser la alegoría del mismo dios  objeto de la audiencia y que parece dejar el cónclave de los dioses  para atender el suplicatorio.

«Las palabras de Anu se establecen con firmeza, (y)  ningún dios podría oponerse a ellas. En el «Lugar donde los Destinos son Establecidos», los Anunna se congregan en torno a El. […]  (20) El ha hecho posible la manifestación de todos los «Me» Sagrados, los dioses del Cielo que se congregan en torno a El […]  (23) El ha implementado con perfección la Planificación Divina; los dioses de la Tierra [se congregan en torno a el] (Junto) con los augustos y nobles (¿?) …»  Pasaje del “Adab de Lipit-Ištar a Anu”, líneas 1 a 29. Siglo XXII-XXI a.c.

A esto se pueden añadir otras evidencias como:

  1. Los sumerios y acádios desconocían el hecho heliocéntrico del Sistema Solar. Según sus mitología,  Utu/ Shamash,  el dios-Sol recorría el Cielo de este a oeste de día, y por las noches volvía a situarse en el este atravesando el «Kur» – El reino de los muertos y espíritus -. ¡Se movía..!, Por tanto,  es imposible que  fuera representado como  eje de un supuesto sistema planetario de once planetas+ la Luna.
  2. Los acadios no conceptuaban mas que de  cinco a siete «entes astrales» divinos principales :  El Sol, Venus,  la Luna, y en un segundo plano,  Marte y Júpiter y tal vez los planetas Mercurio y Saturno.  Por tanto, es imposible que conociera la existencia, y por esta razón no aparece referencia en ningún texto mesopotámico conocido al planeta o planetoide Plutón, así como de los planetas Urano y Neptuno,  con los que completar un Sistema Solar de diez componentes + la Luna.+ «Nibiru» que suponen los partidarios de Zecharia Sitchin representa esta imagen.

Supuesto conocimiento mesopotámico del Sistema Solar, según el  sello VA 243, en el siglo XXIV-XXII a.c.

A estas razones podemos añadir otras como que el  término  «Ni-bi-ru» o «Ne.be.ru», y que ciertamente en algunos textos neo-babilónicos aparece como característica del «ente astral» relacionado con el dios Marduk. –  Su traducción  viene a ser «el que cruza»-, resulta negativo que puede relacionarse con éste  cilindro-sello por la razón que el dios Marduk, como tal, es  desconocido como deidad  en el panteón supremo de Akkad , siglos XXIV-XXII  a.c. , y cuya aparición histórica  debe emparejarse con el ascenso de la ciudad de Babilonia al poder en Mesopotamia y por tanto,  como muy pronto, con  el fin de la III dinastía de Ur  en el siglo XX a.c.  Es más,   en ningún momento es elevado a la dignidad suprema del panteón mesopotámico hasta  el asentamiento  del poderío soberano  kassita en Babilonia en el siglo XVIII a.c.

De igual manera,  y esto si hubiera sido significativo, ninguna deidad anterior  conocida tomó como signo astral tal planeta. El dios Marduk siempre que ha sido asimilado,  lo fue con  Mercurio,»udu.idim.gu» en  sumerio (tablilla K 6174), con la «Estrella Polar», «thu-ban» en acadio (Enuma Elish, 5) ,  o bien con Júpiter en el «Mul.apin», un tratado astrológico babilonio.

Aceptando la posibilidad, por ejemplo, que el motivo central se trate de una estrella, dentro de éstas a la «Estrella Polar»,  y por tanto una representación de Marduk o de un dios asimilable. Es de notar que la estructura del firmamento sumerio consistía en un bóveda semi-esférica asentada en los bordes de un «disco plano» que era la Tierra y donde «thu-ban» representaba el punto álgido de la elíptica, «coronando»  al resto de las estrellas y no  como eje.

« Cuando  las estrellas de Enlil han finalizado, una gran estrella, aunque su luz es tenue, divide el firmamento y permanece ahí, es «sag.me.gar» (Júpiter…), la estrella de Marduk, que cambia su posición y la que cruza,  («ne.be.ru»…),  el cielo » Pasaje del «Mul.Apin» sobre texto sumerio-babilónico del siglo VII a.c., de una recopilación anterior  realizada en el siglo X a.c.

Anexo: Debo añadir que los cilindros- sellos tenían la consideración de «amuletos», aquí habría  que recordar la importancia que tenía el «perder el nombre» en los textos punitivos mesopotámicos, así como que eran utilizados en los rituales «maqlu» vinculados al remedio de maleficios y prácticas mágicas de los «kassatu» o  las «kassaptu», los hechiceros y las brujas.  Y para terminar una sugerencia:  Cojan lo descrito aquí como explicación plausible para éste cilindro-sello , y que yo titularía como «Adiós a las armas»,   ante lo evidente de la composición que representa,  y hagan Udes. lo mismo.

Referencias:

«Ancient Near Eastern cylinder seals from Marcopolic Collection» Beatrice Teisser (1984)

«The Myth of the sumerian 12th planet» Michael S. Heiser (2009)

en.www.wikipedia.com

Fotos: Wikipedia y otros